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Me despierto con el sonido de mi móvil. Otra vez he tenido esas pesadillas de eEspaña borrada por Portugal, buf, mejor olvidarlo.

Contesto:

— ¿Diga?
—Soy Kuervo. Vamos pabman, despierta ya, a ver si aún llegas tarde al congreso. — ¡El congreso! Es verdad, ¡que soy congresista! — ¿Tienes transporte?
— Estooo, no. Aun no tengo coche. — Respondo sonriendo
— Pues ahora te envío a alguien, cuando llegues allí, busca a Jervaj, que creo que ya se ha puesto en camino, y no quiero que os coman los tiburones cafeteros.
— Ok. Hasta luego.

Me visto con mi mejor traje (aunque intento no parecer muy formal, ya que la corbata me queda fatal), y bajo a la calle.

Me detengo a examinar el periódico que reposa sobre mi buzón.

PCeE 657 Votos, 10 congresistas
GDLN 626 Votos, 10 congresistas
FC 457 Votos, 7 congresistas
UDE 486 Votos, 7 congresistas
eFalange 371 Votos, 6 congresistas
Sin sorpresas

No me da tiempo ni a leer el nombre del periódico, pues en pocos segundo aparca enfrente de mí un coche negro con cristales tintados y un parche pirata en la puerta del conductor

—Sube — me dice una mujer desde dentro
Desde el asiento trasero veo un ojo que me suena bastante.
— ¿Evvyta?
— La misma. ¿Ves? He pasado de tutora de pequeñitos como tu, a chofer.
Aunque cualquiera le pondría voz enfada (sobretodo conociéndola), la verdad es que esta ilusionada.
— Ya veo, por lo menos tendrás algún consejo que darme, ¿no?
— Mantente lejos del café, es malo para el congreso. Jajajajaja.
— Si bueno, eso intentaré. Voy al congreso con ganas de hacerlos lo mejor posible.
— Bueno aquí te dejo, que Kuervo no me paga tanto como para dejarte en la puerta. Adiós!
—Chaito Evvyta.

Bajo del coche y me veo en la calle lateral al congreso. Hay bastante gente, sobre todo periodistas, y no se sabe quien es quien en el lio. Un poco apartado del edifico hay una pequeña cancha de baloncesto donde esta mi amigo alvazna tirando.

— Ave Alvazna, los que van a cafetear te saludan.
— ¡Coño! Ave yo, pabman. Que haces tu por aquí?
— ¿Tu que crees? No creo que vaya a jugar ahora.
— Pues podrías. ¿Eres congresista?
— ¿Hace cuanto que no lees los periódicos?
— Pues desde que los guardo en la carpeta de Raúl López. Bah, seguro que el primer día no cafeteas, el segundo tampoco, pero el tercero si.
— Ja ja. Eso no te lo crees ni tu. Va, vete con tus ardillas que tengo un poco de prisa.
— Corre corre, que te quitan el sitio de dormir.

Me acerco al congreso. Primero que todo, buscar a Jervaj. Supongo que con lo aplicado que es, debe de estar ya dentro, preparando el boli.
Me acerco a la puerta y me uno a algunos compañeros de GDLN.

—Buenas.
— Mira, el que faltaba, ya estamos todos, no ¿cristiang? — Me saluda eclank.
—Si. pabman, ¿lo tienes todo? — Responde cristiang.
— Creo que si. Un boli, un folio, y el portátil. ¿Me falta algo?
— Tazas de café, y el maletín para robar todo lo que puedas. — Dice Jervaj por detrás de mí.
— Mira, el jovenzuelo que iba de bueno, se nota que ibas con la eFalange.
— Si jaja. Supongo que Kuervo te mandó que me buscaras, pero al final te he tenido que buscar yo.
— Si, buenoo. ¿Vamos adentro?
— Tira tira.

Entro al edificio y me asombro de lo que es. El gran pasillo se abre paso ante mí. Dentro hay muchos miembros de varios partidos. Sobretodo se notan los de GDLN (las capas negras es lo que tienen), pero no pasan desapercibidas las listas del PCeE, con solo nombres en rojo.
Otra vez me suena el teléfono.

— ¿Digamelon?
— Uy uy que anticuado se ha vuelto mi pequeño. Eso de ser congresista te ha dado demasiadas alas.
— ¡Lisud!
— Que, ¿preparado?
— Por supuesto, estoy aquí rodeado de tiburones.
— Pues cuídate de ellos, que ya lo dice el dicho “mas sabe el eDiablo por viejo, que por eDiablo”.
— ¿Por eDiablo te refieres a Plato?
— No, aunque podría ser. Va, cuídate ahí dentro, y felicidades.
— Adiós.

Ya no tengo otra escapatoria. Me siento en mi silla y presto atención a todo.

— Bienvenidos, congresistas. Acabáis de recibir vuestro salario de 5 golds para este mes. — el que habla es Plato por video conferencia. —Espero que luchéis para ayudar a vuestro país políticamente y no os dediquéis a cafetear todo el día. — ante esta frase, todos los presentes asentimos con la cabeza, aunque algunos con más ironía que otra cosa. — Os deseo mucha suerte en organizar el nuevo mundo.

Después se apaga la pantalla y todos se quedan en silencio unos segundos. Después, me llega un e-mail nuevo en el portátil:
“Te recomiendo que estés atento a cualquier cambio en esta página.Unificado
Atentamente: tirant”
Salimos todos del congreso y cada uno toma su camino.

Me dirijo ahora hacia la parada del taxi más cercano, donde cojo uno y me voy directo hacia las oficinas del IAN.

Llamo a la puerta y me abre Kawen.

— Hola pabman.
— Buenas, quiero organizar un concurso para el IAN. Quiero repartir dos de los golds que he recibido como premio por el congreso, y quiero hacerlo mañana por la tarde.
— Pues mañana, después del reparto a los novatos, tienes libre la sala para ti. Me gusta esa idea, aunque también me gustaría que mantuvieras tu promesa de meter a los novatos en la política.
— Eso no se pregunta. Bueno, pues adiós.

Vuelvo a coger un taxi y ahora me dirijo a casa, donde espero descansar por fin durante unas horas seguidas…