Pre-Warfare Chronicles II - Retiro Forzoso

Day 1,078, 06:31 Published in Colombia Colombia by The Dark Leviathan

¡Buenos días, apreciados lectores!

Por motivos de estudio, algunas series tendientes al infinito me impidieron publicar el segundo capítulo. Pero aquí estoy cumpliendo mi promesa. Por cierto, les comunico que acabo de escribir "La Doble Agente". Pero... Creo que antes vendrá otro capítulo.

Como dije en el "Sneak-Peak", ahora retrocederemos 11 años antes del Inicio de la Guerra. Los que se preguntan que es la Guerra, muy pronto lo sabrán y poco a poco, a medida que los capítulos avancen, descubrirán los motivos y quienes están involucrados. Por cierto, aquí no hay satélites, eColombia sólo cuenta con radares.

Acompañen al Batallón "1" de las FMC y a su teniente a la Operación Escorpión. Get on board soldiers!!




REALIZANDO BARRIDO DE FRECUENCIAS...
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BARRIDO DE FRECUENCIAS EN PROGRESO...
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FREQ - 111.6 GHz
FREQ - 190 GHz
FREQ - 120 GHz
FREQ - 197.1 GHz -
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-CONFIRMADO-
--FRECUENCIA DESIGNADA: 197.1 GHz
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--CAMPO ELECTROMAGNÉTICO RESTRINGIDO - USO MILITAR EXCLUSIVO--
CONFIRMANDO IDENTIFICADOR DE TRANSMISIÓN...
--CONFIRMADO--
ABRIENDO BANDAS...
---EN LÍNEA (VOZ)---

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Región Amazónica - Colombia
09:30 GMT
Batallón "1" de las FMC
11 años antes del Inicio de la Guerra
Teniente de Infantería de Marina – Ramiro “Abbey” Correa
Sargento de Fuerza Aérea – Heiberth “H.B.” Santos
Soldado – Cristian Caicedo
Soldado – Andersson “Xan” Gómez
Soldado – Edwin Quintero
Soldado – Sebastián “Parce” Jaramillo
Soldado – William “Will” Barros
Soldado – Adrián Rodríguez
Operación “Escorpión”


...
...



-Es muy sencillo- dice el Coronel- Hay un cargamento de armas, intercéptenlo, destrúyanlo, borren el campamento. Salgan de allá. No quiero un trabajo bonito necesariamente pero si algo eficaz ¿Entendido?
-Sí, señor.

En la guerra, sin embargo, nada es sencillo. Sobre todo cuando la misión implica acercamiento extremo, contacto y destrucción, algo que los helicópteros no pueden hacer bien. Pero cuando el Estado domina a un grupo insurgente rápidamente, la confianza llega a tal punto que se subestima al oponente.

-Tome el dossier, teniente. Dentro de él, están los archivos de los soldados que estarán a su mando para esta misión. A este momento estamos a -2 días de la misión.
-Entendido señor.

Ramiro Correa llevaba casi 12 años sirviendo en las Fuerzas Militares de Colombia, en la rama de infantería de Marina. Hace 3 años era teniente y había desempeñado todo tipo de misiones: Desembarcos, patrullaje fluvial, extracción, rescate de rehenes, etc. Pero sin embargo, era la primera vez que le encargaban hacer una misión del tipo fuerzas especiales. Era un reto para él.

Cuando Ramiro era apenas un infante de marina, con rango de soldado raso era simplemente Soldado Correa. Pero un día, por esas extrañas bromas que juegan los azares de la vida, su novia lo fue a visitar y reveló el apodo que le tenía de cariño: “Abbey”. Desde ese día, sus compañeros de cuartel se la comenzaron a “montar” llamándolo Abbey hasta que no le quedó más remedio que terminar acostumbrándose al sobrenombre. Ahora, ya siendo un teniente, era el teniente Ramiro “Abbey” Correa.

Desde hacía 1 año, una milicia insurgente comenzaba a hostigar al Estado. Las milicias estaban bien entrenadas y causaban algunas bajas a las FMC. Informes de inteligencia señalaban que los milicianos vestían un emblema tricolor en el brazo y que en aproximadamente una semana, un contenedor cargado con armas suficientes para más de mil hombres llegaría a reforzar la logística del grupo alzado en armas. “Abbey” y otros siete soldados debían cumplir con éxito la Operación Escorpión impidiendo que esto sucediera.



