Receta para una pseudorevolución

Day 2,219, 04:30 Published in Spain Cuba by Nikola TesIa



(Ahí os va el tochopost. Simplemente tenía ganas de dar mi punto de vista de los hechos ocurridos recientemente y de la situación actual de la izquierda española. Ni hay fotos, ni memes, ni nada.)

1. Los ingredientes. Contexto

El fracaso de la izquierda en eR es el punto de partida de este artículo. Estamos hablando de una izquierda fragmentada en la que el máximo exponente de ésta es un partido corroído por las luchas de intereses y en el que el poder es monopolizado por unos pocos.

En medio de este contexto surge la idea de la necesidad de un cambio radical en la política del partido. Esta idea puede ser llevada a cabo de dos formas:

- Mediante la acción de los diferentes afiliados que internamente luchan y debaten para modificar las cosas.

- Mediante la coacción de fuerzas externas que se niegan a participar en el debate interno pero que, sin embargo, critican la falta de oportunidades de expresarse y llevar adelante los cambios.

Cualquier partido, por poco democrático que pueda ser, tiene internamente mecanismos que permiten que los afiliados modifiquen las reglas de juego.

2. Preparación. ¿Qué precio tiene el cambio?

Una vez que se decide intentar llevar adelante ciertos cambios en un partido, uno se pregunta, ¿con qué tácticas?

Evidentemente, en ningún lugar se trata de coartar a estas personas ni intentar que no se lleve adelante sus planes pero, ¿cualquier acción es justificable si el fin es digno?

Estamos viendo que en el intento de cambio forzado de la dirección del PCeE se han utilizado tácticas deshonestas y poco morales. Y no hablo del flameo y el trolleo, mecanismos que algunas personas pueden ver con malos ojos, pero que al fin y al cabo son legítimos. Hablo de esas personas que no respetan las normas internas de los partidos, que se visten con el traje de la difamación sin pruebas, y que recurren a cualquier medio con tal de conseguir sus objetivos, sea llevar la falacia como tónica general, pagar por votos (no estoy diciendo que en este caso se haya hecho, pero no sería la primera vez que veamos intentos de TOveo con compensaciones económica) o ir de la mano de personas que simplemente tienen ansias destructivas.

Y es que ahí radica el tema. ¿Qué es lo que se busca, un cambio destructivo o un cambio productivo? ¿Se quiere realmente cambiar el PCeE o lo que se busca es simplemente su destrucción?

3. Presentación del plato. El caudillismo iluminado

Teniendo en cuenta lo hablado en el primer punto, pocas personas pueden dudar de que el PCeE necesita un cambio. Pero la pregunta es, ¿quién somos para decir a los afiliados del partido qué pensar?

Lo que hemos visto en este intento de TOveo ha sido una campaña de desprestigio de todo lo relativo al PCeE, hecha por parte de una persona que se autoasignó la responsabilidad de representar a los opositores.Pero, ¿es que los afiliados del PCeE no son capaces de pensar por sí mismos?

No me opongo a la idea de que han de cambiar su mentalidad, sin embargo creo que ha de ser algo que cada uno, individualmente, debe hacer. De nada sirve que venga un iluminado a enseñar el camino a seguir. ¿Acaso lo que se quiere es que el rebaño de Siddy pase a ser el rebaño de Raúl? Si es gracias a este iluminado que los afiliados cambian de opinión, ¿acaso no dejarán de pensar eso cuando no estén bajo la influencia de este?

Han de ser los propios afiliados quienes, tras un ejercicio de autocrítica, cambien su postura.

Todo esto, acompañado con una campaña mediática consistente en la repetición constante de unos cuantos eslóganes populistas, dejan la mesa lista para que suceda algo de lo que hablaré en el siguiente punto, y que es la esencia de esta crítica que estoy haciendo.

4. Intoxicación alimentaria. La sectarización y monopolización ideológica.

Tras darse todos estos pasos, nos encontramos ante una realidad en la que, para ciertas personas de la izquierda, el no apoyar a un bando implica apoyar al otro.

Parece ser que no apoyar tácticas deshonestas ni querer colaborar con quienes solo tienen ansias destructivas implica estar a favor de la monopolización oligarca del poder que se lleva a cabo en ese partido.

No importa qué explicaciones se puedan dar, la sentencia ya está dada. Si no apoyas el TOveo, estás apoyando a Siddy, eres colaboracionista, eres un Partido Satélite. Esas personas que se engalanan con la bandera de la tolerancia ideológica no son capaces de comprender que hayan personas que piensen de manera diferente.

Y ahora yo pregunto: ¿quiénes son ellos para decir que ese es el único camino a seguir si se es de izquierdas?

No estoy diciendo que sus propuestas sean válidas o no. A título personal no las defiendo. Lo que nadie me va a venir a decir es que ese es el único camino. Eso es una simple mentira. Es el camino que han elegido ellos. Sin embargo, hay otras personas que no apoyamos estas tácticas, estas maneras, aunque podamos compartir el objetivo que se busca, y no por eso dejamos de pensar lo que pensamos, ni por eso le estamos haciendo la cama a aquellas personas contra las que luchamos.

Un sector de la población eRepublikana se ha autonombrado como la "izquierda verdadera", y todo aquel que no esté de acuerdo con sus maneras es un simple colaboracionista. Lamento decir, que no es así. Aunque a algunos les cueste verlo, en la vida no todo es o blanco o negro, hay grises. Estar en contra de algo no implica querer destruirlo a cualquier precio. No es el fin, el problema son los medios.

5. Conclusión

En resumen, si bien comparto la idea de que es necesaria una modificación profunda de las bases sobre las que se asienta el PCeE, creo que no es esta la manera. No defenderé nunca un TOveo, sea al partido que sea. Como he dicho, cada partido tiene mecanismos internos que posibilitan la modificación de sus estatutos. Si se está en desacuerdo con la forma de hacer las cosas en un partido, lo lógico es que, participando en el juego democrático, se intente modificar esto. Y si no consigues el apoyo suficiente, será que los afiliados del partido no quieren llevar esa modificación y están contentos con el estado del partido. Y ¿quién somos nosotros para decirles que no pueden hacerlo? Creo que no hay que infravalorar la inteligencia de los militantes.

Por otro lado, con estas tácticas se hace un gran favor a la cúpula que tanto criticamos. Ellos son los únicos beneficiados. Ahora pueden decir: "¿Ven? Os lo dijimos, sólo quieren destruirnos". Y, ¿quiénes son los perjudicados? Todos aquellos militantes que de forma valiente decidieron cambiar el partido desde dentro, participando en el juego democrático, y a quienes no se les hace ningún favor con acciones como esta.
Es hora de que dejemos de manipularnos por unos cuantos individuos. Que ellos tengan una manera de hacer las cosas me parece bien, no podemos pretender una heterogeneidad ideológica. Lo que debemos borrar es la concepción única de la izquierda. La izquierda española es muy amplia, y hay muchas tendencias. Y de la misma manera que no dejamos que el PCeE monopolice el discurso de la izquierda, tampoco debemos dejar que lo hagan otros.

Por lo demás, ya lo he dicho. Apoyaré cualquier intento de renovación del partido que implique un respeto a las bases que lo rigen. Sin embargo, las personas que no respeten los mecanismos internos de cada partido jamás gozarán de mi colaboración.

P.D : antes que nadie diga nada, esto es una reflexión a título personal, y no representa la postura del partido.