Desenmascarando el contextualismo

Day 5,694, 04:34 Published in Spain Spain by D I V O


Mi anterior publicación ha desencadenado en tres nuevas publicaciones como reacción, lo cual me servirá para mostrar didácticamente algunos puntos más que no quedaron plasmados en el anterior, pero que sí lo van a complementar.


Respecto al artículo de Rolbap

Del dicho al hecho hay un trecho, y si bien respeto tu opinión, no la comparto, Rolbap, que el contextualismo no busque marginar y destruir a los conceptualistas es una mentira como un castillo. Se ve en como se pasa al acoso y derribo cuando se intenta articular una alternativa, como han podido ser candidaturas mías posteriores a Agosto del año pasado, o como han podido ser en la articulación fallida del MAL como alternativa, en las que se acude en manada a insultar, no a contraponer ideas, con acoso constante a quienes lideraron esas alternativas, no buscando debatir, sino hacer que el rival se canse y desista, que deje el juego.

¿Y cómo se hace esto? Con insultos, mentiras, y diluyendo el discurso con barro, el ejemplo más claro es que ayer mi artículo solo quería poner de manifiesto como los contextualistas también juegan a echar a gente del juego, juegan a aburrir a esa gente, juegan a lo mismo que jugaba Siddy en los Gobiernos del MAL, eso no es una invención o fumada mía, es un hecho, y se puede constatar en el éxodo australiano, gente que está fuera de eEspaña literalmente harta de ser acosada día tras día. Y esto, insisto, al igual que en mi anterior publicación, es el fin del propio contextualismo, cuando no queden "enemigos de eEspaña" a los que atizar, los que basan su juego en ello se aburren y lo dejan, y eso no es producto de que los otros jueguen a aburrirles, es producto de que propician que otros no quieran participar ni formar parte de una comunidad emponzoñada por la toxicidad hasta, en ocasiones, niveles que rozan lo absurdo.

No es ni mucho menos una dualidad buscar expulsar jugadores vs juego para todos, más bien es buscar expulsar jugadores vs buscar expulsar jugadores, solo que cada parte quiere expulsar/marginar/echar (o como lo quieras llamar) a un sector distinto.


Respecto al artículo de Barriga

No, mi artículo previo no se trata de llorar porque no quieren jugar conmigo, de hecho yo tampoco es que quiera jugar con ellos. Se trata como puedes ver más arriba de señalar lo paradójico que es que la consecución de la meta contextualista de ahogar cualquiera atisbo de alternativa suponga su propia decadencia. El artículo en sí parte de una base errónea, pero no deja de ser la base que le conviene al contextualista para esgrimir su crítica y sigue la dinámica que veremos más abajo en los comentarios respecto al artículo de Leogar.

Respecto al artículo de Leogar

Donde podemos ver un ejemplo claro de como se produce este ahogamiento es en este artículo, ni siquiera ha observado que en el artículo que responde se expone de manera evidente y clara que varios integrantes del conceptualismo practicaban la conducta puesta en relieve.

Un contextualista radical vive del descrédito y reacción de su adversario, de ahí que Leogar mienta sin pudor alguno en su artículo. Un contextualista radical también vive de acosar a quien considera su enemigo, de martillearle, de crearse 30 cuentas para única y exclusivamente insultar a un jugador, de usar las instituciones para incluso perseguir a sus enemigos desde el cobarde anonimato, como hemos visto con varios artículos en distintos ministerios, casi en su totalidad borrados por la cantidad de contenido ofensivo que estos contenían (y de premio, culpando a sus víctimas). Y todo esto, queridos lectores, también echa a gente del juego.

Quien no quiera verlo que no lo vea, pero no por ello va a dejar de haber gente que se vea obligada a dejar de sumar por la comunidad debido a esta problemática, problemática que no es tal para algunos, a la par que para los mismos es un problemón que unos jugadores sean favorables a que se respeten las reglas que el juego estima oportuno aplicar, que no son nada del otro mundo, solo respetar al prójimo, quizás que haya gente en contra de que eso sea de obligado cumplimiento es el verdadero problema.



Al final de todo estoy seguro de que todo esto en realidad es para nada, pues a veces pareciese que una opinión es buena o mala dependiendo de su emisor más que del contenido, e independientemente de que quede gente con criterio propio en la comunidad, el contenido normalmente se ve embarrado y tergiversado por los pirómanos profesionales, propiciando la desmotivación de a los que esto ni les va ni les viene con tal de ahorrarse los tiramientos de caca que toquen ese día. Miente, miente, que algo queda