El día de la misión, a las -3 horas de la partida, el teniente se reunió con el equipo. Todos los soldados estaban formados en fila, hombro con hombro, mientras el oficial pasaba revista de un lado a otro.

-Muy bien, señores. Saben lo que vamos a hacer así que sobran las explicaciones. Quiero sus nombres y su especialidad, para irnos conociendo.
El primer soldado de izquierda a derecha saca pecho, toma una expresión seria y exclama:

-¡Sargento Heiberth Santos, señor! ¡¡Piloto de Transporte Aéreo!! ¡A sus órdenes!

El oficial sonríe. El militar tiene mucha energía y eso es bueno.

-¿Usted es “H.B.” cierto?
-¡¡Sí, teniente!!
-Un placer, sargento “H.B.”
-¡¡Es placer es mío, señor!!

“Abbey” mira al soldado al lado del piloto.

-Y usted es…

El soldado luce nervioso pero aún así alza la voz.

-¡¡Soldado Will Barros, señor!! ¡¡Hoy combatiré en tierra en el asalto al campamento enemigo!!
-No esté nervioso soldado. Vamos a hacer las cosas bien. Dígame- señala al siguiente hombre- ¿Cuál es su nombre, soldado?

Un muchacho de pelo castaño, casi rubio mira al frente y con voz enérgica grita, más aún fuerte que Santos:

-¡¡¡Soy el soldado Sebastián Jaramillo!!! ¡¡Especialista en Explosivos y Demoliciones!! ¡¡Listo para servir, señor!!
-¿Tiene algún sobrenombre?
-Me dicen, “Parce”, señor.
-Soldado Barros quiero que escolte especialmente a “Parce”. Sin él no completaremos la misión, ¿Entendido?
-¡¡Claramente señor!!

El teniente da unos pasos más y mira a un muchacho que tiene una expresión algo preocupada.

-Soldado… Su nombre es…
-Me llamo Adrián Rodríguez, señor.
-¿Y está tan preocupado por…?
-Yo soy una tropa de reconocimiento…
-Entiendo. Tranquilo, nosotros no lo dejaremos solo…

El soldado sonríe. Levanta la mirada y le sonríe al teniente.

-¡¡Un placer servir con usted teniente Correa!!

Ramiro sigue avanzando. Apunta con el dedo a tres soldados.

-Rápidamente, sus nombres y ocupaciones.
-¡¡Infante de Marina Edwin Quintero!! ¡¡Encargado del desembarco fluvial!!
-¡¡Yo soy el soldado Cristian Caicedo!! ¡¡Comunicaciones a sus órdenes!!
-¡¡Soldado Anderson “Xan” Gómez, señor!! ¡¡Artillería y fuego de apoyo!! ¡¡Para servirle usted, a las FMC y a la patria!!

El teniente alza la vista hacia el techo del hangar y mira luego su reloj. Ya es hora.

-Es hora de partir muchachos. A la Piranha.



Todos los militares ingresan a la lancha blindada. Son las 13:30 GMT y se da inicio a la Operación “Escorpión”. El grupo de asalto tiene como código “Aguijón”. El helicóptero tiene el código “Cóndor-13” y es un BlackHawk U-60 modificado, versión arpía.

-Aquí, soldado Quintero, piloto de nodriza fluvial. Piraña Roja a Base. Piraña Roja a Base. Iniciamos transporte hacia punto de desembarco. Solicitando distancia, cambio.
-Copiado claramente, Piraña Roja. Están a 8 kilómetros del desembarco, cambio.
-Aquí Piraña Roja, cambio y fuera.



La Piranha comienza a alejarse del Batallón, tomando como ruta el río. Andersson “Xan” Gómez maneja la ametralladora de la lancha, listo para cualquier eventualidad. Adrián Rodríguez mira al suelo, y susurra palabras de una oración. Caicedo y Barros le sacan brillo a sus armas. El Teniente Correa y el soldado Jaramillo agregan algunas ramas a su uniforme para mayor mimetismo con la selva. Este último se dirige al oficial.

