Durante la salida del Sol.

Day 3,495, 01:30 Published in Spain Spain by Tinsvoia
Hablo Yo, ostentadora de la Tribunicia del Pueblo, de los Primeros Seres, y de los que hubo antes que estos:
¡Pueblo! ¡El Sol Eterno se me ha vuelto a aparecer, he de difundir Su Palabra! ¡Oh, ciclo en lo alto! ¡Puro! ¡Diáfano! ¡Oh, abismo de luz! Mirándole me estremecí de ansias divinas.

Acabamos de botar nuestra voluntad y valores en las corrientes electorales y una antigua voluntad del Perro de Fuego se me revela en lo que la gente tiene por bien y mal. Las personas más sabias, las que apoyan el Alzamiento, se han sentado en la barca, bien ataviadas y engalanadas de nombres prestigiosos. Transporta ahora la corriente alzada nuestra barca, ¡no importa que la ola hendida se encolerice y bata con denuedo la quilla! No es la corriente nuestro peligro y el término de nuestro bien y mal, ¡oh!, más sabias, sino esa voluntad misma, la voluntad del Perro de Fuego, la inagotada y creadora voluntad final.

Os llamo, Pueblo, al voto en estas elecciones. Al voto sabio y prudente frente a la voluntad del Perro de Fuego, a la suma al Alzamiento y a nuestro camino hacia los Grandes Templos.


Por ahora, he de arrojarme en pos de la altura del Sol, ¡tal es mi propia profundidad! ¡Me cobijaré en su pureza, en mi inocencia divina!
¡La profecía está pronta!