Con las cosas de comer también se juega. [Vol. 4]

Day 1,580, 14:45 Published in Spain Spain by Mojo Jojo23
NOTA: He dividido el volumen 4 en diez partes para facilitar la lectura. Espero que les sea más cómoda leerlo con la guía de los epígrafes.

I. "En episodios anteriores".

Permítanme una vez más interferir en la lista de prensa publicando otra entrega de tan extravagante monográfico. Vamos ya por el cuarto volumen y supongo que algunos lectores querrán que antes de continuar les refresque la memoria o bien que entre en antecedentes, de modo que conviene empezar con un somero vistazo sobre las ideas expresadas en capitulos anteriores:

Volumen 1: Constata simplemente que existe un gran volumen de alusiones al hecho alimentario en nuestro lenguaje (prensa de eEspaña, comments inclusive) y como apunte personal se indica que los campos semánticos derivados de la ingesta/degustación supone una tercera fuente de metáforas de origen corporal a sumar a otras dos que son más evidentes: la escatológica y la erótica/pornográfica.

Volumen 2: Se ocupa de la genealogía de la metáfora de la guerra como festín, metáfora que explica como en eRepublik se haya dado el nombre de alimentos a operaciones militares llevadas a cabo entre varios aliados.

Volumen 3: Se centra en los motes “gastroanómicos” (otro palabro mejor no se me ocurre) que hemos dado a muchos de nuestros enemigos. Se concluye que los alimentos epónimos son ajenos a toda etiqueta en la mesa y que ello los convierte en una señal de infantilización, salvajismo o incultura. Finalmente se hace un repaso atropellado al paradigmático caso francés para recalcar que lo que se espera del enemigo es ante todo la transgresión, la inversión de los valores culinarios.


[Personaje que pensé para el avatar de una multi que se habría encargado de publicar todo esto]


II. Feedback de los comments del volumen III.

Lo cierto es que el tema es amplio y complejo, da tanto juego que no se puede dar por cerrado y menos todavía si la redacción debe adecuarse a los estándares de eR. Al menos tenemos la opción de intercambiar ideas a través de los comments y el volumen anterior es la mejor prueba de ello. En ese caso el ciudadano Rolbap completó la hipótesis central del artículo, observando la insalubridad y pringosidad de todos los alimentos usados en los motes. Se expresaba Rolbap en unos términos que traslucían como la medicalización de la nutrición va adquiriendo connotaciones moralizantes. Pocos días después pude ver como un bloguero de la web de “El País” mostraba ese mismo tipo de asociaciones.

Comento todo esto para destacar el carácter caleidoscópico difícil de abarcar del tema tratado y más cuando yo mismo si me mandan a escribír sobre la respiración seguro que terminaría hablando de la sopa primordial que dio origen a la vida. Volviendo sobre lo andado, sirva un tópico de la VR para comprender el artículo anterior: los estadounidenses blancos reducen al pollo frito la dieta de los afroamericanos, alimento que cumple uno por uno los mismos requisitos de esos otros que en eEspaña hemos asignado a nuestros enemigos.

Sobre las excepciones indicadas en los comments basadas a su vez en excepciones de la terminología que brasileños usan para llamar al enemigo, debo hacer hincapié en que se necesita un conocimiento mayor del contexto del imaginario gastroalimentario brasileño para poder captar el significado que en este pueda tener. Y les pongo otro ejemplo de la VR: “verduleros” es el mote que en la VR los argentinos han dado a... perdonen no recuerdo si a paraguayos o bolivianos, mote que bien puede explicarse por la ocupación que se les suele achacar pero que no puede dejar de tener mayores reminiscencias en un país en el que los hábitos carnívoros -así por aquí los llamamos “parrisheros”- son parte importante de la identidad nacional.


[Por Sajler, periodista serbio. Nótese que no todos los países adjudican el mismo alimento a un mismo enemigo)


III. Últimos platos del menú.

Por otro lado siguen apareciendo más ejemplos del fenómeno estudiado mientras me he demorado en redactar el volumen 4: aquel joven padre argentino digievolucionado a homosexual catalán sin hijos publicó recientemente un artículo en el que la potencia otomana aparecía cual voraz pacman, lo que en castellano llamamos comecocos. Sirva ese post como muestra del éxito que tiene en este juego bélico la visión de las relaciones entre los países desde la óptica del sistema disgestivo y que conste que no hablamos de uno cualquiera: el pacman/comecocos es un ente devorador cuya fisiología altamente especializada parece a todas luces infinitamente más simple que la de esas ratas con plumas que en las ciudades cagan al vuelo.

