Denuncian complicidad de Uruguay y Malvinas en la pesca ilegal

Day 2,911, 23:55 Published in Argentina Argentina by Saccopharynx

Gentileza de Nuestro Mar


Ex coordinador de campañas internacionales de Greenpeace denuncia que la pesca INDNR en el Atlántico Sur cuenta con la colaboración de Uruguay y del gobierno de ocupación de las Islas Malvinas. En respuesta a la denuncia John Barton dijo que “los tripulantes se tiran al mar porque extrañan su casa”.

Las ponencias de los delegados en el congreso de la FAO por los 20 años del Código de Conducta para la Pesca Responsable, dejaron al descubierto que la pesca ilegal es un tema del que ya nadie puede desentenderse. El Director de Asuntos Marítimos de la Comisión Europea asumió y denunció la existencia probada de esclavitud en altamar. En este nuevo escenario en el que la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada –INDNR- toma un rol protagónico, las investigaciones realizadas por Milko Schvartzman, un argentino que se desempeñó durante 15 años como Coordinador de Campaña Internacional de Océanos para Greenpeace, toman gran relevancia. En su trabajo registró satelitalmente a más de 500 barcos en el Atlántico Sur y pudo comprobar la complicidad en la proliferación de la pesca pirata de Uruguay y de Gran Bretaña a través del gobierno de ocupación de las Islas Malvinas. Este último, además, estaría permitiendo violaciones a los derechos humanos en la zona que controla ilegítimamente.

REVISTA PUERTO: -¿Cuál es la fuente de información de la que se vale para realizar estas denuncias de pesca ilegal y esclavitud en alta mar?

MILKO SCHVARTZMAN: -El corazón de mi investigación es una base de datos generada a partir del seguimiento satelital y la reconstrucción de la historia de cada barco. Tengo identificados en los últimos cinco años con nombre más de 500 barcos, yo estimo que hay más de 400 barcos en el pico de la temporada de pesca. También tengo identificado cuando estuvieron en Puerto Argentino, cuando ingresaron en Montevideo, si han sido capturados, si han estado en zona controlada por el Reino Unido o en altamar.

RP: -¿A qué países pertenecen, según sus datos, los barcos que actúan bajo los parámetros de la pesca INDNR en el Atlántico Sur?

MS: -El porcentaje total según bandera corresponde en un 45% a chinos; el 20% a taiwaneses; el 17% a coreanos y entre España y el Reino Unido se reparten el otro 13%. Los barcos que tienen licencia de Malvinas operan de la misma manera que los barcos que no tienen licencia, igual que los barcos más piratas, ingresando y saliendo del área controlada por el Reino Unido, en alta mar y dentro del Mar Argentino.

RP: -¿Cuál es el rol que cumplen los países vecinos como Chile y Uruguay en la proliferación de la pesca INDNR?

MS: -La colaboración de Chile es muy limitada, casi marginal. La colaboración más fuerte es la de Uruguay. Constantemente hay entre 5 y 7 barcos coreanos, chinos, taiwaneses o de Malvinas aprovisionándose en Montevideo. Por ejemplo en estos últimos años hubo 25 barcos que fueron detectados por la Prefectura y algunos capturados, que luego fueron en busca de provisiones a Uruguay y volvieron a pescar en el borde de la ZEE. En septiembre un barco coreano, Oyang 77, embargado por el gobierno de Nueva Zelanda por trata de personas, por violaciones dentro del barco, estuvo realizando reparaciones en el puerto de Montevideo y operó desde Malvinas. El tema de Uruguay es mucho más grave que el de las papeleras.

RP: -Al inaugurar el congreso de la FAO en Vigo, la ministra de la cartera agropecuaria de España, Isabel García Tejerina, dijo que “la pesca ilegal no entiende de fronteras”, pidió luchar juntos y “crear una política internacional”. ¿Lo sorprenden las declaraciones de la funcionaria siendo tan intensa la actividad de España en aguas internacionales?

