Culos vagos - asientos grandes

Day 648, 02:02 • Published in France USA • by mormeg

Elegí nacer en eJapón y la verdad es que llevo poco tiempo viviendo entre eesppañoles. Allí (eJapón) los políticos y congresistas trabajan duramente para promover ideas originales que den lustre al país, enfocadas sobre todo en la mejora de la imagen del país de cara al exterior.

La verdad es que hoy no he podido si no arquear una ceja cuando vi en el BOE la propuesta realizada por Durruti en el congreso contra Franchesco –el si es o no apropiado se lo dejo a congresistas y entendidos en política eespañola. Pero eso no es todo, más abajo se informaba sobre otras dos propuestas planteadas por miembros del congreso. No pude evitar que mi ceja se arquease por segunda vez en la mañana.

La primera (ideada por Kartalon) rezaba así: Cada nuevo debate deberá abrirse con la aportación de fotos agradables, preferentemente féminas, si la mayorí­a de la cámara no considera la foto agradable se le dirá al congresista GTFO y no podrá presentar nada más por tí­ososo.
Entiendo que esto no es más que un juego y que a nuestros congresistas pueda no apetecerles ponerse a debatir cosas tan triviales como los asuntos de estado. Pero la idea de que para que una propuesta sea, no ya debatida, si no simplemente leída por el resto del congreso deba tener antes una serie de “fotos agradables” me parece cuanto menos irrelevante. Y me hierve aún más la sangre si pienso que un congresista con buenas ideas debe pasarse antes por páginas de carácter “agradable”, pues si no lo hace “no podrá presentar nada más por tíososo”. Eso es democracia pura queridos lectores.

Pasamos a la segunda propuesta (ahora el mérito hay que atribuírselo a Himan): La palabra cebolla deberá ser censurada y nadie podrá ponerse una cebolla en el avatar.
Simple pero conciso. Imagino que aquellos que estudian derecho se darían de palos por conseguir que Himan redactase todas las leyes en la vida real. No creo que eso llegue a suceder, pero he de admitir que en un primer instante me hizo gracia la capacidad inventiva de nuestros congresistas; cuando recordé que el tema iba en serio directamente me sentí ultrajado como votante.

¿Y no sería mejor, digo yo, que tanto Himan como Kartalon (cada uno con 20.214 y 12.556 de fuerza respectivamente) dejasen el congreso –o en su defecto de proponer cosas sin sentido- y se viniesen a ayudar con la reconquista? Quiero añadir que estaré atento a ver como evoluciona la propuesta de la cebolla, y en caso de que sea aceptada ya tengo pensado cual será mi próximo avatar.

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Mormeg