-Señor… Disculpe… ¿Por qué se hizo militar?

“Abbey” lo mira.

-¿Usted es “Parce” cierto?
-Sí, señor.
-Pues “Parce”. Palabras más, palabras menos, porque detesto la vida como civil. Me parece aburrida. No lo soportaría. Mi hogar es la base, mi vida son las FMC. Así de sencillo. No soportaría tener que trabajar en una fábrica, haciendo panes o construyendo casas.
-Vaya señor… Tiene usted vocación para esto.
-Su acento… ¿Usted es de la región Andina, cierto?
-Sí, señor- sonríe el soldado- A mucho honor soy paisa.

El teniente asiente y comienza a mirar el paraje desde la proa de la lancha. Lentamente los árboles cubren el sol, el agua se hace más turbia, y se oyen sonidos animales. Han entrado en la jungla.

-Todo el mundo silencio a partir de aquí- ordena el teniente- Quintero, distancia al punto de desembarco. “Xan”, preciso y atento con esa ametralladora.
-En seguida, mi teniente- responden ambos soldados.



Correa sigue mirando el paisaje, cada vez más oscuro y de vegetación densa.

-A 300 metros del punto de desembarco, señor.
-Entendido, Quintero. “Xan”, Jaramillo, Rodríguez, Caicedo, Barros, prepárense para tocar tierra. Silencio de radio y voz absoluto.

Es la orden para callarse. Nadie debe hacer ruido. Lentamente, la nave atraca en una pequeña ribera.

-Desembarquen, señores.



Todos los soldados saltan de la Piranha hacia la tierra, excepto Quintero, quien debe retornar a la base. Ha cumplido su parte de transporte fluvial ahora debe retornar. El teniente “Abbey” hace una señal con los brazos, que le indica a Edwin que el desembarco ha finalizado con éxito.



-Señor, tengo que retornar a base. Suerte a usted y a los muchachos.
-Entendido. Bien hecho, soldado. Regrese al batallón ahora.

Quintero enciende los motores, vira la nave 180 grados y comienza a alejarse lentamente del grupo de asalto, para no hacer mucho ruido con los motores. En algún punto lejos de allí, cuando esté en zona segura, pondrá la máquina a toda potencia e irá raudo a la base .

Ahora viene el turno de la tropa terrestre. Caicedo saca un mapa y lo coloca en la tierra.



-Muy bien, señores, estamos aquí -dice Correa mientras señala un punto en el mapa- De este punto al campamento enemigo hay 4 kilómetros aproximadamente al noreste. Después que destruyamos el cargamento, caminaremos otros 3 kilómetros al sur hasta el punto de extracción. El helicóptero nos recogerá allí. Rodríguez, adelántese 1 kilómetro y efectúe reconocimiento.

El soldado Rodríguez suspira con resignación y comienza a caminar. El teniente lo mira y se le cruza en el pensamiento que evidentemente a Rodríguez no le gusta su trabajo.

-Esperen por los informes de reconocimiento. Escóndanse entre la maleza. Silencio absoluto.



A la media hora, Caicedo recibe de Rodríguez el informe. “Área y Ruta Limpia”. El aviso le indica al resto del grupo que pueden avanzar. Los 5 miembros de la FMC avanzan lentamente, cuidándose no hacer ruido. Un chasquido de una hoja, un grito, un jadeo, un carraspeo podía alertar al enemigo. Los miembros avanzan en fila india, uno detrás del otro, con sus fusiles M-16 revisando el área de un lado a otro, arriba abajo, mirando los árboles, la hierba…

-En posición. Continúe efectuando labores de reconocimiento, cambio.
-Entendido.

Rodríguez avanza dos kilómetro y medio y no ve nada. “Área y Ruta Limpia”. El resto del grupo avanza nuevamente. El teniente va a la cabeza, su casco y su vestimenta llena de hojas lo hacen imperceptible a menos que se mire durante algún tiempo fijamente al punto. Tiempo que, por supuesto, es suficiente para que se tire del gatillo del fusil de asalto y no pueda darse la alerta.

-¡Deténganse!-dice por la radio Rodríguez, susurrando.- 2 Enemigos vistos.



