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Hay cosas inesperadas que te cambian la vida. Cosas que no tenías previstas. Porque tu previsión siempre ha sido muy poca. No importa que tengas agendado todo, hasta el ultimo detalle. No importa que hayas hecho planes. Ni que los cumplas. No importa que te hayas acostumbrado a un modo de vivir y de ser. Que creas tenerlo todo resuelto y bajo control. No importa que tan eficiente seas. Ni cuan hábil, meticuloso, o frio te sientas. Simplemente aparecen y te cambian la vida.

Luego viene el análisis. Desmenuzas los hechos hasta la más minuscula miga, como quien deshace una pieza de pan. Pero en los elementos contenidos en ellos no está la respuesta. Te preguntas entonces ¿porque?. Como si hubiera una razón o una causa para todo. Y no la hay. Pasas entonces de querer conocer los antecedentes, a preguntarte sobre la función que puede tener el hecho para ti, o el sentido del mismo. Te preguntas ¿para que?. Y tampoco allí está la respuesta. No puedes atrapar la realidad en los moldes aprendidos por medio de la razón. Y las respuestas se te escapan.

Pero tu vida ya cambió. Y ya nunca serás el mismo que fuiste. Ahora sabes que hay cosas que te cambián la vida. Quizás inexorablemente. Puedes sentirlo. Puedes conocer su sabor. Pero comprender? no puedes comprender. Y entonces entras en la estación del agradecimiento. Y dás gracias aparentemente sin razón alguna. Gracias a Dios. Gracias a la vida. Gracias a los demás. Gracias incluso a ti mismo, por permitirtelo. Sientes en lo profundo de tu corazón un suave y tibio sentimiento de gratitud. Y todo lo mejor de ti comienza a salir, como una energía imparable, que aún no estás acostumbrado a encauzar.

Hay experiencias o personas que te tocan en la fibra más profunda de tu humanidad. Y acaso no dirás mucho al respecto. Y los demás tampoco lo dirán. Y las cosas fluirán como de costumbre, con sus altas y bajas, con sus avances y retrocesos. Pero tu ya no eres igual. Algo significativo te sucedió. Algo que alteró el rumbo para siempre. Algo que te hace sentir que ya "no hay vuelta atrás". Y allá vas. Entregando tu vida en ese camino y dejandote llevar por la felicidad.

Si fuera eso solo. !! que sencillo sería !!. Pero la vida se presenta al mismo tiempo en multiples fascetas. No lo hace en la forma perfecta o ideal. No lo hace como tu quisieras, sino como ella es. Y siempre habrá algo más que tener en cuenta. Lo sabes. Y no te importa. Estas dispuesto. Y vás a aceptar. Aceptaras la vida como venga hacia ti. En cada detalle. En cada instante. En cada lugar. Si no hubiera sucedido eso que te cambia la vida. No lo hubieras aceptado nunca jamás. Pero te dás cuenta que rechazarlo sería el peor error que podrías cometer. Y lo aceptarás.

En el viaje interior, pasas por todas las estaciones. Y utilizas todas las rutas para llegar. Y avanzas. Aunque aquellos que te ven, y que creen conocerte, piensen que vas mal. Tu sabes que avanzas. Estás seguro de esto. Porque lo que fuiste va quedando atrás. Paso a paso, dia a dia, vá quedando atrás. Y tu avanzas.

Al mismo tiempo no sabes si estás más solo, o menos solo. La medida de la soledad se vuelve ambigua. Porque ciertamente estás contigo mismo mucho más. Te reencuentras contigo mismo. y te dás cuenta que te habías perdido por un tiempo indefinido. Pero ya puedes volver a ponerte en contacto con tu escencia y con tu propio ser, mas allá de esa cosa pegajosa y amorfa a la que llamas yo. Te pones en relación con tu ser real. Sin caretas, sin disfraces, sin anestesia, ni artilugios. Vuelves al que es tu lugar.

y desde allí encuentras esa parte de ti que te había sido enajenada. Encuentras el amor. Encuentras la paz. Encuentras la tranquilidad interior, La energía, El conocimiento, El ser. Y mucho más. ¿cuanto tenías perdido?. ¿cuanto habías sustituido por cosas sin valor real?.


Hay cosas inesperadas que te cambian la vida. Cosas que no planeaste. Cosas que no imaginabas. Cosas que ocurren una vez, y nada mas............


Saludos Cordiales,
Uzielg