Teníamos un juguete
Rodrigo Zeballos
Teníamos un juguete; era el más divertido del mundo. No lo habíamos inventado nosotros pero jugábamos mejor que sus inventores. Aceptamos algunas palabras de su idioma original: PP, CP, MoE, MoFA, pero enseguida lo llenamos de palabras nuestras: che, dale, bo. Empezamos a jugar en la tarde, en la noche, en la mañana, en invierno y en verano, hasta que un día algunos de los nuestros, los que jugaban mejor, dejaron sus empleos y se dedicaron por completo. ¡Y qué bien jugaban!
Era tan grande la belleza de su juego que muchos dejamos de jugar y nos pusimos a mirarlos. Armamos Partidos Políticos, construimos foros y periódicos, solamente para interactuar más y de cerca con los mejores de cada equipo. Después organizamos la Constitución, discutimos reglas y elegimos colores para los partidos. Éramos hombres, pero actuábamos como niños en la mañana del seis de enero.
Y claro, los que habíamos nacido en un Partido queríamos que el 5 ganaran los nuestros, y que los vecinos perdieran. Entonces le incorporamos una variante al juego: mientras se acercaban las elecciones, teníamos que shoutear y hacer propaganda. Y así lo hicimos.
¡Qué bien nos salía especular! Pronto averiguamos que no solo éramos buenos con el juguete, sino también administrando el ámbito de juego. No habíamos resultado espectadores tristes, como en otros continentes. Nosotros nos involucrábamos, tirábamos litros de tinta virtual para arengar a los nuestros y componíamos hasta versitos de aliento. «Sí sí señores / yo soy del PLU. / Sí sí señores / de corazón». Nos divertíamos durante la semana inventando estrofas, y hasta empezamos a componer otras, más picarescas, para fastidiar al vecino. «El PLU tenía un carrito / El PSU se lo sacó / El PLU salió llorando / El PSU salió campeón». Qué risa nos daba molestar a los vecinos.
Imagínense. Si el juguete ya era divertido en silencio, con el contrapunto de los jugadores, el pasatiempo se convirtió en un espectáculo asombroso. Tanto, que venía gente de todo el mundo a conocer nuestra interna política, llena de bardo barato y trochoposts. Habíamos aprendido a vestir al juguete con accesorios.
Nuestros mejores jugadores, que ya empezaban a jugar en otros países, al debutar en el extranjero sentían un vacío: la emoción de las discusiones no era igual. Todos cordiales, nadie peleando. Muchos elegían volver a su país de origen, incluso perdiendo fortunas de bonus, con tal de escuchar otra vez el rumor de los nuevitos dirigidos por los más experimentados.
Fue entonces cuando nos empezó a interesar más el accesorio que el juguete.
En esa época ya empezamos a exagerar la emoción que sentíamos. Los jugadores, que hasta entonces caricaturizábamos pequeñas guerras ficticias, olvidamos que actuábamos en chiste. Empezamos a llamarle «ideología» a nuestra simpatía por un modelo de gobierno.
Y los cantos se volvieron literales. «Corrieron para acá / corrieron para allá / a todos esos putos los vamos a matar». A muchos Partidos esto les pareció muy rentable y reforzaron la idea de la «ideología». El juguete se había vuelto tan importante como la vida. Era, incluso, un resumen de la vida.
Mientras en la cancha ocurría el juego, las tribunas se felicitaban a ellas mismas, y creímos sensato fundar periódicos, emisoras de radio y foros privados que informaran durante las veinticuatro horas sobre el juego, aunque el juego solo ocurriera una vez al mes. No nos pareció excesivo. Porque del 6 al 4 queríamos saber todo sobre los planes, sobre los PPs y sobre las peleas.
Los relatores del juego, que al inicio solo decían los nombres de los políticos en el periódico, y que hacían alguna que otra entrevista, también empezaron a fingir emoción exagerada en el relato. Durante las elecciones cantaban los votos en los shouts, como poseídos, como si no hubiera nada más importante en el universo, y después le pedían calma a los lectores.
