La intriga del poder (III)

Day 2,437, 07:57 Published in Spain Spain by deleted876776

NOTA: para comprender este artículo recomiendo encarecidamente la lectura de los dos primeros de la serie "La intriga del poder":
(I)
(II)

Hubo tensión. Mucha tensión. Tu allegado comenzó bien pero a veces le tentaba tomar decisiones posiblemente interesantes para el país, pero que a nosotros ni a mí no servían de nada.

Corregimos el comportamiento. Proseguimos. Y por meses y meses, mis honrados secuaces cumplen su misión a la perfección. 5 de 6 meses hemos ostentado el poder de forma directa... ejem, ejem, he ostentado el poder de forma indirecta.
Pronto vislumbramos algo en el horizonte. Algunos habían despertado de su letargo. Y es que es difícil llegar a la cumbre, pero imposible llegar sin enemigos aunque seamos fans del bienquedismo ilustrado con fin del poder.



Nos tratan como a una raza, un grupo o grupúsculo según algunos, una asociación interesada en nada menos que el poder. Y es verdad. Nosotros nos damos cuenta que hay que jugar con la misma jugada, y no evadir algo que la sociedad vislumbra por sí sola.

Te decides a volver a detentar el poder real. La presidencia. Denotamos experiencia, pero para algunos nos hemos convertido en un grupo de amargados podridos de poder, que hacen lo que quieren con el país en vez de hacer lo que al país le iría bien.

La oposición es conducida por un ciudadano demasiado ilustre y limpio como para ser blanco de una campaña de prensa conducida por nuestros medios. Y qué hacer cuándo no hay algo malo de alguien? Producirlo. Aún siendo tú una persona conocida y reconocida, la gente empieza a estar cansado de ver siempre la misma cara. Gritan renovación.



A veces este tipo de situaciones requieren sacrificios. Le cuelas un par de goles vía secuaces de tus secuaces que sacan información del gobierno a expuertas, tentativamente cosas graves y ciertas, pero que en verdad son falsas. Ellos los publican difamando lógicamente, y se dan una buena torta. No hay pruebas, ni indicios, como contrapartida huntamos bien a un par de periodistas haciendo entrevistas sobre puntos incómodos y sacando lo que huele mal de los allegados del ilustre ciudadano.



Día de elecciones. Malditas elecciones. Tan pronto. Ganamos por solo 12 votos en el recuento electoral, y eso que tuvimos que tirar de amigos de un secuaz para ganar. Tras el recuento de administradores ganamos por 6 votos. Seguimos en juego y con la baraja en la mano.