MS: -Sorprende porque España tiene barcos involucrados en casos de pesca ilegal y pesca pirata en la Antártida como el caso del Thunder, los tiene en el sudeste asiático y también tiene una cantidad de barcos pescando ilegalmente en el Atlántico Sur y con licencia de Malvinas, que han sido capturados pescando ilegalmente dentro del Mar Argentino. Sorprende, además, porque España dentro de la Unión Europea cada vez que se intenta tomar medidas contra la pesca INDNR, es el principal opositor en el Parlamento Europeo.

RP:-En ese mismo foro el discurso que más impactó fue el de Ernesto Penas, director General de Asuntos Marítimos y Pesca de la Comisión Europea, al decir que en el marco de la pesca ilegal, “uno de los principales temas es la esclavitud a bordo de los buques pesqueros”.

MS: -Esas declaraciones uno no las hubiera esperado hace cinco años, demuestran claramente que ya no se puede esconder más este problema. Algunos países como España han estado escapando a este tema pero la realidad es evidente y hay pruebas. Lamentablemente las medidas no van a ir a la velocidad que esperaríamos pero ya están ocurriendo. Creo que en los próximos cinco, diez años se va a regular la pesca en aguas internacionales, esperemos que no sea muy tarde porque cada día que pasa se pierden vidas; todos los días hay casos de trata de personas, de esclavitud y muerte en altamar. Este mismo año en febrero se tiraron 9 pescadores de dos barcos taiwaneses llegando a Malvinas, dos perecieron y otro barco taiwanés que operaba desde Puerto Argentino al llegar a la zona se hundió con más de 50 tripulantes.

RP: -Según el director de Recursos Naturales del gobierno de ocupación de Malvinas, John Barton, los tripulantes “se tiran al agua porque extrañan su casa o no les gusta la forma de trabajo en los barcos”.

MS: -Las declaraciones de Barton son deplorables, tuve información de funcionarios del Reino Unido en Londres y están muy alterados por las declaraciones que hizo Barton porque son vergonzosas. Lo que ocurre es que la pesca pirata y con esclavitud de la cual se beneficia el Reino Unido en Malvinas, nunca ha tenido ningún tipo de control y esta es la primera vez que se los expone. Siente una impunidad total porque nunca publicaron lo que ocurría sobre los accidentes, siempre se ocultó y ahora es inevitable. El tema ya llegó al parlamento inglés, una congresista laborista pidió explicaciones al Ministerio de Relaciones Exteriores y al Ministerio de Trabajo del Reino Unido por el último caso de los nueve tripulantes del barco taiwanés.

RP: -Si bien Barton de forma muy extraña minimiza los aberrantes hechos de violación de los derechos humanos en altamar, con sus declaraciones está admitiendo que las conoce y a pesar de haber ocurrido dentro de la zona bajo su control, nunca las denunció. ¿Esta situación no debería tener una condena internacional?

MS: -El tema ya se está discutiendo en Londres, esperemos que se tomen medidas; pero probablemente no ocurra si no hay una presión diplomática importante, fundamentalmente sobre Uruguay. El 60 por ciento de los barcos que operan con licencia de Malvinas se reabastece en Montevideo, tengo pruebas satelitales del recorrido de todos esos barcos. Si estos barcos no tuvieran el apoyo de Montevideo no serían económicamente viables porque los costos operativos de Malvinas son altísimos. Este es un tema que el gobierno argentino debe en algún momento plantear seriamente.

RP: -Al parecer los Estados Unidos comenzó a tomar una actitud más activa en este tema. A principios de octubre celebró un acuerdo con Chile llamado plan Scout para erradicar la pesca ilegal y solicitó la colaboración de otros países. ¿Cree que se podrá avanzar a partir del impulso que le puedan dar naciones poderosas?

MS: -La intervención de EE.UU. es muy importante porque es uno de los principales mercados donde va mucha de esta captura ilegal, buena parte de la captura del Atlántico Sur de barcos piratas es blanqueada con certificados truchos en el puerto de Montevideo y esa captura de merluza negra termina en el mercado de los Estados Unidos. Todas estas investigaciones van a llevar a que la Unión Europea, la FAO y el gobierno de los Estados Unidos tomen cartas en el asunto, inevitablemente van a tener que tomar medidas porque la realidad se está presentando ante ellos de una manera brutal. (Por Karina Fernández; Revista Puerto)