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Bueno aquí de nuevo, reencontrándonos con nuestra historia y si ésta tiene que ver con la guerra de 1879, es oportuno porque estamos en un game de guerras, y las guerras en cualquier parte del tiempo siempre serán como se les denomina.



Este informe está basado en el libro “Catecismo Patriótico” del coronel José Luis Torres (1840-1901), periodista y patriota, además de testigo de esa época aciaga... datos históricos que ademas se conservan en la Biblioteca Nacional del Perú.

AYARZA (Domingo).- Servidor a la Patria y obrero de la civilización. Nació en Ayacucho en 1820. Desde 1843 se dedicó a la carrera militar, obteniendo todos sus ascensos por rigurosa escala.
En 1874 le encomendó el Gobierno una expedición a las montañas de Chanchamayo que desempeñó con notable abnegación y acierto, abriendo a la civilización las extensas comarcas que se extienden a la margen derecha de los ríos Chanchamayo y Tulumayo (Junín). Volvió a Lima en 1876.
Poco tiempo antes de la Batalla de San Juan y Miraflores, fue llamado al servicio activo.
Organizado el ejército en cuatro cuerpos, fue destinado al que mandaba el entonces coronel Andrés A. Cáceres, habiendo merecido el honor de que se le nombrara comandante general de una división.
A horas de la batalla se le oyó decir: “Creo que perderemos la batalla; pero no saldré vivo de ella”. Cumplió su palabra, peleando denodadamente a la cabeza de su división en enero 1881.

ARGUEDAS (Pablo).- Antiguo y valiente coronel, jefe de la 3ª División del Ejército del Norte, su conducta en la batalla de San Juan confirmó su reputación. Un casco de bomba lo sacó del caballo en lo más recio de la acción y caída decidió la derrota de la fuerza que le obedecía, la cual dejó a su jefe moribundo en poder de los vencedores, que apresuraron en ultimarlo.

ABRIL (Máximo Isaac).- Nació en Arequipa y murió en la Batalla de Miraflores a los 51 años de edad. Uno de sus sucesos acaso no muy conocido, se refiere a la víspera de su muerte.
Enfermo de una pulmonía, pocos días antes del 13 de enero de 1881 y traído a Lima en camilla, dejó el lecho del dolor al saber que era inminente una batalla, y no satisfecho con el deber cumplido en San Juan, peleó en Miraflores mientras conservó la existencia.

ALFARO (Juan).- Nació en Lima el 26 de diciembre de 1854. Hizo como oficial del batallón de Guardia Nacional número 6, la Campaña del Sur en 1874 contra la sublevación de Nicolás de Piérola contra Manuel Pardo. Sirvió en la Sección de Contabilidad del Ministerio de Hacienda, y de regreso de Chile, donde estuvo prisionero, se enroló en el Batallón Nº8 de la Reserva de Lima.
A pesar de que, por disposición suprema, los empleados del ramo de Marina estaban exentos del servicio en la reserva, Alfaro no dejó su batallón, y el 15 de enero de 1881 cumplió su deber haciéndose matar como un valiente. Fue uno de los pocos oficiales que sobrevivieron al Combate de Angamos.

ARRIETA (Carlos L.).- Natural de Lima y de origen ecuatoriano, inició su carrera militar en el Regimiento “Constitución” de la Guardia Nacional del Callao. Siendo aún casi niño, peleó en las filas de ese cuerpo el 22 de abril de 1857 defendiendo al régimen del Mariscal Ramón Castilla contra la sublevación de Manuel Ignacio de Vivanco.
Su comportamiento en aquel sangriento combate que dejó más de 120 muertos en el Puerto del Callao (de ahí que Castilla en agradecimiento a su lealtad la elevara a Provincia Constitucional) le dio nombradía de valiente, que nunca desmintió.
Como guardamarina en 1858 tomó parte en varios hechos de armas, en uno de los cuales, combatiendo un buque revolucionado por Mariano Prado en el Callao el 24 de setiembre de 1865 contra el régimen de Juan Antonio Pezet, recibió una herida que se creyó mortal, pero de la que felizmente salvó.
Llegó a ser comandante de fragata, y la guerra con Chile lo encontró de Comandante de Resguardo del Callao. Dejó la pluma de oficinista, para empuñar otra vez su espada-sable de combate; organizó un batallón de voluntarios, “Guardia Chalaca” que debía inmortalizarse por su denuedo en la pelea a la cabeza de estos valientes, cayó noblemente en Miraflores.
La últimas palabras que Carlos Arrieta pronunció poco antes de recibir en el corazón la herida que lo mató fueron dirigidas a su asistente Juan Victoria, quien le instaba para ponerse a salvo cuando ya la batalla estaba completamente perdida: “-¿Huir?, ¡No!...Mejor es morir!”.