-Entendido -responde Caicedo del otro lado de la radio- Debemos detenernos, teniente, Rodríguez ha visto actividad enemiga.

El teniente aprieta el puño, señal de detenerse. Luego abre la palma de su mano y la deja caer horizontalmente; es la señal de tirarse al suelo.

-Shhhh…-dice el teniente “Abbey” a sus hombres.

400 metros adelante, Rodríguez saca su bayoneta y una pistola con silenciador. Camina a gatas, sabe que no debe ser visto. Ahora se coloca detrás de un arbusto. Los labios del soldado de reconocimiento se mueven sin emitir sonido alguno, gesticulando la palabra “Tranquilo… Tranquilo….”

Y llegan los enemigos. Uno va detrás del otro. Portan uniforme militar y una insignia tricolor en el brazo con las letras F, R, A. Uno va con un fusil GALIL, el otro con una AK-47.

-Oye –dice uno de los insurgentes- ¿El cargamento habrá llegado ya? Me muero por probar las nuevas armas. He oído que tenemos mejores uniformes, incluso mejores que los de las FMC…
-Sí, ahora nuestra lucha por fin avanzará.

Rodríguez tensa sus músculos. Pone la pistola en el arnés de su pecho, agarra la bayoneta con la mano izquierda. Respira profundo. Comienza a caminar agachado detrás de ellos.

-Pues sí, se están demorando mucho con ese cargamento. Quiero que llegue ya.
-¿Sabes? Me pregunto quién nos estará vendiendo armas de tan alta tecnología y de donde las saca.

“1…” Susurra Rodríguez y comienza a erguirse.

-No sé, ni me interesa. Pero mejor que las traiga así podemos acabar rápido con los del Ejército.

“2…” sigue susurrando, ahora se levanta completamente.

-Ganaremos esta guerra, camarada.



“…3!”, susurra. Rápidamente Rodríguez da un salto hacia adelante, sujeta al hombre que va más detrás y le clava el cuchillo en el cuello, eliminándolo instantáneamente. Justo antes de morir, el insurgente emite un grito ahogado, que su compañero oye, pero cuando este da la vuelta, Rodríguez ya ha sacado su pistola con silenciador y le está apuntando a la cabeza…



-Enemigos eliminados. Área y Ruta limpia. Pueden seguir.

El grupo de asalto sigue avanzando. Están a casi 700 metros del campamento enemigo. Por fin llegan al punto y se reencuentran con Rodríguez.

-¿Qué es esto?-le pregunta Caicedo a Rodríguez al ver los cadáveres de los insurgentes.
-Gajes del oficio -responde cabizbajo el otro soldado.
-Silencio...-dice “Xan”.



Ramiro Correa avanza y observa a través de sus binoculares. Ve el cargamento. Tiene 3 metros con 5 de ancho y largo, y es de acero. Lentamente, los insurgentes sacan armas y provisiones de su interior. Ve granadas, visores de punto rojo, botas anti-impacto.

-Todos a mí. Acérquense con cuidado.

El grupo camina a paso lento.

-Barros y Jaramillo, a un lado. El resto, síganme.

Los árboles y las plantas se hacen menos densos, se notan los rastros de construcción humana.

-Son más de 30, señor.
-Veo… Caicedo, a mi derecha. Rodríguez a mi izquierda. Preparen los lanzagranadas. Andersson, ¿Ve ese tronco? Vaya detrás y espere mi orden. Fumíguelos cuando le diga.
-Entendido señor.
-¿Todos listos?
-Barros listo, señor. Escoltando a Jaramillo.
-Rodríguez en posición, esperando órdenes.
-Aquí Caicedo. Listo para la acción.
-“Xan” está listo para lo que sea, mi teniente.



El teniente sonríe y apunta su lanzagranadas M203.

-Esperen… Esperen… ¡¡AHORA!!

Tres estelas de humo salen de los matorrales a gran velocidad e impactan en el suelo, el contenedor y el tejado de un cambuche. Sonidos de explosión se oyen.

-¡¡Mierd*!!! ¡¡Las FMC!! ¡¡Muchachos al suelo!!
-¡¡Disparen, camaradas!!

Ahora las balas pasan rozando y hay estruendos por todos lados. Un mono cae muerto impactado por un proyectil.