El comecocos es, como mera boca casi siempre abierta, un emblema estilizado al máximo de la glotonería, una máscara concentrada en un ángulo de apertura maxilar, casi al igual que sucede con el smiley o el awesome, los cuales también se definen por un peculiar gesto de su boca. Pero al contrario que estos últimos no consigna la saciedad plena de un hambre de satisfacciones, sino que más bien da testimonio de un desorden bulímico.


[Por siddy/serguma]

Por desgracia también hubo quien se empeñó en mostrarnos la otra cara de la moneda bélico-digestiva en un artículo de pésima factura. Uno que anunciaba que nos habían comido para al más puro modo parbelliano mostrarnos seguidamente el consiguiente resultado. Supongo que desvaríos de alguna multi adscrita a lo que me gusta llamar proyecto géminis. Más recientemente también se ha hablado en terminos gastronómicos de un supuesto país: mexpaña; y por otro lado lolo999 nos ha mostrado como entre los brasileños se perpetran adiciones frutales a nuestra entrañable paella valenciana.


[Por lolo999]


IV. Sobre las recetas de cocina como colmo del spam.

Los brasileños nos aportan otro incidente de mayor enjundia nos sirve para tratar de una vez los puntos previstos para este volumen. Pues una reaparición sin duda estelar del tracto digestivo -aunque sea en diferido- ha sido esa variedad de diálogo entre besugos que son los intercambios de recetas. Quien haya seguido la prensa habrá visto como en fechas cercanas se celebró con nuestros adversarios brasileños un evento cultural de esta categoría a través de los comments del boletín del Ministerio de Defensa.

Era inevitable en este monográfico aludir en algún momento a las recetas de cocina. De todos es sabido que su copypaste es una vieja técnica de troleo para contaminar posteos con spam absurdo alterando el curso del feedback. Al parecer tuput AKA himan fue cinturón negro en este arte y quizá se pueda mencionar a ardacho como el principal carcamal superviviente custodio de esta tradición. A priori este somero apunte podría parecerles suficiente peeeero es que hay más.

En primer lugar recordemos la tesis del anterior artículo: a través de ciertos motes ridiculizamos a nuestros enemigos asociándolos de un modo u otro a un caos culinario total, a una perversa transgresión en los usos alimentarios, siempre amantes de lo insalubre, lo insano y dados a una cierta falta de modales en la mesa. Siguiendo esta regla de tres en el caso de acudir a la gastronomía para realzar una hipotética identidad (e)nacional lo más previsible sería que nos viéramos como todo lo contrario: el no va más del refinamiento gastronómico como prueba irrefutable de una supuesta superioridad cultural y ¿Que mayor registro del refinamiento en la cocina patria que unas recetas que son legado de tantas generaciones?


[Por los gnomozz, la imagen prueba el origen carlista de los huevos fritos]

¿Hay pues un mensaje subliminal en estos duelos de recetas o se trata de una mera lucha de spam? Aunque no lo crean, pienso que ver poco más que spam sería rizar el rizo. La prueba está en que tal clase de spam de recetario se usa indistintamente con conciudadanos o con enemigos. Por tanto, con pocas salvedades ciertamente las recetas son sólo un ingrediente de troleo en cuanto se consideran como algo fuera de lugar. Como veremos más adelante, de existir unos emblemas patrios asociados al aparato digestivo y a los paladares mucho me temo que no son para situarnos mucho por encima de nuestros rivales bélicos, lo cual demuestra que tales sustancias con habitual descenso por el esófago no han sido investidas de significados por oposición a otros enemigos que nosotros mismos.