Nadie sabe cuándo fue, exactamente, que todo se fue al carajo. Nadie recuerda cuándo murió el primero de los nuestros, ni a manos de quién. Nadie recuerda la primera multi. Nadie recuerda la primer elección fraudulenta. Nadie sabe cómo algunos se hicieron dueños del juguete. Pero un día las tribunas se convirtieron en campos de batalla. Y la prensa no hablaba de la muerte de seres humanos, sino de la muerte de «miembros de». Para alimentar la pasión.
Los jugadores que triunfaban en el extranjero ya no quisieron volver, y los dueños del juguete se llenaron los bolsillos sin mejorarle el mecanismo.
Hoy, cuando vamos a ver jugar a los nuestros, ya no hay sombreros, ni rabonas, ni paredes. El pasto está alto y descuidado. Y pusieron una manga de plástico para que los jugadores puedan entrar a la cancha sin morir.
Teníamos un juguete. Era el más divertido del mundo. Todavía no sabemos si fue un accidente, pero rompimos el juguete en mil pedazos. Lo hicimos mierda.
Y lo más triste es que no sabemos jugar de otra manera.
Comments
Este texto lo escribió Hernán Casciari y yo me tomé el atrevimiento de modificarle algunas cosas para que encaje mejor. Para reflexionar!
Link al artículo original: http://editorialorsai.com/blog/post/teniamos_un_juguete
Espero que les guste 😛
Para mi está bueno...
Ya lo había leído cuando lo publicó luego de la suspensión de Boca River, en Argentina.
Es un buen artículo.
Votado.
Muy buen artículo. Votado!
Esta muy bueno...se supone que el juguete es erep?? lo volvere a leer por las dudas JAJAJA
o7
Me gusto el articulo pero no creo que en las elecciones actuemos con tal vehemencia, hemos tenido alguna discusión pero trabajamos juntos la mayoria del tiempo, incluso creo que esto es lo que viene salvando a eUruguay.
hoy uruguay esta muerto, cuando vivía si habían puteadas de todos colores y multis de todos lados
Estamos intentando resucitarlo pero se necesita de la ayuda de todos el compromiso con la ecomunidad debe ser total, si esto no se consigue dificil salir del pozo.
Aunque la alianza con Nebula, más las relaciones internacionales más los planes de financiación ¿te parece que esta muerto?
siempre... aunque el juguete allá quedad@ tod@ ech@ mierda habrá un día de resurrección.
votado
V!!!
En la vida nada es eterno. Y todo está destinado a corromperse.
Siiiii no seannnnn caretasssss jajaaj se le puede poner fecha si, fecha nombre y apellido, no se me vengan a hacer ahora los chanchos rengos que las torres gemelas no se cayeron solas, LAS EMPUJARON !!! jeje
el punto de quiebre sin lugar a dudas fue el comienzo de la debacle y la cuesta abajo euruguaya comenzo sin lugar a duda alguna con el primer robo de los parba, CHAN!! y el que diga lo contrario falta a la verdad, la segunda fue esa apertura "de miras" que hablaban algunos de dejarce venir a las barbas a la porteña corrupta que echaban de la otra orilla y recibian aca abiertos de nalgas, emvaselinados y con carita feliz...
y ya el deblacle total total el acaboce maximo que termino por golpear el ultiomo clavo del ataud euruguayo fue sin lugar a dudas el cierre del foro viejo y la apertura del dictatorforo nuevo junto con el cierre del mesesnger.... eso fue la PUNTADA final...
por cierto se acuerdan de los que desfenestraban tanto al mesenger en su tiempo jjajaja como se esta poniendo de moda de nuevo el nuevo sistema jejejejej ... no se puede escupir pa riba jejejeje... no se puede !!!!!!!