Reforma o Revolución

Day 3,508, 03:23 Published in Spain Spain by SrMojiiS

El título de este artículo es también su resumen, y resume lo ocurrido con el Congreso outgame desde un punto de vista personal.

Aquí les habla un jugador, con sus filias y fobias, con sus amistades y enemistades, con su historial, con sus cosas buenas y sus cosas malas, con sus traiciones y sus fidelidades, les habla un jugador que se ha involucrado en Política, en Partido, en Congreso, y en Gobierno.

Mi experiencia, si bien corta si la comparamos con muchos de los jugadores de la Comunidad eespañola, me ha permitido jugar con jugadores de diversos bandos, con jugadores enfrentados, jugar en bloques, ver y conocer como los bloques y las alianzas internas cambiaban, ver en definitiva la evolución natural de una simulación política.

Pero hay algo que desde mis inicios siempre he visto, y es una crisis de la Institución del Congreso. Esta crisis podía ser anunciada por congresistas ¨sueltos¨ de diversos partidos, por jugadores que se mantenían ajenos a ello, o incluso por el Partido que con distintos picos de actividad siempre he visto contrario a la situación en la que estaba el Congreso.

De esa situación hace ya 3 años, probablemente ya estuviese así de antes, pero esa no es mi experiencia. En estos tres años, se han probado distintas iniciativas, con periodos de guerras internas y periodos de paz y unidad en la que se veían buenas intenciones por los principales actores pero que finalmente se difuminaban en ese ambiente bélico de la Cámara Legislativa.

En esos tres años, los detractores y los defensores del Congreso han mutado, han experimentado sus diversas armas contra el otro grupo, han cambiado sus integrantes, las mayorías y las minorías han ido cambiando, y los ¨ganadores¨ de cada batalla eran vengativos con los ¨perdedores¨, no se les tendía la mano, se les apuntaba con la espada.

Tras cada batalla, se firmaba una Capitulación, una capitulación nada generosa, no enfocada a resolver los problemas sino a recordar quien ha ganado. Es la falta de Reforma.



Es también esa falta de Reforma la que ha hecho girar a los que, en un principio, podían defender una reforma y ahora abogan por la revolucionaria decisión de disolver el Congreso de manera unilateral.

El Congreso no lo ha matado el Gobierno, el Congreso se mató a si mismo por egoísmo, por falta de reforma, por falta de miras, por falta de integración. Los nuevos vencedores podrán decidir si la capitulación será generosa o vengativa, pero en gran medida, lo que esta en juego no es solo una institución del juego, es la Unidad de una comunidad muy dividida.

Esto es una opinión personal y no representa más que a mi mismo y, considero que, la revolución esta legitimada ante la falta de reforma y reprocho al Gobierno únicamente algo que llevo meses reprochando a jugadores como Rezo o Kekco; las formas.