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El dia empezó como cualquier otro, despues de haber trabajado todo el dia de ayer en la fabrica, el día de hoy tendré una cena con mi esposa, iremos a un lugar que me recomendaron.

Al ir avanzando el día se acercaba el tan esperado momento, pero de la nada, el ejercito llega convocando gente para una guerra próxima, no tenia idea de lo que pasaba, mas por mi curiosidad me acerque a ver porque tanto alboroto.
Decía que se ocupaba a todos los candidatos posibles, que México estaba en peligro. Al ver esto no lo dude dos veces y me enliste, aceptaban a todo aquel que se ofreciera y en ese mismo momento te subían al convoy que llevaba al campo de entrenamiento.

No tuve tiempo para despedirme de mi esposa, espero que lo entienda y espere por mi...

Llegando a la base de entrenamiento nos dividieron en grupos de a 50, ahí nos explicaron la situación que teníamos, el Presidente de Venezuela y de Perú tenían planeada una invasión a Colombia y nos habían invitado a ser parte de la invasión. Nuestro presidente decidió que esta guerra de expancion nos ayudaría, generaría mas empleos y mas productos por lo cual aceptó...

Después de la explicación, nos dieron un día para acomodarnos, a cada pelotón le dieron un área y al día siguiente empezaría el entrenamiento. Fueron 3 semanas de duro entrenamiento, semi-preparados fuimos enviados a Colombia, la región la llamaban ¨caribe e insular¨.

Luego de 2 dias de viaje llegamos a una base ya conquistada en un pueblo llamado Popayan, en esa base el Coronel Gonzales, nuestro líder de unidad nos dio las ordenes de batalla, teniamos que ir a Usenda, un pueblo entre las montañas en donde se encontraba una base enemiga, llegaríamos haya en helicóptero.

Al día siguiente temprano salimos hacia nuestro destino, en la cara de mis compañeros se notaba la preocupación, ninguno de nosotros estaba suficientemente preparados y no habíamos estado en la guerra antes, todos estábamos nerviosos por saber lo que nos esperaba.

Al acercarnos al objetivo, ya se veía los batallones peleando, ya había pelotones de nuestro ejercito en el área. No habíamos bajado aun y ya nos estaban disparando, fue un aterrizaje peligroso, volaban balas por todas partes, eramos 10 en el helicóptero, al bajar solo eramos 6 vivos, nuestro líder nos guió hasta un lugar seguro para reagruparnos y prepararnos, el Coronel Gonzales nos dio ordenes precisas:

Gonzales -Tenemos que llegar hasta el fuerte ubicado al otro lado del campo de batalla, nuestra misión es localizar, capturar y traer a la base el mapa de operaciones del enemigo, es de vital importancia capturar ese mapa, si logramos traerlo ganaremos la región mas fácilmente.

Mis compañeros y yo con la boca seca y un tono dudoso emitimos un ¨si señor¨. Estábamos nerviosos, mas no había marcha atrás, era ganar o morir.

Empezamos nuestro recorrido, al parecer nosotros eramos un grupo aparte, estábamos rodeando el área, llendo por entre las barricadas, no podíamos distraernos por ningún motivo, o estábamos muertos. Al principio fue sencillo, no nos toco atacar, pero llegando a un cuarto del camino empezaron a aparecer los enemigos, empezaba la verdadera batalla.

Estuve a punto de morir, una bala reboto en mi casco, por suerte mi compañero lo mato antes que me volviera a disparar, conforme íbamos avanzando, aparecían mas enemigos, perdí la cuenta después de los 7 enemigos que mate, llego un momento en que no había tiempo de contar o terminaría asesinado, pero mas o menos calculo que he matado a unos 50 soldados enemigos.

Nos acercamos al objetivo, pero la tragedia nos saludo...
Nuestro líder recibió un balazo en la pierna! tuvimos que huir hacia un bosque cercano, ocultarnos entre los arboles, teníamos que regresar si no nuestro líder moriría, mas estábamos muy cerca como para dejarlo todo.

Gonzales - Retirada soldados, esto es muy peligroso para que ustedes sigan solos.
Martines - Pero señor, estamos muy cerca, no podemos regresarnos así. Déjeme intentarlo, se que puedo.
Gonzales - Martines, es muy peligroso, seria una misión suicida. No, me rehúso a perder a uno de mis hombres. Regresaremos a la base, !es una orden!
Martines - Lo siento señor, me rehúso a seguir esa orden.

Decidí por desobedecer las ordenes de mi líder, tome mis armas y me encamine, solo avance unos metros cuando uno de mis compañeros me alcanzo, el también quería completar la misión, los otros tres llevaron a nuestro líder a la base.

Perez - No puedes completar esta misión solo, voy contigo.
Martines - Gracias, vamos por ellos.

Nos fuimos con cuidado, intentando no llamar la atención, eramos solo dos contra un ejercito. Después de un camino peligroso logramos alcanzar nuestro objetivo, llegamos a la base enemiga, milagrosamente, no encontramos resistencia en el camino.

Entramos al fuerte, sin pensar en lo que nos esperaba dentro. No duramos ni diez minutos dentro y fuimos capturados.

Perez- Padre nuestro que estas en el cielo, san.... ... esto fue un error, debimos regresar cuando tuvimos la oportunidad.
Martines - Calla Perez, el hubiera no existe. Ya no hay regreso.

Nos llevaron al centro de operaciones y nos tiraron en una esquina amarrados de los brasos y piernas. Dentro del cuarto se encontraban los lideres de los batallones enemigos y el secretario de defensa colombianos. Estaban planeando su defensa, y tenían infiltrados en el ejercito mexicano, mas no alcance a escuchar mucho ya que nos noquearon.

Al despetar los lideres y el secretario de defensa ya se habían marchado del lugar, dejándonos a mi, a mi compañero y a dos guardias en el, intente liberarme pero no podía hasta que recordé que en la televisión había visto que si te dislocabas el pulgar podías liberarte mas fácilmente de una trampa así, por lo cual no me quedo de otra mas que intentarlo.

En eso se escucho que una bomba cayo cerca, los guardias fueron a la puerta, esperando a ver si entraba alguien, algún enemigo o algo, hay aproveche yo, me disloque el pulgar y funciono, me quite las ataduras lo mas rápido posible, y me abalance contra uno de los soldados, al ver esto el otro soldado intento dispararme, mas yo rápidamente puse al soldado que ataque en la trayectoria de las balas usándolo como escudo humano, tome su pistola y le dispare al otro soldado. Logre liberarnos.

El mapa que buscábamos estaba en la mesa dentro del cuarto, tome el mapa y la arma del soldado enemigo, mi compañero, ya liberado hizo lo mismo. Ahora tendríamos que salir del fuerte...