Son cosas que pasan...

Day 4,633, 14:33 Published in Argentina USA by derbas16

Iba a poner su nombre de ciudadano, pero enseguida lo reconocerías. Su nombre real tampoco ya importa, puede ser cualquiera o quizás incluso, sea tu vecino de barrio. Lo cierto es que me entere por una nota publicada hace un par de semanas, sobre este personaje. Tanque en una época, desapareció sin mas, dejando un montón de eamigos pensando en su suerte. Lo que sigue es una breve reconstrucción de su evida, datos aportados por su hermano, un vecino, el panadero y su ex novia.
Al tipo le gustaban los juegos, era fanático. Hasta que no era campeón, tenia el récord o su nombre figuraba numero uno de la lista no lo dejaba. Su hermano y vecino, muchos mas tranquilos a la hora de elegir, lo iniciaron. Y se prendió llamas. A la semana quería ser presidente o nada. Jefe supremo de una MU, ganar todas las medallas. Pero no había forma, llevaba semanas o una tarjeta de crédito que no había. O si había, ser multi y el lo fue. El panadero dijo que llego a trabajar en las 18 sucursales en el día. Pero antes de hacer sus tareas pedía una computadora. Su abuela, sus tías y padres, formaban parte de este juego sin saberlo. Demás esta agregar que sus vecinos, esposas e hijos, completaban la larga lista de cuentas con la que engrosaba sus pretensiones. Se gastaba el sueldo en recorrer todos los cyber del barrio y llego a ir a lugares lejanos para encontrar uno abierto. En esos recorridos conoció a la chica, que compartía su misma locura por el juego, pero fue una utopía.
Sus padres al ver que no reaccionaba, lo echaron de la casa y quemaron su cuaderno de contraseñas. Los vecinos ya no se dejaban engañar con la mentira que necesitaban una actualización del antivirus. Los cyber fueron cerrando, en poco tiempo la tecnología ya estaba al alcance de todos y en su lugar prestaban servicios de pago online. Al final su chica empezó a tocar en una banda punk y decidió no pagar mas la luz. Ese día se quemo su pc y su cerebro.
Después de varios intentos, lo encontré. Del neurosiquiátrico, volvió a casa de sus padres:
-Hola pibe-le dije.
-Estate atento a las ordenes, hoy cambiamos todo y atacamos España y Francia, vamos a ser un imperio-susurró-estamos para grandes cosas.
Tenia en sus manos un puñado de soldaditos de plástico verde y miraba sin ver. Dijo algo así como... ¿de que MU eres tu?... y que no se acordaba tampoco como se llamaba, en una ensalada de palabras que salían entre gruñidos. Y se rió y lloró.
Grité: -¡Que el profeta te la meta!- y me fui, caminando lento a la parada mas cercana. Espero que pase rápido el bondi. Ya debe haber recargado toda la energía.