Tan cerca y tan lejos

Day 1,530, 10:53 • Published in Venezuela Colombia • by Pablo Ortega 2

Saludos nuevamente a todos. Tras dos días "dos-clikeando", he decidido retornar para registrar para la eHistoria la cadena de sucesos que nos ha llevado nuevamente a la pérdida de nuestra independencia, y la posterior anarquía total donde se ha demonizado injustamente a varios individuos sin reconocer las propias culpas en un increíble festival de pánico colectivo.

Todo empezó aquel fatídico día, tras la victoriosa jornada de Zulia, cuando empezó a gestarse un nuevo desastre con la negligencia del actual Presidente, Uzielg, en lanzar un NE a Portugal antes que ellos lo hicieran con el fin de tomar ventaja en la futura ofensiva portuguesa que se nos venía encima. En ese momento, la frágil unidad lograda con las jornadas de Guayana y Zulia se desmoronó entre demagogia, partidismos y un ataque general de pánico colectivo que nuevamente volvió a dejar a nuestras FAN inmovilizadas como ocurrió durante la ofensiva de la Triple Alianza a inicios de diciembre.


Así fueron los últimos días de eVenezuela.

Pese a la gran responsabilidad que tuvo nuestro presidente, Uzielg, en dicho desastre, el pánico posterior sumado al ya tradicional pesimismo de varios miembros del Alto Mando Militar (nuestros "chopos de piedra" xd) negó cualquier intento de auto-crítica y reflexión ante la ordalía por venir, y cada vez que yo entraba en canales IRC sugiriendo alguna manera de al menos tratar de ganar tiempo en Zulia, fui pateado, expulsado y criticado a más no poder, en lo que se supone es un país democrático donde se respetan las opiniones ajenas por más equivocadas que estén.


La verdad detrás de los canales IRC. Hay cosas que nunca cambian...

El CND, que había luchado con honor y valor en las gloriosas batallas de Guayana y Zulia, pasó a criticar demagógicamente a Uzielg sin reflexionar siquiera antes en que ellos tuvieran mínimamente culpa de la delicada situación de la nación, sin pensar antes en que ellos no se opusieron en lo más mínimo al acceso de Uzielg a la presidencia, ni cualquier otro intento de auto-crítica antes de proponer alguna solución a la nación, dando por perdida Zulia antes de empezada la batalla y sumándose al pánico general que inundaba eVenezuela.

Es cierto que vencer la arrolladora ofensiva portuguesa era algo casi imposible debido a la disparidad en alianzas favorable a los portugueses, el agotamiento de nuestros recursos después de las grandes ofensivas en Guayana y Zulia, y por último, el escaso apoyo internacional con el que podríamos contar debido a la delicada situación que pasaba Serbia en esos momentos, lo que obligó a nuestra alianza (ONE) a volcar allá todos sus esfuerzos bélicos. Aún así, eso no quita que cuando ya das por perdido algo, le estás regalando en bandeja de plata el triunfo a tu enemigo.

Ni siquiera se trató de buscar una muerte digna en los campos ensangrentados de Lagunillas y Maracaibo. Nos rendimos cobardemente ante el enemigo portugués antes siquiera que empezaran a movilizarse contra nosotros. Aún así, cuando me conecté el miércoles decidido a pelear con todo lo que me quedaba en mi almacén en Zulia, vi a varios luchando valientemente en Zulia, y a todos esos que decidieron luchar conmigo para al menos ladillar a los panaderos, se merecen mi más sincero aplauso y elogio. Esos son nuestros verdaderos patriotas, decididos a dar su propia vida por eVenezuela, y no los que alardean de viejas glorias en el IRC. Pese a lo imposible de la meta, luchamos por un milagro y un ideal: eVenezuela.


Un verdadero venezolano nunca se rinde. PATRIA O MUERTE.

No obstante, y como me lo temía, nuestros esfuerzos fueron inútiles a la larga. Pese a que luchamos con honor y valor, la falta de unidad terminó condenando todo intento de siquiera subir un poco la barra de combate. No obstante, creo que este lamentable episodio debería invitarnos a la reflexión y la auto-crítica, en vez de echarle la culpa únicamente al gobernante de turno en un miope y desvergonzado egoísmo.

Pese a los errores de Uzielg como Presidente, creo que como nación todos somos responsables de la debacle, tanto por los constantes intentos de golpe de Estado de las FAN liderados por los "chopos de piedra", como por no haber sabido elegir correctamente a nuestros gobernantes en su momento (yo fui de los que votó por Uzielg, y ahora mismo me arrepiento de ello). En vez de demonizar a un solo hombre, es hora de mirarnos nosotros mismos al espejo y quitarnos la viga del ojo antes de criticar la paja en el ojo ajeno. De hecho, he de señalar que el mismo Uzielg trató de reparar su error tratando de organizar una última defensa, pero fue tan humillado y golpeado como lo fui yo en el mismo empeño, y al final, sus buenas intenciones se terminaron estrellando con el duro muro del miedo y el cansancio.

Si el PDV abandonó el actual Gobierno, ha sido más por nuestra consciencia de que Uzielg no estaba totalmente preparado para las responsabilidades de ser Presidente pese a sus buenas intenciones y esfuerzos en ese ámbito (yo mismo soy testigo de cómo intentó promover la unificación de la patria y promover reformas necesarias para la reconstrucción del país), que por una intención demagógica de "subirnos al carro" de criticar fácilmente los errores de otros en vez de mirar primero los nuestros propios (entre los cuales estuvo nuestra subestimación de lo difícil de nuestros objetivos de Unidad Nacional y el habernos fiado plenamente de Uzielg pese a su falta de tiempo y su negligencia ya mencionada arriba), por lo que creo que para volver a levantarnos de esta desgracia (como lo exige nuestro honor nacional), es hora de mirar nuestras propias fallas y corregirlas, uniéndonos todos en un mismo ideal: Venezuela. Por eso pido el cese de las disputas internas, y que se consolide la unión, aunque sea a costa de mi propia eMuerte.


Por esto siempre he luchado y bajo esta bandera siempre lucharé. VIVA VENEZUELA.