-¡¡Carguen otra vez!! ¡¡Otra vez, carajo!!

Nuevamente tres estelas salen de los matorrales, impactan y explotan. Ya hay bajas en los insurgentes.

-¡¡Cuidado muchachos, tienen lanzagranadas!!
-¡¡Xan!! ¡¡Cúbrenos!!
-¡¡Vamos muchachos ataquen a los soldados esos!!



Justo apenas cuando siete enemigos se levantan y tratan de aproximarse, Gómez oprime el gatillo de la ametralladora y esparce ráfagas de balas en línea recta, alcanzándolos y abatiéndolos en el suelo con violentas convulsiones.

-¡¡Mierda!! ¡¡¡Ametralladora!!! ¡¡“Bájense” al de la ametralladora!!
-¡¡Carguen de nuevo!! ¡¡Ahora!!

Más lanzagranadas. Ahora los guerrilleros comienzan a retirarse.

-¡¡¡Corran, camaradas!!! ¡¡¡Corran, carajo!!!
-¡Mantengan el fuego! ¡Avancen, avancen!
-¡¡Que nos largamos, carajo!! ¡¡Nos van a fritar estos tipos!!



Dos insurgentes, aparentemente comandantes del grupo discuten. El teniente le pone fin a la discusión con ráfagas de su M-16, dándolos de baja. El aire está inundado de balas y humo. “Xan” sigue incesantemente dando fuego de cobertura. Los pocos guerrilleros que viven aún, se van a rastras.

-¡¡Rodríguez, Caicedo y yo, rodearemos el campamento y vigilaremos los alrededores!! ¡¡Barros proteja a Jaramillo!! ¡¡Jaramillo, los explosivos no tenemos mucho tiempo!!
-¡Sí, mi teniente! ¡”Parce”, vamos, yo lo cubro!



“Parce” y “Will” avanzan entre los matorrales y llegan al campamento. William se tira rápidamente al suelo en posición de prona y comienza a mirar a todas partes apuntando y vigilando. Mientras tanto, Jaramillo saca de su morral de campaña, varios paquetes plásticos envueltos en cinta de seguridad negra, une algunos cables, y hunde un pequeño botón. William curioso lo mira y le dice:



-¿Qué es eso?
-C4, “Will”. Esas armas van a quedar hechas polvo… ¡Teniente, ya puse los paquetes! ¡Hora de irnos!
-¡Soldados, reagrúpense en torno a mí! ¡Hora de irnos!



Una vez reagrupados, los 6 soldados comienzan a correr hacia el sur, cubriendo a campo traviesa los cuatros kilómetros hacia al punto de extracción. El suelo está difícil pero si se detienen serán atrapados.

-¡Caicedo! ¡Llame a la base, necesitamos el helicóptero!- dice Correa mientras corre
-¡Si, señor! ¡¡¡Aquí Aguijón a Base, estamos listo, sáquenos de aquí!!!
-Copiado. El helicóptero empieza a viajar ahora, estará allá en 30 minutos.

Ahora faltan tres kilómetros y medio, los soldados siguen corriendo

-¡¡Oiga “Parce”!! ¡¡Eso no ha explotado!! ¿Lo puso bien?
-¡No sea hu*vón, Will! ¡¡Es a control remoto!!
-¡¡Insurgentes a la derecha!! ¡¡Fuego!!

Dos insurgentes salen de la nada. Pero Rodríguez apunta su arma y con tres ráfagas los abate y sigue corriendo.

-¡Limpio!
-¡Vamos, vamos! ¡Vamos! ¡Sólo faltan dos kilómetros!



Un barranco se cierne adelante. Tiene unos 3 metros de altura. Deben franquearlo para seguir.

-¡¡Precipicio cuidado!!

Los soldados saltan, todos se lastiman un poco pero pueden seguir. Excepto, el teniente Correa quien parece tener molestias en su pierna.

-¡¡Arrrg!!
-Vamos, teniente, tome mi mano y levántese. ¡¡Hay que continuar, sigamos!!
-Gracias, Jaramillo.

