Crónica de un Argentino en Chile.

Day 1,581, 15:25 Published in Chile Argentina by Troupe Blue


- Suerte Lorito, a partir de ahora es cada uno por su cuenta -. Fueron las palabras de Omar, en aquella noche fría, antes de embarcarme en el barco que finalmente me acercaría a Santiago. Recuerdo ir repitiendo una y otra vez, casi como un rosario, “guevon”, “no te dije po, que ete e un guevon”.
La mañana me encontró desayunando en un bar de mala muerte en Santiago. Pude reponer las energías necesarias para acercarme a donde estaría mi primer contacto. El Chipi Barijo.
Me entrego los papeles con la nacionalidad echilena, una fabrica de comidas, y un par de granjas en las afueras del centro. Contento tome un par de formularios sobre los partidos politicos, y me aleje.
- Quiero vivir, quiero una casa, quiero un lugar donde mis hijos puedan crecer en paz – recuerdo haberles dicho a los reclutadores del ejercito cuando vinieron en mi búsqueda. De poco sirivio. Casi sin quererlo me encontraba en la primera linea, luchando en Nueva Zelanda por nuevas tierras chilenas. El gobierno argentino me había “soltado la mano”. Vi caer al chipibarijo, vi caer a muchos colegas en combate. Pero sobrevivi.
Aunque la guerra se perdio.
Volví nuevamente a Chile. Me fui al sur esta vez. No quería problemas. Los contactos con el gobierno argentino continuaban siendo inexistentes. Angustiado, hostigado por el ejercito decidí aislarme en Estados Unidos. “ Homeless Man” vagando por el mundo, podría haber sido algun titulo de un tema musical. Hubiese querido saber tocar la guitarra. Pero el exilio me hizo mas fuerte. Entrene, me alimente bien durante muchas semanas. Crecieron mis fabricas en Chile. Y decidi volver, ya como un terrateniente bien puesto. Y volvi.
Creci dentro del partido Union Progresista. Llegue a ser el confidente, “el consegleiri” del presidente del partido. Asumi cargo de capitan en mi regimiento dentro del ejercito “Chile Training Milita” . Pero cuando no lo esperaba, cuando habia bajado finalmente la guardia, todo sucedió.
KA-52, un eciudadano chileno, me invito una noche a debatir junto con el resto de los colegas el plan de accion contra Nueva Zelanda. He de confesar que algunos interrogantes surgieron antes de comprometer mi participación para dicha reunion, pero termine accediendo. Al llegar, efectivamente KA-52, me estaba esperando, pero no precisamente para hablar. Alrededor de 200 echilenos con armas q5 y q6 me rodearon.
- Vos sos Argentino, Troupe….- me dijo KA-52.
- Que va wewon – le respondi.
Y esa sola frase basto para dar inicio a la balacera mas ruidoso y violenta de mi vida. Disparos por todos lados, casi sin refugio o lugar para correr, tuve que apelar a las bazookas que tenia en mi poder. Tres. Tres bazookas para atacar a 200 enemigos, y luego correr, y correr, y correr. Y dispare. Ho! Bien sabe dios que dispare. Dispare y corri. Corri hasta perderme en la noche.
Logre comunicarme con Omar, pero al parecer hubo cambios en el gobierno, y mis antecedentes, toda mi vida anterior se ha perdido. Incluso tome contacto con embajadores Argentinos. Ninguno quiere saber nada de mi caso.
Asi que aquí estoy, sin patria ni cuartel, un eciudadano en busca, en busca de venganza.