ARREDONDO (Mariano).- Cronista de uno de los diarios de Lima, cayó como bueno al pie de su bandera en los campos de Miraflores. Soldado del Batallón Nº6 de la Reserva, supo morir en la demanda dando honra a las filas a las que pertenecía y honrando también al cuerpo periodístico de la Capital.
Era nacido en Cerro de Pasco y cronista de “La Opinión Nacional”.

ARIAS Y ARAGÛEZ (Julián).- Tacneño, coronel, primer jefe del Batallón “Jauja”, combatió con el enemigo hasta quemar el último paquete, teniendo como digno compañero, a su segundo, el comandante Calderón. Ambos rindieron la vida en esa cruenta y sangrienta Batalla de San Juan en 1881.

AROSTEGUI (Baldomero).- Servía como segundo jefe del Regimiento “Rímac” y en los campos entre Pachacamac y Lurín, fue muerto, al ser sorprendido su regimiento por una división chilena.

ABENELL (Alberto).- Fue artillero de preferencia al pie de su cañón, haciendo fuego a bordo del monitor “Huáscar” en Punta Angamos, el 8 de octubre de 1879.

AGUIRRE (Julio Víctor).- No contaba sino con 23 años, nacido en Lima y ocupado en el comercio, vio a su Patria en peligro y se lanzó a la pelea. Comandaba la 5ª Compañía del Batallón “23 de Diciembre” Nº69 que había compuesto parte de la Reserva Movilizable. Murió heroicamente en la Batalla de San Juan.

ANTESANA (Benigno).- De profesión tipógrafo, se había alistado en la reserva con sus dos hijos. Pronunciada la derrota en los campos de Miraflores, su obesidad y achaques le impedían caminar, por lo cual sus dos hijos, niños aún, le traían a cuestas.
Les acometieron los enemigos y ellos pudieron salvarse dejando su preciosa carga, pero prefirieron morir bajo de ella.

ALCORTA, (Carlos).- Honrado industrial, limeño y muy estimado en la sociedad por sus excelentes dotes de caballero cumplido: se dio de alta en la reserva como soldado y rindió su vida en el puesto del honor en la Batalla de Miraflores.

ALAS (Pablo).- Natural de Trujillo y soldado del Batallón “Libres de Trujillo”, fue uno de los más esforzados defensores del Morro Solar, en la Batalla del 13 de enero de 1881 y murió combatiendo denodadamente.

ARMERO (Arturo).- Alférez de Artillería, murió en San Juan.

ASTETE (José).- Natural de Lambayeque, de 21 años de edad, cabo 1º de la 2ª Compañía del Batallón Nº6 de la Reserva. Murió en Miraflores.

ALVARADO (Máximo).- Capitán del Batallón “Libres de Trujillo” Nº11. Murió en San Juan.

ARIAS (Leopoldo).- Teniente del “Libres de Trujillo”. Fue muerto combatiendo en Chorrillos.

ALCOCER (Pedro).- Tercer jefe del Batallón “Guardia Peruana”, fue muerto en la Batalla de San Juan.

Continuará .....

V + S y Shoutear 😛

Saludos a todos.... ¡Kausachun Perú !!

Gral. Velasco
Dia 2,510.. 04-10-2014