[MIAU] La cruda realidad

Day 2,258, 09:18 Published in Spain Spain by Minino.

Siento haber demorado la publicación de este artículo. En primer lugar, me gustaría -si no lo habéis hecho ya- que os miréis mi anterior artículo: ‘’Una nueva etapa’’.



En este hablaba sobre las posibilidades de España ahora que TWO se ha terminado. Hice hincapié en una posible alianza con Argentina, mencionando a Chile y a nuestro aliado más fiel, Polonia. No fue pura casualidad. Artículo provocativo donde los haya, sí, pero tenía un objetivo.

Nos ha servido para descubrir la verdadera visión de los chilenos hacia nuestro país, en especial, la de sus líderes. Ellos se han posicionado personalmente en contra de España, si bien podríamos decir que algunos ciudadanos de a pie han adoptado una posición neutral hacia nuestro país.

Indiqué también que Chile buscaba un MPP con Argentina, cosa que ya se ha hecho realidad y que ha suscitado una gran oleada de críticas. Colombia y Uruguay han protestado por no haber sido informados y Chile apuesta por una Sudamérica unida. Algunos ciudadanos de Bulgaria y Macedonia se han sentido traicionados, a lo que algunos chilenos han respondido con un ‘’Confiar en nosotros’’.

Voy a intentar hacer una especie de resumen sobre distintos pensamientos que se vieron reflejados en mi anterior artículo. Porque varias imágenes valen más que mil palabras:













España ha mirado más por los intereses de los que consideraba sus amigos que por los suyos propios. Nos hemos enemistado con todo el mundo. Básicamente, se ha llevado una política exterior aisladora.

Como resultado, nos hemos quedado sin aliados potenciales. En mi anterior artículo hablaba de elegir, pero la cruda realidad es que no tenemos elección: por nuestro ego, países a los que acusamos de eso mismo nos han desplazado como potencia exterior erepublikana.


Hablaba también de no resultar un impedimento para Polonia, pero -de nuevo- la cruda realidad es que ya lo hemos sido. Lo somos. Tenemos más enemigos que amigos.

Enemigos de Rumanía, con quienes no acercamos relaciones cuando estuvieron abiertos a ello y -en ese momento- no nos habían hecho nada. Simplemente, no supimos adaptarnos al fin de CoTWO.

Nos fiamos de los viejos y de sus ya pasadas historias. No dudo que fueran ciertas, ¿pero acaso no era México un aliado fiel y nos la ha metido doblada, al igual que a Venezuela? Que por cierto, cuando Rumanía tiró AS a México, muchísimos jugadores españoles fueron a ayudar a México. Y eso sin mencionar algunos insultos xenófobos.

¿Acaso concuerdan las acciones que hicieron ciertos países en el pasado con la actualidad?

Tenemos de enemigos a Argentina, quienes también intentaron acercar relaciones con nosotros. Y, de nuevo, pasó lo mismo. Preferimos mantener nuestras relaciones con Chile y Brasil e ir en contra de nuestra propia alianza por amistad. Ya véis de cuánto nos ha servido.

Enemigos de Macedonia, a quienes el gobierno español despachó el mes de diciembre cuando quisieron acercar posturas con un contundente ‘FYROM’, cortesía de sus vicepresidentes y equipo exterior.


Enemigos de Portugal, con quienes nadie se atrevió a dar el salto y firmar una alianza. Por otro lado, se empezó una inútil guerra. A día de hoy, no se les ha dejado todavía sin Congreso. Ahora, los portugueses (y con razón) sólo quieren ver a una España borrada, y se han arrimado a los países a que tantas veces hemos rechazado. Una estrategia muy sutil para terminar de llevarnos todas las papeletas para acabar mal.

No amigos de Chile, quienes -como habéis visto- alegan que se cansaron de esperar cuando su intención fue la de arrimarse a Argentina y jugar su propio juego. En definitiva, mirar por sus intereses: justo lo que España no ha hecho.

Enemigos de Colombia, a quienes vetamos de ACT de una muy mala manera y después de que nos ayudaran a recuperar Guayana. Distanciados de Venezuela, a quienes hemos descuidado y, por cuestiones de ego, no vemos pertinente limar las asperezas que han surgido. Se han acercado a CUA y se niegan a alquilarnos las regiones, habiendo incluso recibido amenazas de ser conquistados.

Total, si queremos estar solos, ¿qué más da perder a un aliado histórico? Enfadados con Serbia, a quienes acusamos de haber influenciado el devenir de TWO hacia un lado que -independientemente de si nos hubiera gustado o no-, de haberlo seguido, nuestra posición ahora no sería esta.


A esa lista hay que añadir Eslovenia, quienes por cierto no se hubieran puesto así de habernos mirado el ombligo a tiempo. Uruguay, parte de CUA, no es que nos tenga mucho aprecio. Como tampoco lo tiene medio Brasil, CAT, afín a Argentina. Canadá, Francia y Turquía nos aprecian también mucho.

A estos últimos quiso un Presidente español lanzarles AS por la cara cuando todavía estábamos en TWO, a ver si así la liábamos con Grecia. El proyecto no salió adelante, si bien contaba con el apoyo de parte de su equipo.

Y, por supuesto, México, que recuerdan la invasión de las Islas Canarias -si no con alegría-, tal vez con nostalgia. Ministros de Exteriores que entran al trapo en artículos, van de prepotentes y cuyas muestras de educación difieren de lo considerado apropiado para cualquier diplomático que se precie.

Eso sí, los boletines tienen que estar muy bonitos.

¿Impedimento? Somos un completo lastre. Ni que decir que se tendría que haber seguido una política distinta. Supongo que dado que nadie perteneciente a ministerios importantes de gobiernos anteriores ha dimitido ni mostrado su disconformidad con a lo que nos han llevado, estos están completamente de acuerdo con lo realizado.

Hemos forzado a Polonia a seguir una política que tal vez no es la que tenían en mente. Ni siquiera ellos podrán salvarnos de lo que nosotros solos nos hemos metido. Me gustaría hacer una mención especial a Jervaj, que parece que ha pillado el concepto antes que sus compañeros de equipo. Le doy mi enhorabuena, si bien -posiblemente- ha llegado ya bastante tarde.


No me gustaría enrollarme más porque creo que ya está dicho casi todo. Efectivamente, asoman resquicios de tiempos anteriores. Algún borrado dicen que caerá: según algunos viejos, cuando mejor se lo pasaron fue con una España borrada. ¿Hemos de creerles otra vez?

Podría suponer el fin de los días gloriosos. Esos en los que estábamos en lo alto. Si seremos la actual Bulgaria del futuro no lo sabemos, pero se sabrá que fuimos tercos y demasiado dóciles con quienes resultaron usarnos y demasiado duros con quienes nos tendieron la mano.

Aún así, yo aún conservo cierta esperanza. Todavía hay un camino sin explotar, y a la tercera va la vencida.


Resumen para Ballantines: