[OpiniĆ³n] La reforma de las FFAA

Day 623, 11:00 Published in Spain Spain by Charrito


La guerra mundial ciertamente está suponiendo una convulsión constante de nuestro pequeño nuevo mundo de eRepublik. Cada día suceden nuevos hechos, nuevas batallas, nuevas tácticas que cambian el escenario en unas pocas horas, aunque siempre con el denominador común de la inevitable impresión de que PEACE acabará arrasando USA y Canadá, y quien sabe si luego España.

Por ello, uno sabe que si durante una semana "desaparece" por motivos vacacionales, a la vuelta se va a encontrar necesariamente con un panorama distinto al que dejó a su marcha, es ley de e-vida. Ahora bien, lo que uno no se espera es que tras la desconexión se encuentre con que se ha dado la vuelta como un calcetín a las FFAA españolas, dejándolas a los pies de los caballos, por muy crudo que pueda parecer esto, y en seguida veremos por qué.

En primer lugar, repasemos cómo se ha llevado a cabo esta reforma de las FFAA, la más surrealista de todas las que han tenido lugar en nuestro país principalmente por cómo se ha llevado y se está llevando a cabo. Primero, partamos de la aprobación de la misma. Busquemos en el BOE, o en el boletín de Defensa, para que se nos explique en qué consiste. No, no nos cansemos porque no encontraremos ninguna referencia en las publicaciones oficiales (yo al menos no las he encontrado, si me equivoco por favor que me corrijan). Y es curioso, porque ha habido tanto BOE como boletines de defensa posteriores a la aprobación de la reforma, que por otra parte nos encontramos ya archivada en la biblioteca del Congreso.


Toque de corneta: el ejército español, patas arriba

Varias cosas nos deberían llamar la atención de esta propuesta de votación. Primero, que la propone el ministro de Economía, pluvio. No me malinterpreten, pluvio es uno de los tipos con la cabeza mejor amueblada de eEspaña, pero ¿alguien se imagina al ministro de Defensa proponiendo una ley que reforme los créditos a las empresas? ¿O al ministro de Sanidad proponiendo una ley que reforme la regulación de la publicación del BOE? Empezamos mal. Cuando menos, rocambolesco.

Segundo punto extraño: la votación se declara como urgente. Es decir, plazo de 24 horas para debatir y aprobar. La justificación: que España se quedaba sin stock de armas Q1. Bueno, pensemos. España se queda sin armas, los polvorines están exhaustos, vale. Hace falta una solución de urgencia: nada que comentar. Eso sí, ¿esa solución pasaba necesariamente por reformar la estructura y funcionamiento de las FFAA en 24 horas? ¿No se podía hacer un decreto o contrato urgente para la compra de armas como solución transitoria antes de meterse a cambiar todo a saco? Porque ahora entraremos a la reforma en sí, que cambia totalmente la base de funcionamiento del ejército.

Ya por diciembre, en los estertores de la presidencia de Cyberber, se creó un grupo de trabajo para la reforma de las FFAA con gente de varios partidos, un think tank (en el buen sentido del término) que permitiera ir puliendo ideas para tener unas FFAA más adecuadas a la V1. A principios de enero, se produjo un documento que recogía las principales conclusiones de lo que allí se había tratado. Evidentemente hoy día hay cosas que parecen desfasadas, pero otras no: el sistema de batallones (o compañías) ya rondaba entonces como idea fundamental para organizar el ejército. Quedaba ya claro que tener núcleos compactos y reducidos de soldados, y sobre todo activos y motivados, era la clave del éxito para tener un ejército fuerte y organizado. Sin motivación no hay ejército en la práctica.

Varias reformas llegaron después, en las que la principal novedad fue, aparte de la aparición de los batallones, la creación y puesta en funcionamiento de los polvorines. Mucho se debatió sobre el tema, muchos expertos opinaron, y se llegó a la conclusión de que, por una parte, era necesario que los soldados contribuyesen en cierta medida a la fabricación de armas y por otra, que los polvorines eran una buena medida para reforzar la unidad de los batallones y controlar el grado de actividad de los soldados.

Y con esto, en el contexto de una guerra mundial que está resultando tremendamente exigente, llega esta reforma (aprobada por cierto con 18 (!!!!) votos, y con varios congresistas reconociendo en el debate que no tienen ni idea del tema), que propone:

Tomar como base de suministro del ejército (y no como complemento) un sistema de compra con descuento de armas. Es decir, las FFAA pasan a ser un economato, guste o no la definición, esto es en lo que las convierte la reforma. La venta de armas con descuento es una excelente idea, pero no puede ser exclusivamente la base del ejército. No va a solucionar el principal problema de las FFAA, que no es el stock de armas, sino la inactividad. Al contrario, lo acabará empeorando, porque va acompañado de...

...eliminar totalmente los polvorines, porque se entiende que no es justo para los soldados con mayor skill. Estupendo, porque nos cargamos una de las pocas cosas que obligaba a la gente a permanecer activa en las FFAA y a implicarse con el ejército. Aparte de que no es posible de ninguna manera entender que la existencia de los polvorines fuera algo incompatible con el suministro con descuentos. Lo que parece claro es que para muchos soldados, si no se les ofrece esta posibilidad de trabajo, la pertenencia al ejército pierde gran parte de su sentido. Por no hablar de la falta de actividad que implica: la experiencia nos sugiere que no tardando demasiado, veremos cómo muchos batallones se quedan inactivos en la práctica (en algún caso ya lo estamos comprobando). Si ya se estaba llevando de manera discutible la forma de combatir (con un exceso de uso del IRC, que estaba provocando la deserción de muchos soldados que no podían acceder a las horas que se indicaba), esta solución de eliminar los polvorines solo puede empeorarlo. Sí era necesario dar un lavado de cara a los polvorines, pero en absoluto lo era desmantelarlos.

