Las fuerzas armadas se cubrirán de gloria

Day 1,765, 11:47 Published in Mexico Mexico by Camello Ch1ng0n
Hoy huele a libertad, hoy es el dia de cambiar el rumbo de la historia, hoy tu patria te necesita

En 1846, al no reconocer México la incorporación de Texas al territorio estadounidense, ese país envió tropas al mando del General Zachary Taylor con la orden de avanzar sobre el río Grande (río Bravo), que en aquel momento pertenecía a Tamaulipas, ya que la la frontera con Texas estaba delimitada por el río Nueces, casi doscientos kilómetros al norte del Bravo. El General Mariano Arista atacó al ejército de Taylor por entrar en territorio mexicano. El presidente estadounidense James Knox Polk utilizó este hecho como justificación para declarar la guerra a México en mayo de ese mismo año.

Estados Unidos de América bloqueó por mar los principales puertos mexicanos del Pacífico norte y del Golfo de México, mientras que por tierra avanzaban las tropas de Taylor sobre Monterrey y las de coronel Kearny sobre Santa Fe, Nuevo México
en Veracruz, del General Winfield Scott que abría un nuevo frente. Al desembarcar las tropas estadounidenses en ese puerto la población hizo una magnífica defensa de su ciudad, pero terminó rindiéndose ante la superioridad bélica de Scott, y las tropas enemigas avanzaron hacia la Ciudad de México. El ejército mexicano libró diversas batallas para frenar el avance de las fuerzas enemigas, pero éstas lograron llegar a las inmediaciones de la capital del país.




En septiembre, los invasores avanzaron sobre el castillo de Chapultepec, entonces sede del colegio militar, cuya defensa estuvo a cargo de los cadetes de ese colegio. La batalla allí ocurrida el 13 de septiembre de 1847 fue recordada años después, durante la República Restaurada, cuando se hizo un homenaje a los jóvenes Juan de la Barrera, Juan Escutia, Francisco Márquez, Agustín Melgar, Fernando Montes de Oca y Vicente Suárez. El 14 de septiembre, el ejército estadounidense tomó la plaza mayor de la Ciudad de México e izó su bandera en el Palacio Nacional. El pueblo de México se alzó furioso contra los agresores y defendió el zócalo con piedras y palos. Scott amenazó con bombardear los edificos, y el ayuntamiento exhortó a los capitalinos a deponer las armas.



hoy nos rendimos hasta que muera el último soldado o nos cubramos de gloria