¿Estamos locos o qué?

Day 1,995, 09:16 • Published in Spain Spain • by William W. Wulfe


Esta vez voy a ser yo quien necesite la ayuda de Coco, porque por más vueltas que le doy, no acabo de verle el sentido a algunas de las cosas que están pasando en eRepublik.

Comprendo que las alianzas están cambiando, comprendo que EDEN esté al borde de la desaparición y que los países deban reubicarse. Incluso, y aunque me cueste, puedo llegar a comprender la inminente guerra abierta entre dos alianzas que, no mucho tiempo ha, estaban hermanadas, como son CoT y TWO.

Recuerdo (una vez más, los recuerdos) que en mi época de CP existía un canal de IRC que ambas alianzas compartían, y donde podías acudir a pedir refuerzos en caso de tener una batalla comprometida, y tanto los países de una alianza como de la otra, corrían a echarte un cable siempre que podían. Recuerdo cómo muchas veces pusimos prios en favor de países de CoT como Brasil, Chile, México...

Y ahora, amigos, el panorama internacional está cambiando. Todos los países ex-EDEN están huyendo de su alianza (Croacia, Colombia o Rumanía son claros ejemplos).
Es comprensible que estos países no quieran verse en medio de un bukkake, y que busquen las alianzas que más convengan a sus intereses, y que traten de aferrarse a lo que puedan para no ser unos países neutrales sin amigos a los que todos quieran destruir.

Pero ahora viene lo complejo del asunto. ¿Cómo es posible que una alianza como TWO, que desde sus orígenes fue enemiga de EDEN, puede aceptar en ella a países que históricamente han estado claramente posicionados pro-EDEN? ¿En qué cabeza cabe que enemigos acérrimos contra los que hemos batallado siempre ahora sean nuestros aliados y/o amigos? ¿A qué brillante mente se le ha ocurrido que un país como Colombia (que en mi presidencia borramos) entre en nuestra alianza? Es más, ¿cómo se puede explicar que haya que pegar por Rumanía contra Bulgaria (miembro founder de CoT y que tantas veces nos ha ayudado)?

Hay veces que las cosas que pasan en política exterior quedan lejos del alcance de la comprensión de la gente, que día tras día, nos batimos el cobre en el campo de batalla. He de admitir, que desde la posición de presidente, o de HQ de una alianza se ven mejor las cosas y su porqué. Yo no he estado nunca en el HQ de una alianza, pero sí he sido CP y por ahí sé de lo que hablo. Pero, por más vueltas que le doy, no consigo comprender qué sentido tiene la inclusión de los dos citados países (Rumanía y Colombia) en la alianza TWO.

Iba a decir en este punto: “Especialmente sangrante es la aceptación de … en la alianza...” pero no sé a qué país citar, porque ambas anexiones me parecen igual de sangrantes. ¿Por qué?
- Rumanía por ser miembro fundador de la casi extinta EDEN, por haber pegado tantas veces en contra de nuestros intereses, por haber sido una de las grandes enemigas de países otrora aliados como Bulgaria en todo el conflicto de las guerras bálticas...
Y, por si fuera poco, cuando estaba en trámites de ser aceptada por la alianza, tanqueó como una bestia contra Polonia en Saxony, partiéndoles sus regiones por la mitad y privándoles de sus bonus.

- Colombia porque sinceramente me parece una patada en las partes nobles de nuestra amiga, aliada, hermana Venezuela... Me parece un corte de mangas en su cara negarles su única posibilidad de expansión y más teniendo en cuenta que tenemos parte de sus bonus originales alquilados. Porque Son miembros de la sub-alianza CUA, con la cual las relaciones son inexistentes...

Podría añadir miles de motivos más por los que veo totalmente inapropiada la inclusión de Colombia y Rumanía en nuestra alianza, pero es que luego me acusan de escribir tochos demasiado largos.

Por todo esto, y por mucho más, cabe plantearnos una pregunta: Al margen de que sigamos junto a nuestros siempre hermanos y aliados polacos... ¿nos queda alguna razón más para seguir en una alianza que admite como amigos a nuestros enemigos? ¿Hay algún motivo por el que debamos considerar hermanos a quienes tantas veces derramaron nuestra sangre?

Cada cual tendrá su opinión propia, pero la mía está clara. Para mí, los enemigos nunca serán hermanos. Lo siento, pero hay cosas que jamás podré digerir.

Say no to Colombia! Say no to Romania!


Say no to traitors!!