Las excepciones que puedo recordar en un uso identitario de las recetas: 1) El proyecto de xender_xenocide de un recetario nacional a través de invitados a su periódico-programa de cocina, uno por comunidad autónoma. Sólo publicó el artículo dedicado a la cocina de Asturias con Kaylee de invitada. La realidad plural de la gastronomía española VR tuvo en su momento otra vía de expresión en el nombre de ORGs y de compañías de comidas, véase como ejemplo la ORG “Gofio para la milicia” de Superi. 2) La presumible multi jose ojete al perpretar un troleo al list de la prensa con la receta típica griega logró numerosos votos y hasta suscripciones de ciudadanos helenos. Aunque en origen debió concebirse como troleo para el desconcierto, véase como la reacción de los griegos respondió a un sentimiento de identidad, una identidad que en el caso de eEspaña si trata del paladar -repito- va más bien por otros derroteros. Al poco tiempo -si es que no fue casi simultáneamente- jose ojete publicó también una muestra de la gastronomía armenia que pasó sin pena ni gloria. Su periódico ha sido borrado, una verdadera desgracia.

Es curioso que la palabra SPAM haga referencia en origen a un producto cárnico en conserva deleznable pero que haya terminado entiendiéndose como SPAM más efectivo precisamente el soporte por excelencia de la cultura culinaria que son las recetas.


[Esta lata la he visto a 3.95€ por si alguien quiere que se la envíe]


V. La transgresión alimentaria como señal de identida😛 niños, gatos, drojas, melocotones, canela, mikolápices y amargamiento de pepinos.

Como se trató en el artículo precedente antagonismo y transgresión alimentaria tienen su colmo en el caso gabacho. Sin embargo tal binomio no se circunscribe sólo a las relaciones con el exterior, también tiene parangón en las dinámicas internas de nuestro país. Es evidente por ejemplo en la etiqueta “comeniños” compartida/disputada entre poneros y boieros. Ambos grupos de gamers han parodiado el más terrible canibalismo para reivindicar su diferencia respecto a los demás, para ironizar acerca de las suspicacias que suscitan sus peculiaridades. Un caso parecido lo representa el uso de una imagen de Alf por uno de los mayores momios del juego, RaulCV. No hay que olvidar que el alienígena tenía una cierta predilección por comer gatos.


[Ojalá aproveche los bigotes para cuerdas de violín]

Es curioso que el padre de familia en esa serie fuese doblado al castellano con la misma entrañable voz en off de la película underground Pink Flamingos, cuya escena más célebre desisto en describirles pero que viene a mostrar todo lo contrario al nickname de una multi atribuida a chicho: culito tragón. Y esto viene a cuento porque al igual que en su momento se hizo con los franceses (los cuales comian ancas de rana y pisan fresas) la transgresión alimentaria como argumento para diferenciar personajes y/o sectores de la propia ciudadanía española no sólo ha funcionado través de la atribución de alimentos impropios (niños, gatos), sino que también ha incluido el uso inapropiado de alimentos.

A este respecto la lista de ejemplos no es corta empezando por el amargamiento de pepinos tan mentado en una época por criogenio, siguiendo por la aplicación de canela en sus partes reivindicada por Kekos00 por mimesis con el cineasta cantarín Nacho Vigalondo, el lanzamiento de melocotones por fermusita (fruta peluda que tantas alergias ocasiona al igual que la fresita emblemática de cierto reality), el uso que siko le dió a los mikolápices de creer las pruebas presentadas por sombrax... Por no hablar de las drojas en el cola cao tantas veces aducidas como causa de desorden conductual y por ende diferencia frente a la masa social, una diferencia por ingesta de compuestos químicos que algunas veces no es fortuita como se posible apreciar en la disyuntiva de la pastilla roja y la pastilla azul originaria de matrix y planteada varias veces por montesdeoca, una elección imposible según la ya lejana prescripción de haloperidol por parte de un conocido estudiante de medicina.


[¿Cual hubieran cogido los hermanos dalton?]

Volviendo a las tradiciones gastronómicas infanticidas, debo indicar que desconozco las diferencias entre ambas pero que mucho me temo que toda sotisficación de los sorbedores de ramen es sólo atribuible al breve paso de la rojeras morritxu por sus filas. Es legendaria es la destreza de las hermanas como cocineras y reposteras, aunque al parecer no tanto como la de otro cocinillas del norte, el cual ha llegado a exhibir su arte en ETB. Dejando los cotilleos, lo que si parece claro es que los niños -aunque devorados por grupos minoritarios- son de los escasos alimentos que consumidos en estado sólido forman parte del acervo gastronómico de eEspaña.