Regular de una cierta manera peculiar la formación de los batallones: lo que tendría que haberse hecho desde un principio (permitir batallones de amigos) se hace en medio de una guerra mundial y con ya 16 batallones existentes, que quedan condenados a la semi-inactividad en muchos casos o a desaparecer como tales y empezar un totum revolutum para recolocarse en mejores destinos.

Complicar la forma de repartir armas con el sistema de subvenciones, y en general la gestión del ejército. No es que el sistema propuesto sea malo: el problema que tiene es que es, si se me permite, excesivamente "pluviano". Tengo mis serias dudas de que cuando pluvio no esté detrás de todo esto, vaya a durar más de dos días. Sonará catastrofista, pero después de un año en eR y haber pasado por numerosísimos cargos en la administración, creo que sé lo que digo. Algún alto mando del ejército ya ha hecho llegar a quien escribe sus quejas por la excesiva burocratización que implica. Aparte de que si antes ya ha habido problemas de robos, no quiero ni pensar qué puede pasar si uno de los 5 elegidos (que no se sabe cómo se designan, por cierto, la nueva ley se limita a decir que serán personas "de confianza") es una manzana podrida.

Se limita absurdamente el uso de wellness packs. Señores, si nos intentan dar con todo lo gordo en Asturias, yo generosamente cedo mis 10 gold para que Durruti o cualquier otro con más fuerza pegue, aunque yo tenga que quedarme de mirón. Es totalmente ridículo limitar por ley los wellness packs que se pueden dar a cada jugador, porque habrá situaciones de emergencia que requieran maximizar daño y no maximizar número de gente que pegue con WP.

Algunos párrafos del articulado parecen escritos con fines propagandísticos para que el congreso apruebe la ley. Por ejemplo, "En las batallas importantes y cruciales frente al uso de WP, es deber del ministerio de defensa el promover el uso de armas de calidad entre todos los soldados, llegando incluso al descuento del 100% siempre y cuando se confirme el uso de las mismas de acuerdo a las órdenes del ministerio. Es más barato aumentar el daño con mejores armas para TODOS que hacerlo mediante tanques.". No señor, en las batallas importantes y cruciales hay que hacer el mayor daño posible cueste lo que cueste, y me remito al párrafo anterior.

Otra joya de la nueva ley "Si algún soldado es descubierto donando armas de las compradas, a otros jugadores ajenos a las FF.AA. podrá ser expulsado de las FF.AA. si posteriormente se descubre otro soldado (no cadete) de ese mismo batallón vendiendo armas, él será expulsado y el batallón no recibirá ayudas durante 10, en los cuales tendrá que seguir obedeciendo las órdenes del ministerio." Es decir, si hay un par de mamones en tu batallón, pagas tú el pato. Aparte de que cualquiera con un mínimo de habilidad puede sacar las armas de su inventario poco a poco sin que se note, con lo cual es ingenuo pensar que se puede hacer un seguimiento de este tipo de robos.


Pos eso

Con todo esto, el nuevo ejército español, con su reforma aprobada con veranidad y alevosía, queda más bien maltrecho, lo cual es gravísimo en el contexto actual, con la guerra cada día más cerca de casa. Pongámonos en el caso de un soldado con fuerza y rango elevados, que realmente pega por ayudar a algún aliado o por defender su país, y no por subir rango o nivel de experiencia. Si se trata del segundo caso (defender a España) no hay mucho que debatir: creo que todos nos dejaríamos hasta el último gold si es necesario. Ahora bien, si es por ayudar a un aliado, el panorama es el siguiente: vale, el ejército me proporciona armas por ejemplo Q4 con un descuento importante, pongamos que me las deja a 15 ESP. Si quiero pegar 5 veces, eso son 75 ESP. Inasumible de hacer todos los días, por lo que bajemos de calidad. Si quiero pegar de cuando en cuando con Q1, el ahorro que me puede suponer es de unos 10-15 ESP respecto a no estar en el ejército. Si estar en el ejército me obliga a pegar a horas que no me conviene o en batallas que considero secundarias, ¿para qué narices estoy en el ejército? ¿Para ahorrarme 10 ESP? Cuando menos, da que pensar.

Ojalá me equivoque. Ojalá esta reforma sea un éxito rotundo. Pero mucho me temo, porque me lo dice la experiencia, que no va a ser así. Que acabar de un plumazo con los polvorines, el único elemento que ligaba periódicamente a los soldados con la estructura de las FFAA es un tremendo error. La solución posiblemente era un sistema mixto, con una venta transitoria de armas, para lo cual no era necesario plantear una reforma como la que se ha hecho, que echa por tierra el trabajo de muchos meses, imperfecto, tal vez, pero no como para terminarlo en 24 horas y sin siquiera publicarlo de manera oficial. Son ya numerosísimas las quejas de los soldados.

En la guerra actual, aparte de tener una dirección clara de la estrategia de la guerra, lo que habría que hacer sería tener a todo el mundo trabajando para producir armas full time (gastando el gold que hiciera falta), no convertir el ejército en un mercadillo de rebajas (que también debería hacerse, pero jamás dejarlo como única solución). Mientras no entendamos eso, lo pasaremos mal, habrá problemas. Quiero pensar que si llega la hora crucial para España, no me cabe duda de que todos los soldados responderán como deben, aunque para entonces los batallones del ejército solo sean, en la mayor parte de los casos, cascarones vacíos.