Todos siguen corriendo ahora más desesperadamente. Cada soldado puede oír su corazón mientras corre. Las lianas caen de los árboles, mientras avanzan las apartan. Los arbustos y la vegetación son pisados por los seis soldados que siguen en camino frenéticamente.

-¡¡Allí están, los HP!! ¡¡Disparen!!

Los guerrilleros abren fuego contra la tropa. Las balas pasan rozando sus cuerpos.

-¡¡Xan!! ¡¡Cobertura!!

Xan aminora su velocidad y comienza a disparar ráfagas con la ametralladora; hay cinco enemigos caídos.

-¡¡Cuidado, Caicedo!!

Un insurgente se abalanza sobre Caicedo con una bayoneta; pero él lo bloquea con su arma y Rodríguez lo remata.

-¡¡Vamos Caicedo!! ¡¡Sigue, sigue!!

Ahora han llegado a un claro, el punto de extracción. Los guerrilleros hostigan a los militares.

-Aquí Cóndor-13 a Aguijón, los veo y voy en aterrizaje, cambio.
-¡¡¡Entendido, pero rápido Sargento, que estamos siendo atacados, cambio!!!-responde Caicedo.
-¡¡Todo el mundo a posiciones de defensa en el claro!!-grita el teniente
-¡¡AFIRMATIVO!!- gritan todos ya afónicos y con la adrenalina al tope.



El helicóptero desciende al suelo.



-Aquí Cóndor-13 a Base, Cóndor-13 a Base. Me encuentro en aterrizaje para extraer a Aguijón.
-Afirmativo. Permiso concedido. Proceda.

En el claro hay gran revuelo. Las balas pasando, y los árboles que agitan por las aspas de la aeronave crean una gran confusión.

-¡¡Xan!! ¡¡Al helicóptero!! ¡¡Fuego de apoyo!! ¡¡El resto cúbranlo!!
-¡¡Granada Fuera!!

Entre las balas, Gómez corre y se logra subir al helicóptero.

-¿Cuál es la situación allá abajo?
-¡¡Complicada, sargento Heiberth!! ¡¿Dónde está la ametralladora principal?!
-¿¿Allá, Xan!!.



Hay un silencio repentino. De repente un sonido parecido al de un zumbido se oye y decenas de enemigos caen en el suelo. Relámpagos dorados pasan por todas partes. Andersson está haciendo verdaderamente fuego de apoyo.

-¡¡Vamos, vamos, al helicóptero!!
-¡¡Jaramillo, ve abordo!!

“Parce”, se levanta de la hierba y teniendo cuidado de no atravesarse en la línea de fuego de “Xan”, se introduce en el helicóptero. Jaramillo comienza a hacer señales a sus compañeros:



-¡¡Métanse al helicóptero, ya carajo!!
-¡Nos fuimos! ¡Barros, Caicedo, vámonos! ¡¡Maldición, esa hélice me va a dejar sordo!!

Los tres FMC restantes corren hacia el BlackHawk; el teniente aborda, Barros también, pero Caicedo es alcanzado por una bala en la pierna.



-¡¡Carajo!!- grita “Parce” histérico- ¡¡Hirieron a Caicedo!!
-¡¡Mi*rda, me dieron!! ¡¡Mi pierna, mi pierna!! ¡¡No me quiero morir, no me quiero morir!!
-¡¡Xan, cúbreme!!- grita Barros
-¡¡Vámonos ya!!-exclama el ya ronco Jaramillo.
-¡¡Negativo, soldado!!- responde Heiberth- ¡¡Yo no muevo este helicóptero hasta que todos estemos dentro!!

Barros, arriesgando su integridad, avanza hacia donde está Jaramillo, lo toma del arnés y lo comienza a arrastrar hacia el helicóptero.



-Oh, mi*rda!! ¡¡Me duele la pierna!! ¡¡Me duele!!

Finalmente Barros, sube a Caicedo al helicóptero y lo pone a salvo.

-¡Estás loco, maldita sea! ¡Estás loco!-dice Jaramillo agarrándose con las dos manos el casco.
-¿Todos dentro, teniente?
-Barros, Caicedo, Jaramillo, Rodríguez, Gómez, todos dentro. ¡¡Vámonos “H.B.”!!

El helicóptero comienza a despegar. Las hélices giran más rápido. Pero de la nada, sale un cohete dejando humo detrás, yendo directo a la nave.

