La Gloria del GPS

Day 2,337, 23:58 Published in Argentina Argentina by Costilla de Cerdo

El Chancho ingresó en la batalla decidido a obtener su primer BH. Disparó con bazucas, arrojó bombas, utilizó sus Tanques Q7 último modelo propulsados con una caldera alimentada con carbón, manivela manual para las ventanas y paño acoplado para secar el parabrisas en caso de lluvia.
Cuando ya no le quedaban armas el Cerdo, en un acto heroico, comenzó a quemar sus barras y, a puño limpio, abrió una brecha entre las tropas enemigas. Arrojó todo lo que tenía a mano: Encendedores, monedas, los cubiertos, la bombilla del mate. Cuando ya no le quedaba nada, pateó la tierra del suelo, mordió a sus enemigos, tragó vidrio para escupirles sangre. Exhausto, el Chancho había obtenido la puntuación necesaria: ¡Iba a obtener su BH! Restaban tan sólo 5 minutos y la Gloria en persona bajaba del cielo con la medalla. En ese preciso instante, el usuario #HiperPoronga5milmillonesdefuerza escupió un garso y, así, de un plumazo, barrió con las esperanzas del Chancho, se acostó con la Gloria y utilizó la BH para sacarse un chicle pegado en su zapato.

El Chancho estaba desolado. Ya no le quedaba nada. Su vida era una desgracia y la única salida honrosa era el suicidio. Al borde de la miseria, perdido en la ciudad, bebido y llorando en una esquina abandonada, la luz apareció.

-No te des por vencido, Hermano Cerdo.-dijo una voz.

El Chacho alzó sus ojos cubiertos por lágrimas y allí los vio. Era el batallón del GPS ofreciéndole su mano.



Le preguntaron qué había sucedido y el Chancho les relató su desgracia. Juntos, fueron a la casa del usuario #Hiperporonga5milmillonesdefuerza, lo recagaron a patadas, le robaron todas las medallas y le quemaron todas las Multis.

El Cerdo supo que no estaba solo. Que había alguien más junto a él. Y entendió que, no importa el riesgo, siempre que un camarada fuese herido, el GPS estaría a su lado para vengarlo.