VI. Especificidad de la tradición gastronómica de eEspaña (no calca la de la España real).

Otra interesante característica de este tipo de cocina ingame es que es totalmente endógena, surgida espontáneamente de la propia dinámica del juego sin calcar tipismos de la VR (a no ser que nos remontemos al canibalismo evidente en la Sima de los huesos de Atapuerca o queramos suponer la práctica de los infanticidios propios del rito moloch en el Cádiz de época fenicia). En su origen netamente erepublikano, en su especificidad, se asemeja el consumo de niños a casi todos los demás componentes de la dieta de los eEspañoles, lo cual contrasta bastante con los vínculos con hábitos alimentarios de la VR que siempre presuponemos si pensamos en el enemigo (con la excepción del anticongelante en el vino atribuido a los gabachos). Este hecho prueba como la comunidad de juego está viva y es susceptible de ir inventándose a si misma .

Es curioso como sólo una ciudadana que no es española VR (CarolinaM) luce en su avatar un icono alimentario tan patrio en la VR como es naranjito. Es esta de las contadísimas concesiones erepublikanas a lo que en la VR se consideraría tipical spanish, las otras serían la temática vinícola o el omnipresente toro de osborne, pero en comparación con otros comestibles apenas se mencionan los consabidos platos nacionales y es de lo más raro la alusión al pintxo o la tapa fuera del contexto de las KDDs (que según algunas imágenes también tienden a la cocina oriental). Ya que CarolinaM se identifica con una naranja, es también mencionable la aparición de los cítricos en un personaje denominado “superlimón” en las viñetas de Nesan que no sé si tiene el mismo significado referente al sabor amargo que al parecer tenía el apelativo “limón” en la correspondencia de aquella multi tan obcecada denominada sablemortal.


VII. Los terrenos comunes de la alimentación y la escatología: el salseo es shitstorm y se ameniza con dos tipos de picoteo (palomitas y chocopoints).

A los bebés y tiernos infantes se suman dos snacks que también precisan una laboriosa fase de masticación y que al parecer son de ingenta frecuente y generalizada: las palomitas y los chocopoints. Ambos elementos conllevan muchas veces un maridaje especial entre paladares y culos... pues no son sino resultados divergentes del salseo, término que en última instancia nos remite a las salsas, a la sabrosura y el sabooooooor... pero que sin embargo muchas veces se rotula con el epígrafe de impresionante metereología anal: “shitstorm”. Es impresionante cuando no simplemente asqueroso apreciar como comer palomitas deviene en una especie de burbuja protectora de lo que se entiende como mierda huracanada (al fin y al cabo lo que el cuerpo expulsa tras la digestión). Si las palomitas se presentan como un consumo consecuente a la profusión de mierda, existe otro comestible ligado a las materias fecales pues forma parte de los remedios caseros que regulan su correcta expulsión, me estoy refiriendo al all bran. Tenemos por tanto inscritos en el campo alimentario el alfa (all bran) y omega (palomitas, o pipes en la variante de sombrax) de la escatología.


[El chicha superi las llama cotufas]

Una suerte mejor que las palomitas, por siempre asociadas a la mierda, corrieron en su tiempo las cebollas. Me explico: si en palabras de tuput la causa de su prohibición por ley era evitar que lloraran las madres, quizá era en previsión de no contaminar con secreciones corporales lo que al fin y al cabo no deja de ser un comestible (no olviden el esquema mental expuesto en el volumen primero). El puerro, propuesto por tuput como ingrediente alternativo a la cebolla, quizá lo relacione con una orden de caballeros mencionados en una historia de Italo Calvino, quien sabe si inventores bálticos de la purrusalda.