-¡¡CUIDADO, TENIENTE!!

Un rocket va directo al BlackHawk, el piloto debe evitar que impacte.

-¡¡Agárrense!!-dice con voz fuerte Heiberth quien agarra el timón con fuerza y realiza una maniobra de evasión.



Lo ha logrado. El sargento Heiberth logra que el rocket pase sin dañar a la nave. Pero ahora hay otro problema: La fuerte sacudida producto de la maniobra ha hecho que un hombre se caiga al suelo desde el helicóptero desde una gran altura. Es el teniente, y ha caído justo sobre su pierna.

-¡¡El teniente está abajo!! ¡¡El teniente está abajo!!
-¡¡Maldición!! ¡¡Aterrizando de nuevo!!



El BlackHawk se posa de nuevo en la superficie. Jaramillo y Barros recogen a “Abbey”.

-¡¡VA-MÓ-NOS!!



Heiberth pone los motores a fondo y comienza a partir. Un minuto después, tendría que volver a hacer otra maniobra evasiva, pues otro rocket le fue disparado. En el aire, “Parce” saca un control remoto y mira hacia abajo. Oprime el botón rojo en el control. Observa como una explosión sucede en la selva: El contenedor ha sido destruido.



-Este es Cóndor-13 a Base. Estamos regresando allá. Tenemos 2 hombres heridos en acción, Caicedo y Correa.



-Afirmativo, preparando atención médica de inmediato para su aterrizaje.
-Cambio y fuera.



El sol se pone y tiñe el cielo de un color rojo y naranja. Rodríguez mira la puesta del sol, mientras “Xan” felicita a Barros por su heroísmo.

Jaramillo le da primeros auxilios a Caicedo.

Y el teniente, aún adolorido, descansa sobre un asiento.

Heiberth sigue piloteando con el ceño fruncido.

La misión “Escorpión” fue exitosa. Finalmente lograron salir de esa.

-¿Teniente como está su pierna?
-Duele, pero sólo es un golpe.
-Señor… ¿Cómo demonios consiguieron RPG’s?
-No lo sé. Pero alguien con influencias debe estar dándoles armas…




En el hospital las cosas han salido medianamente bien. No todo puede ser perfecto.

Por un lado, Caicedo se ha recuperado satisfactoriamente, dentro de tres semanas será dado de alta y a la quinta estará de vuelta en acción.

Barros fue condecorado por su heroísmo y ahora es el cabo William “Will” Barros. Entre los círculos militares anda un rumor de que si sigue así podría ser muy pronto ascendido también a sargento.

“H.B.” fue felicitado por sus superiores y ha pasado a la división de cazas y bombarderos. Y no será más sargento. Muy pronto, el próximo año, será teniente.

A la semana, “Parce” fue escogido para continuar su entrenamiento en explosivo con el BOPE de Brasil, un grupo de élite de fuerzas especiales.

El doctor entra a la sala. Le entrega una carta a “Abbey”. El teniente está sonriente por los éxitos de sus hombres. Pero esa sonrisa de borra de su cara y se transforma en una mirada triste y enferma, cuando lee el contenido del documento.

“Abbey” no lo puede creer. Todo el esfuerzo y todo lo que ha hecho han valido de nada. No puede creer que el pequeño golpe en su pierna, no fuera sólo un pequeño golpe: Fue una fractura de rótula.

“Teniente Correa, la comisión médica ha estimado que debido a la gravedad de su lesión, debe ser dado declarado de baja del servicio. Lo sentimos.”

Ahora tendría que ser un civil.



SUSPENDIENDO TRANSMISIÓN...
--TRANSMISIÓN FINALIZADA
...

CERRANDO BANDAS...
-REABRIENDO CAMPO ELECTRONOMÁGNETICO 109.7 GHz...
--REABIERTO A USO LIBRE--
APAGANDO IDENTIFICADORES DE TRANSMISIÓN
--APAGADO
...
---TRANSMISIÓN FINALIZADA---
---RADAR APAGADO---
...




Hasta la próxima edición,

The Dark Leviathan

P.D.: Próximo capítulo Pre-Warfare Chronicles III - "La Doble Agente"
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