Pasión de multis

Day 3,377, 06:55 Published in Spain Spain by D I V O

Era una noche de invierno, Il Divo sacaba su mejor traje del armario, era un día especial.


"Resistiré... para seguir viviendo...", sonaba su teléfono móvil.

- ¡Ya me está llamando Multitriste! ¿Tan tarde es? - Pensaba en alto Il Divo mientras miraba su reloj, comprobando que ya eran las 1 de la noche - ¿Si? Digame.

- ¡Il Multi! ¡Venga que Bakunin ya lo está dando todo en la disco y si no vamos ya se lo va a tirar otro! - Decía agitado Multitriste.
- Bakunin no se va a ir a ningún lado sin ti, Capi, eres la niña de sus ojos.
- Si tú lo dices...

Il Divo pasó primero a recoger a SrMojiis que ya estaba listo para la acción.

Al llegar a su casa empezó a tocar el claxon como señal para que saliera.

- Cada día estás más feo Divo - Afirmaba Mojiis.
- La has tomado conmigo desde que has vuelto a la ciudad, ¿eh? - Respondía Divo - Vamos a por Duque y a por Zakk, que están en el parque de botellón. Capi ya está en la disco en busca de su amado.
- ¡En marcha! Por cierto, ¿qué tal tu último pleito en el Congreso? - Se interesaba Mojiis.
- Bueno, ya sabes, lo de siempre. Ahora uno respira dado que la Mesa no tiene que deliberar sobre las denuncias, pobrecillos los de la Junta. Pero bueno, la cosa es que me han absuelto.
- ¿Cuándo acabará el show de denuncias?
- Pues no lo sé, no depende de mí... en fin, ya hemos llegado, a ver que se cuenta esta gente.

Se oye entrar en el coche a los bricomaniacos a la par que Zakk valora lo feo que va Mojiis y lo guapo que se ha puesto Divo.

- Vamos al lío, que la sangre alcoholizada no me gusta - Se quejaba Zakk
- Mientras atenderé una llamada... ¿Hola? ¿Nikola? - Avisaba Duque, mientras tenía su móvil pegado a la oreja intentando hablar con quien había llamado.

Mientras los fiesteros iban llegando a la discoteca vieron como una masa de gente se agolpaba a la salida de la discoteca en forma de corro, los pasajeros del coche se temían lo peor. Efectivamente, Vihesito (aka Huevesito) estaba en plena discusión-pelea con Capi.

- ¡Bakunin es mío! - Gritaba Capi.
- ¡No! ¡Es mío! ¡Yo lo ví primero! - Respondía Vihesito.
- Pero a ver, que yo no os quiero a ninguno de los dos... - Intentaba zanjar Bakunin.

Pero es entonces cuando Capitán, en un gesto de amor verdadero, hizo una multi como él sabe, eso hizo que la balanza se decantara, había tocado la fibra sensible de Bakunin. La conexión fue instantánea y el amor empezó a fluir, parecía como si se fueran a comer el uno al otro allí mismo.

Mientras observaban el espectáculo de amor y desamor Duque le decía a Il Divo:
- Esto es amor y no lo que tienes tú con el pulpo.
- Son nuestras costumbres y hay que respetarlas.

Aquella noche se comenta que hubo bastante ajetreo en la casa de Bakunin... con una sorpresa muy especial:


Y así fue como un día de San Valentín, el amor reinó.