[Un poco de empatía]

Se menciona en ese relato del autor italiano un supuesto poder afrodisiaco de los puerros seguramente por la misma analogía morfológica que en nuestro caso hizo fantasear a miembros del CNT con una milicia llamada “los pepinos de bakunin”, posteriormente denominación fugaz de un partido toveado por Juracan. Más cercana a los modelos literarios de la VR se presenta Lantanique al mezclar dos placeres de la vida, algo similar sucede con el nombre de esa milicia que aúna besos y bombones.

De chocopoints estábamos escribiendo más arriba y es así mismo destacable como el prefijo choco- implica que los admins añaden una pizca de chocolate al salseo, de la misma manera que algunos cocineros hacen con la salsa de los estofados. Esta última coincidencia de ingredientes eR/VR nos hace intuir un cierto snobismo entre los trolls, insaciables consumidores habituales de tales chocopoints. No es de extrañar que hayan desarrollado una suerte de sibaritismo. Y es que el troll sólo crece si se nutre como si a todas horas fuese después de medianoche, tal y como advierte la máxima: “don't feed the troll”. Y hablando de chocopoints es curioso como la afición a repartir chocolate ya era apreciable en el viudo de Saix justo antes de ser moderador. Como algunos señaló alguno de los sectarios en su antiguo foro, por los inicios del gran revival varnishista, el susodicho goldbuguero II se dedicaba a interpelar con el interrogante ¿Chocolate negro o chocolate blanco?


[Pero en eR Charly es uno más de los niños]


VIII. Un curioso caso de bilocación por sobredosis de chocopoints y un apunte sobre las fuentes de proteínas.

Antiguamente el alto consumo de chocopoints producían intoxicación mortal de la cuenta. Uno de estos casos de sobredosis inducida sirve para centrarnos en el único caso digno de mención de identificación entre un ciudadano y un animal de granja o de corral (fuentes de proteinas). Por si no lo recuerdan: tenemos una oveja (siddy), un conejo (un servidor), un gallo (saik). Pero ninguno de estos motes tiene una enjundia igual a la multicuenta pavo, una de las tantas no atribuibles a arrak de arrakalis, concretamente la usada para la manifestación de outsmarter durante su estancia en el limbo por empacho de chocopoints. Dos aspectos hacen interesante a este pavo: véase que mientras la cuenta principal está virtualmente muerta el pájaro elegido para hacer acto de presencia es por la putrefaccción de su carne, más lenta que la de otras aves, un icono pictográfico de eternidad y así aparece en un cuadro renacentista que representa a san Jerónimo. En un segundo término tenemos su denominación en inglés (turkey) y en portugués (peru) que nos despistan un poco sobre las futuras inclinaciones en AAEE del entonces bisoño ciudadano.


[glu glu glu]

Otras aves de corral aparte del pavo y el gallo mencionables en un monográfico como éste son una gallina presente en unos test que montesdeoca tuvo a bien postear en los comments durante su apogeo, y por supuesto el inevitable pollo sin cabeza, en nuestro país forzosamente asociado a andreíta pero que en todo caso es sin duda el ingrediente más internacional pues tantos en el largo y ancho eMundo lo han querido asar o llevar a la cazuela y lo cual explica que el juego tengamos en lo más alto de su jerarquía a un personaje al que se le da nombre de vajilla: plato. Su animal antagonista fue pronto identificado por los jugadores como fuente infinita de fuerza, en cefalopódica eucaristía: me refiero al Pulpo Paul cuyos tentáculos generosamente cubiertos de pimentón fueron inocentemente reclamados por los incrédulos, tan ansiosos como los novatos en los cultos mistéricos por la sangre de Mitra.

Podríamos contabilizar también como fuentes proteínicas las chuletas que son especialidad de la antes mencionada carolinaM tiene pero eso ya sería ocuparnos de la gastronomía de eColombia.


[De su recetario sandinista]


IX. La gula como metonimia de los excesos, la subversión y el caos.

La voracidad idiosincrática de los trolls no se restringe a los chocopoints y nos conduce de forma obligada a otra cuestión: la gula. Hay que mencionar como en un principio este pecado original fue concebido por la moralidad cristiana en un sentido amplio, más allá de la ingesta desmesurada de alimentos y bebidas; esto es, abarcando toda clase de excesos. Si nos fijamos en ciertos símbolos o iconografías surgidas ingame es inferible que las representaciones de la glotonería operan como metonimias del exceso, de un exceso como norma principal y meta final de este juego.

