Vacaciones en el Mar

Day 2,471, 16:36 Published in Spain Spain by Medusa 62

Después de estar desconectada del juego aproximadamente algo mas de 15 días, me he alegrado mucho ver como el modulo periodístico ha recobrado energía, aunque solo sea por unas misiones, pero bienvenido sea.

Mi articulo es el ultimo de una serie sobre vacaciones, así que no tiene nada que ver con el juego, es algo contado en primera persona sobre mis últimos días de vacaciones en un crucero.


Mucha gente de mi generación debemos tener sobrevalorado el concepto de un crucero por una serie de televisión de la época que se llamaba como el titulo de este artículo “Vacaciones en el mar”, pero como siempre pasa con las películas, de lo que te cuentan a la realidad hay mucho, pero mucho trecho.


Mi crucero fue de 15 días por los países del Báltico, en un barco de una compañía americana, el barco se llamaba Celebrity Constellation , salíamos de Amsterdam, así que primero vuelo hasta allí y después al barco. Eso fue todo muy rápido, y cuando me quise dar cuenta ya estaba en el barco, hasta aquí todo bien.



Una de las diferencias es que en Madrid el día que salía había 41 grados, y al llegar a Amsterdan había unos 22, mucho fresquito, pero al principio lo agradeces. Nada mas llegar al barco te dan la bienvenida, te dejas llevar y terminas en tu habitación. Las vistas desde el balcón de mi habitación en el barco eran geniales. La primera con la que te encuentras, es que al ser un barco americano los horarios de comida son algo raros para nosotros, pero bueno, a mi me da lo mismo, cambias los horarios de comidas y listo, así que me encontré cambiándome para cenar a las 6,30 de la tarde para ir a cenar a la 7,30 h. Bien es cierto, que podía haber cenado mas tarde, pero entonces me habría perdido el espectáculo que había las 21,00 h. Que esa era otra, parecía la conejo de Alicia en el País de la Maravillas, porque o corrías, o te perdías cosas y por supuesto, me pasaba como a los niños si hacia una cosa, no podía hacer otra y siempre te coincidían dos cosas que te apetecían hacer a la vez.

Llegó la primera mañana del crucero, el capitán anuncia por megafonía que tendremos un Sunny Day, pensé que bien!, me voy después de desayunar a la piscina, pero al levantarme hacía mucho frio, pensé que el aire acondicionado de la habitación estaba muy bajo, procedí a cambiarlo pensando que ese era el problema, pero es que en todo el barco hacia un frio de cojo—es, de las pocas chaquetas que llevé me puse una para desayunar (ahí ya comencé a pensar que no podría bañarme en la piscina). Tenia tanto frio que me tuve que marchar a la tienda del barco a comprarme algo de equipamiento para el frio, pero claro, me compre algo para dentro del barco, sin contar con la que me esperaba fuera.


Al dia siguiente, primera parada ir a visitar Berlín (puerto mas cercano Warnemünde), aquí hacia frio, pero bueno se podía llevar con la ropa de abrigo que llevaba. Como el viaje era largo, salíamos a la 6,30, asi que ya podeis pensar a la hora que había que levantarse para desayunar , asearse, etc.

A partir de aquí las cosas “mejoraban” por momentos, no por las vistas que eran espectaculares, sino por el frio, la temperatura cada vez bajaba mas, no podía comprenderlo, pero coñ_ si estamos a mediados del mes de agosto, no es posible que aquí haga tanto frio, y el capitán otro día de Sunny Day, supongo que el sol debía estar ahí, tras las nubes y el personal en la piscina tan contentos, tumbados tomando no se que, porque el sol no podía ser. En un alarde de valentía, me tumbo en una tumbona, con una manta encima a ver si aguanto, pero es que me parece ridículo estar tumbada en una tumbona con chaqueta y manta, paso, me levanto.

Luego por si no tenia suficiente con el tema de la temperatura, me he pasado la mitad del crucero perdida por el barco, porque pese a que te dan un mapa, no sabes si vas hacia proa o popa, hay un montón de escaleras, ascensores, pasillos, etc., si todo esto lo combinamos con los 12 pisos del barco, los 2000 viajeros mas otros tantos trabajadores, varios restaurantes, cafeterías, tiendas, teatros, cines, gimnasio, peluquerías, etc. Pues te pierdes, lo bueno es que ves a mas gente como tu, preguntando si has visto esto o aquello y tu preguntando a su vez si ellos han visto otra cosa que tu necesitas, por si fuera poco, todo esto en ingles, porque allí no habla cristiano nadie. Lo bueno de todo esto, es que terminas haciendo “amigos de perdidas”, ya nos conocíamos , nos saludábamos, solo nos faltaba preguntarnos por la familia.

Tras otro día de navegación llegamos a Estocolmo y ya podéis imaginar, según nuestro capi teníamos a Sunny Day, ¡que bien! Ahora le toca el turno al modelo de todo el viaje, lo he llamado “modelo cebolla”, primero una camiseta, después una blusa, encima un jersey finito y rematado con una especia de chaquetón de lana gordo que me he comprado en la tienda del barco (se han debido de forrar con gente como yo).

Tu piensas, bueno ya estoy preparada, pues noooooo, craso error pensar eso, el tiempo aquí es precioso, según te dice la guía (yo alucino), pero pueden caer algunas gotas. ¿Algunas gotas? Juer, pero si parece el diluvio universal, a ver , que solo dura unos 15 o 20 minutos, pero vamos yo no he visto llover asi en mi vida. Asi que de regreso de la preciosa excursión (el sitio es increíble) vuelta a la tienda del barco a por un chubasquero a ser posible que abrigue un poco.

Reconozco que en San Petersburgo, al inicio de la mañana teníamos 14 grados (yo pensando en mi abrigo), terminamos con algo de sol , al fin Sunny Day, pese a que daba lluvia, pero si, si. Después de visitar el Hermitage , al da siguiente fuimos al palacio de verano de Catalania la Grande (Pushkin) y al palacio de Peterholf, con sus jardines y fuentes. Aquí al regreso vino lo bueno, por llamarlo de alguna forma porque antes de llegar al barco se puso a diluviar de tal manera que los paraguas del barco (son como sombrillas) se volaban y se daban la vuelta, alguno termino en el mar, además con tanta agua, daba igual el paraguas, porque no servía para nada. Resumen, parecíamos a Mary Poppins pero con mal tiempo.

En fin, como cada vez íbamos mas al Norte (Helsinki y Tallin) pues se puede imaginar que no mejoraba el tiempo, así que era cuestión de acostumbrarse. Menos mal que luego ya, volvíamos hacia abajo a Dinamarca (Copenhague), pero tampoco es que mejorara mucho.

Cuando ya piensas que te has hecho una marinera de primera división, viene la prueba de fuego, nos dicen que tendremos un poco de marejada, ¿un poco de marejada? Pero si para poder andar tenia que hacer equilibrios como en la cuerda floja, menos mal que esto me paso el ultimo da del crucero.

Resumen del viaje, Sunny Day igual a día de sol de conejos, en el mejor de los casos, en el Norte pese a que sea Agosto no tienen verano (salvo un día o dos en todo un año).


¡Viva el sol y el calor en verano!


PD.: ahora comprendo a los pobres extranjeros cuando vienen a nuestro país y el primer dia se ponen rojos como gambas de tomar el sol.