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L´eterniti en sobrecitos de té, cada segundo tiene su sobrecito, cada segundo tiene su dosis de eternidad. Por eso es tan complicado e inútil intentarlo, analizar lo que fue y prever lo que será… ¿cómo? Si cada segundo, cada instante, cada átomo del presente está sentado a una mesa bebiendo te, bebiéndoselo todo, la eternidad, cada segundo es inabarcable.
Esto no significa que cada segundo equivale a veinte, ni que una semana parece un siglo sin ti…no, claro que no. Un segundo es un segundo, una medida de tiempo ínfima, arena que se cuela entre los dedos, una aguja que vuela en círculos. Y sin embargo…eterno.

Porque claro, uno…el hombre, le busca sentido a su existencia y se siente implicado en tal o cual misión, para él, sagrada y colectiva, que vendría a definirnos como humanos, como hijos de dios o animalejos especiales o los dueños de la herramienta imperfecta y fabulosa con la que se ha de seguir creando el universo y la vida, LO QUE SEA. El hecho es que el hombre anda siempre embarcado en alguna misión, hasta los más atorrantes (especialmente ellos en realidad) andan en algo. Aunque no lo parezca, hasta el más humilde de los zapateros-niños-esclavos chino se siente y está metido de lleno en alguna misión, el gordo hombre de negocios ruso , el lamentable cafisho brasileño y todas sus putas, todos conspiran íntimamente y caminan hacia el acto final, hacia la felicidad del descanso. La consumación del ser humano.

Pero el hombre no vive más de ochenta años, cada hombre, como individuo, es una pieza sutil y efímera en un relojazo gigantesco que tic tac eternamente, que tic tac leeeeentamente y quien sabe hasta cuándo. Así que el hombre hace lo que puede (de eso se trata) y alguno escribe un libro, planta un árbol, se hace cagar a tiros en una sierra, funda un negocio de comestibles, se pone al frente de una empresa de importación de productos exóticos y así creen estar aportando su tic, un tic de valor, un tic que es importante, que es leyenda…pero TAC. El Tiempo nos come y el sonido de nuestro tic no dura más que eso…ticTAC …sin retumbe, sin acercarnos nunca a eso, la consumación del ser humano, el descanso feliz, el silencio tal vez o algún otro sonido.

Mientras tanto, mientras tac y mientras tic, yo estaba pensando en la eternidad de los instantes, se ve a las claras que me interrumpo y me contradigo fácil, tal vez ,señal de que ando detrás de algo gordo , o simplemente que es así, una contradicción, el tiempo, un mal invento. Probablemente si detuviésemos la maquinaria un instante, o la dejásemos haciendo círculos en algún instante, tildada, y fuésemos por ahí, con la conciencia continua habitual podríamos observar la eternidad de lo fugaz. L´eterniti en sobrecitos de té, un universo tartamudo donde TIC TIC TIC TIC el tiempo, o tal vez TACTAC. Y, de tener a mano algún artilugio de traslado espacial, podríamos ir por ahí observándolo todo. Yo escribiendo yo, en este instante, y vos tal vez en lo de Lulú, porque hoy es martes, y un 105 debe estar pasando por Alberdi ahora, ahí lo oigo. Y bueno, tanta gente y cosas y la fotosíntesis y un delicado grabado en cuero y los cañeros allá en el norte tanta, TANTA cosa, en un instante, tantos tics dentro del tic, la eternidad del tic, el tiqui tiqui, toda la creación congelada, clara, lista a ser descubierta y el hombre listo a ser consumado, el descanso que se acerca.

Pero TAC, pero tac sorete y bigotón, autoritario, irreflexivo TAC y “aquí se viene a cumplir” y a olvidarse de discusiones y ruegos porque ya TIC y ya TAC y ya no se distingue cuando TIC y cuando TAC en el vértigo del tictactictactictactictactictactictactict actictactictactictactictactictactictac.
Bueno, pero hemos jugado y ahora me vas a entender cuando te diga que a veces me despierto odiándote un poco, sin ganas de quererte más, porque yo siento que tic y que a pesar de no planteártelo así vos inevitablemente me dejas tic, y yo quisiera que tac, que tac y que tac por un buen rato, eso me haría sentir que tic. También asumo que si vos lo decidiste tic tendrás tus razones, soy consciente de mis tics, de los soportables y de los mas tacs, me pone triste que sea tic pero vos no te quemes la cabeza porque tac, en cualquier momento tac y chau.

Irik el rojo - eUruguay

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