En este sentido la apología de la ingesta pantagruélica e indiscriminada de sólidos y líquidos se condensó en las viejas siglas de un grupúsculo en un tiempo muy dado a los excesos, obviamente me refiero al significado de P.B.C. (Partido del Bebercio y el Comercio), antecedente de quienes con ese genoma identitario hoy no podían denominarse de otro modo que E.A.T. (comer). Véase la vieja polémica interna acerca de si la muchacha que aparece en el avatar clásico del P.B.C. con señales evidentes de haber consumido gran cantidad de alcohol merece o no el apelativo de “la gorda” o “gordi”. Esta controversia a mi modo de ver inexplicable (no aprecio signos de sobrepeso) responde a una especie de necesidad de ser representados por una especie de Venus prehistórica de los excesos. Aunque si bien los cultos a la fecundidad se materializaban en las conocidas formas esteatopígicas, aquí el culto a los excesos, a la gula en suma, obliga a sobredimensionar la adiposidad de quien encarna con su imagen el espíritu glotón -esto es, dado a los excesos- del partido en cuestión.


[¿Está tan gorda como ellos dicen?]

Otras veces la glotonería como metáfora de un modelo de juego se manifiesta de una forma más explícita como sucede con ese insufrible spammer extranjero denominado Pizza the Hutt, con la imagen del personaje homónimo de Spaceballs, un personaje que últimamente también he visto en el avatar de catlander. Debe recordarse que esta figura llega a practicar la autofagia y que ello no significa que devore coches.


[¿catlander terminará devorándose a si mismo?]

Sobre Alwoske y el cookie monster de su avatar no puedo decir nada ya que apenas coincidimos, si fui testigo de la existencia de un Batallón Spencer cuya figura inspiradora exhibe un apetito extraordinario en varias de sus películas, recuerdo en concreto su pasión por las baked beans, hasta el punto de no ser difícil ver en tales alubias un remedo de las espinacas de Popeye. Ahora que lo recuerdo Bud Spencer también se hizo llamar Banana Joe en una película suya ambientada en Brasil. Quizá algún erepublikano concluiría adonde fueres haz lo que vieres.


X. Genealogía de la trilogía líquida vino-café-fanta como fundamento de la dieta en eEspaña.

No mencioné anteriormente el componente etílico del grupo anarkólico pues entiendo que responde a un fenómeno más amplio. Mi hipótesis es que el eje de la gastronomía de eEspaña lo componen principalmente tres bebidas, como ya habran adivinado: el café, la fanta y el vino. Y es que a falta de un estudio estadístico exhaustivo parece obvio que ante todo nos vemos a nosotros mismos con una gran tendencia a beber estos tres líquidos, de ahí que antes señalase que pocos alimentos sólidos pueden considerarse parte de nuestra dieta.

Resulta llamativo que hayamos forjado una serie de motes para nuestros enemigos basados en la comensalidad grotesca de unos infraalimentos sucios e insanos... pero que al mismo tiempo nuestro top gastronómico competa a un breve tránsito por los gaznates más que a las sutilezas del paladar. Me explico: nuestros enemigos al menos mastican lo que comen, los líquidos se tragan sin más. De este modo quedamos asimilados a los lactantes, a una dieta succionadora sin dientes, e incluso a una dieta sin boca si nos remitimos a las sondas nasogástricas o técnicas similares. Obviando que tanto café como vino son objeto de atención por los gourmets en la VR, en el caso erepublikano sitúa el acto alimentario por excelencia que es su ingesta a un nivel inferior al del propio Robocop, hombre encerrado en una máquina condenado a subsistir a base de potitos. Enciendan ahora sus porros pues da comienzo otro momento estelar de alocadas interpretaciones de nuestro código simbólico.

No es casualidad el auge de los términos fanta y café como palabras clave en la vida de nuestra comunidad, ni tampoco el éxito de la reivindicación del vino y bebidas espirituosas en general como tradición troll. En este último caso podríamos remitirnos a su raigambre báquica por la que alcohol y desenfreno serían equivalentes, pero no podríamos quedarnos ahí ¿Es que a estas alturas no son conocidas y de uso común otras substancias desinhibidoras? Mucho me temo que si, pero el alcohol aparte de ser tolerado social y legalmente y de formar parte de nuestra historia (más en el caso del vino en torno al cual se ha establecido una “cultura), ofrece como líquido una redundancia de dispares significados que multiplica su eficiencia como símbolo.


