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Era un día maravilloso, el sol resplandecía, eEspaña tenia todos sus territorios originales y poseía algunos en el extranjero realizando TW con varios países. Las arcas del estado estaban llenas y los mpp's se firmaban en pocas horas tras ser propuestos. El congreso se había vuelto un órgano vital para el funcionamiento del estado, todos los días había debates serios sobre alguna que otra propuesta para el bienestar de nuestra gran nación. El general rebelde entrego las armas y el ejercito oficial volvió a estar en las manos correctas, volviéndose así un instrumento de guerra temido por las demás superpotencias.

Todas las piezas de reloj encajaban con precisión y nuestra nación funcionaba con envidiable precisión.

Pero las elecciones se nos venían encima y los buenos congresistas colgaron la cartera para tomarse un respiro y oxigenar la gran cámara con sangre nueva.

Sangre roja fue la que ocuparon los sillones del congreso.

Los rojos se apoderaron del país con la mayoría absoluta en el congreso, se lanzaron NE a antiguos aliados, los mpp's se rompieron....las arcas del estado fueron saqueadas con total impunidad...el viejo general rebelde volvió a comandar el ejercito nacional como si de una unidad de mercenarios se tratara...y tras varios días de anarquía total, nos invadieron. Nuestra tierra fue profanada por el invasión frente a la pasividad de los buenos ciudadanos. La prensa se hacia eco de la situación.

-"Tenemos lo que merecemos", "La culpa es nuestra", "El triste resultado de lo votado"...

Y la prensa internacional también difundía nuestra situación, todas las naciones vinieron a nuestra tierra, buscando un trozo del pastel.

Y los grandes de eEspaña? Miraron sin inmutarse. Sin mover un solo musculo. Sin derramar una sola lagrima.

Algunos permanecieron en el país unas semanas, pero con el tiempo la bandera del pasaporte cambio y con su marcha nuestra nación termino por convertirse en una tierra sin nadie que la defendiera. Una tierra de esclavos conquistados.

Me desperté en mitad de la noche, todo estaba oscuro, la única luz venia de la calle que se colaba entre los agujeteros de la persiana.

Mire el móvil, no había ninguna notificación. El país seguía como lo había dejado. Entonces recordé la parte buena, porque no podíamos lograr algo as?