[Una autoridad en la materia]

Si en el caso del vino y los alcoholes en general es ya evidente en la VR como afectan al ánimo del sujeto, véase como si hablamos de fantas o de café se da por descontado un estado concreto de los individuo aludidos hasta el punto que tal estado pareciera un efecto de tales bebidas, lo cual es asombroso si tenemos en cuenta: 1) Que el café en la VR tiene un efecto estimulante totalmente opuesto al que se le da en eRepublik y ello es así porque en origen se refiere al coffee break de los oficinistas, :rotocafé: en la jerga prestada de quienes no dejan de ser bebedores de mate. 2) Que la fanta afecta visiblemente sobre todo a quien la paga, pero no deja de tener consecuencias sobre el espíritu de quien la consume, causando en ambos una especie de vicio insaciable de tal manera que surgen redes de íncubos y súcubos o -si así lo prefieren- una especie servidumbre vampírica en el cual el refresco de naranja no deja de ser un trasunto de la sangre aguada de los donantes de fantas.


[De la cuenta imageshack de sombrax]

Es apreciable por tanto en el uso que hacemos de los términos como las tres bebidas han devenido en producto de la destilación de los propios actos sociales con las que se han asociado. En cristiano: café/fanta/vino (y alcoholes en general) participan de un arquetipo que se remonta a los brebajes o las pócimas pues se les ha investido de poderes mágicos, con un efecto determinado más allá de las voluntades de los sujetos, más potentes que el filtro del propio Panoramix pues basta con su sóla mención. Como brebajes o pócimas erepublikanas serían de algún modo partícipes de la misma lógica de los productos milagro, una lógica que ha dado lugar al concepto alimento-medicina cuyo paradigma es el actimel, al menos hasta hace pocos años el producto concreto más vendido en los hipermercados de nuestro país.

Al serle atribuidos efectos consustanciales al acto social que se les asocia se subraya la naturaleza social del individuo y es ahí donde se explica como han arraigado estos símbolos tan sencillos. Es relativamente fácil hablar de los demás en términos de supuestos platos típicos sean o no comida basura pero cuando se trata de reflejar nuestras propias dinámicas es imposible encontrar iconos alimentarios más aptos que las bebidas. Y esto es así porque en la propia VR no existe alimento típico sólido concreto que presida un evento social común a todos los españoles muy al contrario de lo que sucede con las bebidas. Todo el mundo ha quedado para tomar café (o se ha escaqueado tomándolo como pretexto) y/o ha participado en un botellón y al menos en el caso de los varones de todas las edades ha pagado fantas o equivalentes, es decir: todo el mundo tiene el mismo bagaje de ingesta de las mismas bebidas en reuniones sociales.


[La muchachada cocinándose los higadillos]

Por eso café será más eficiente en el plano simbólico que paella a la hora de definir una actitud o un rol en un momento de la dinámica social. Una vez fijado tal código es su alta reiteración en los textos lo que me hace hablar ahora de una trilogía de bebidas como el fundamento de los usos gastronómicos de eEspaña, nada que ver con la dieta mediterránea ni con los contundentes guisos del norte, otra muestra de como los propios jugadores van creando ellos mismos la idiosincracia del país por el que juegan. Un caso opuesto, en lo que tiene de calco total de la VR, sería la celebración del tereré como bebida nacional del eParaguay en un artículo de Martu.

Existe además un tercer nivel de interpretación, más psicologizante y en la línea de los volúmenes anteriores. Más arriba mencioné como una dieta nacional basada en líquidos nos asimilaría a los lactantes, esto daría pie a un análisis del gusto por las cool pics, me limitaré a mencionar que hay otros signos de fijaciones orales como sería el caso de no sólo tener por nickname el nombre de una bebida (ballantines) sino complementarlo en algunos momentos con avatares de dos succionadoras, eterna niña vampira la una (de “déjame entrar”), y la otra célebre campeona de apnea en la industria del porno. Dejando al margen esta clase de comentarios... al retrotraernos a la lactancia, la ausencia de dentición al principio de esta fase nos remitiría a una ideas expuesta en el volumen 2 de esta serie: la mordedura es la forma más elemental de agresión, de lo que se infiere que la ingesta de líquidos como café, fanta o vino sería a efectos simbólicos la forma de comensalidad más opuesta a toda noción de violencia y más cercana a la camaradería como la que se presupone a un batallón y estoy pensando en el 7up.


[Quien fuera Bismarck para hacer leyes]

Respecto al anecdotario ingame en torno a esta trilogía podemos empezar por la ambivalencia del café. Es destacable como las plantaciones antiguamente achacadas a taguaro hoy no tendrían mucho sentido si pensamos que a su lado muchos de los últimos presidentes han sido morfinómanos recalcitrantes y por ello los mayores latifundistas del Triangulo de Oro del opio. Aparte del café enunciado como forma de autoironía (como parece el de minara martos y sus melancolicos pagafanteros), sirva el saimacismo de taguaro como modelo de un café de tostado negativo pues con él se enmarca en el territorio del absentismo decepcionante mientras que de otra parte tendríamos el :cafe: de tostado neutro con el que se hace aviso de distanciamiento, siendo qablo el ejemplo más claro.


[De un país de mates llegó :rotocafe🙂

En cuanto al pagafantismo y sus reminiscencias brujeriles basta con mencionar como la histeria colectiva achacó a este fenómeno la (a)corta(da) presidencia de Ienne, sirviendo ello para enmascar tanto los intereses espúreos, miedos razonables y causas humorales que llevaron a una dechada de mediocridad al cargo presidencial. Leyendo la prensa parecía que simplemente una gran Fanta Nodriza había enviado sus imbatibles fantitas de combate a las urnas. Se da por otro lado continuamente en el juego un pagafantismo invisible de baja intensidad entre varones al cual por el momento no se le ha puesto nombre.

En cuanto al vino y otras bebidas alcóholicas, su apología como práctica troll se ha cifrado en la conformación del anarkolismo como movimiento subversivo y engloba también hechos tales como la Ley del Vino, la supuesta borrachera de kiwii en el Congreso, o el nombre del periódico de la evidente multi simpatizante de los CDM denominada mandrill: Peste a vino. Me parece muy curioso que sólo tenga constancia de la participación de perroflautas momios en la vendimia VR y que sólo sean algunos rojales los que siempre terminan saludando con un brindis, ya sea Salud (como Suarotz) o Zalú (como decía uno que no recuerdo). Destaco esta curiosidad por ser más bien de la derecha u oportunistas los mayores valedores de la Ley del Vino. Al menos Ardacho suele llamar a la cerveza en su feisbu “mi enemiga”, librando con ella una lucha sin cuartel.


[Una imagen tantas veces posteada]


XI. Un final de los tantos posibles.

Y así por fin llegamos al final, valga la “rebuznancia” que decía aquel. Piensa que si te costó leerlo, más me costó a mi escribirlo, aunque si no fuera por eso tampoco lo hubiera intentado. Para hacer más ligero este último volumen he ido incrustando anécdotas y sutiles maledicencias, espero que al menos se hayan reido a la vez que pensado. Han leído un texto anómalo en juego porque si se fijan a lo largo de los distintos artículos he ido interpretando, que no contando, una Historia que no deja de desmerecer la inicial mayúscula por el hecho nada accidental de no tener sujeto, algo que va totalmente en contra de la esencia egocéntrica de este mundo. He ido hilvanando a partir de lo que recuerdo haber leido, a partir los textos como si el lenguaje tuviera una vida propia anterior a ser reproducido por los players, una vida que es la única que se puede vivir si el juego es un juego de texto. Me he centrado en la comida porque es un fenómeno universal en la VR y algo novedoso prestarle atención a sus menciones en eR. Por otro lado no negaré cierto interés por la industria alimentaria a lo largo del tiempo y en los discursos en torno al cuerpo.

Espero que lo hayan disfrutado (o no). Saludos.

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