¿Envidia?, Dame un Beso

Day 2,597, 11:40 Published in Spain Spain by corchuela


Amigos, hoy utilizo mi ePeriódico para pedir perdón a los que ahora son mi ePatria, a los que son compañeros de lucha, compañeros de armas, compañeros de hacer una ePatria mejor. Si, a ti, amigo eEspañol ¡¡Perdóname por no haberme dado cuenta de tu envidia!!.



Durante estos meses no vi las señales que me lanzabais como insultos y menosprecios hacia cada coment o feed, quizás por no tener un espíritu tenebroso, quizás por estar bien conmigo mismo.

Tampoco vi que pocos españoles se pasaban por mis artículos, como tampoco vi que me querían expulsar de la comunidad con métodos ilegales, con esas leyes que ellos mismos alardean de saber utilizarlas.



Por eso pido una y mil veces perdón. Y lo digo sinceramente, porque si me hubiera dado cuenta antes, hubiera puesto coto a vuestro sufrimiento, habría vendado vuestras llagas para que no os escocieran.
En este último mes me llegaron señales:



Pero no fue hasta a raíz de este artículo Entrevista a Li Sharoan, que dos personas, las cuales me dan que pensar mucho, escribieron coments sobre el artículo que confeccioné por los 5 años de Li en eR:





Yo no elegí tener un status, inteligencia, hermosura y carisma. Tampoco elegí nacer en el paraíso Andalucía, y menos aún en la eterna Sevilla, con el honor de ser sevillista. Yo si pudiera, os daba un cachito de cada cosa para así poder estar entre iguales, pero como eso es imposible ¿por qué no llevarnos bien cada uno con lo que tenemos?



Aunque me envidiéis, por favor, no me odiéis. Yo intento formar parte de la Comunidad, intento parecerme a vosotros; de verdad que me esfuerzo. No merezco ser juzgado por culpa de la Naturaleza. Podéis admirarme, es sano y normal, pero no dejéis que esa admiración se invierta convirtiéndola en odio feroz hacia mi persona.



¿Pensáis que yo no sufro aun siendo así?; decía Fray Luis que lo mejor era no ser "ni envidiado ni envidioso", cuánta razón tenía. Deberíais cambiaros conmigo durante unos segundos, para comprobar como llora mi alma al ver vuestra bilis rebosante, y ahí, amigos, os daréis cuenta que es ser mejor como sois, con vuestras carencias y defectos, a ser como soy yo, cuasi perfecto, pero con dolor en el alma.

Os he hecho, sin quererlo, nacer esa envidia, pero no dejéis que se haga, estáis a tiempo. Si no os esforzáis en que no se haga, os comerá como una enfermedad larvada que se va desarrollando lentamente en los que la padecéis e irá creciendo en el caldo de cultivo de la mediocridad, de la falta de méritos y capacidades, de la ausencia de autoestima y de la propia y personal sensación de fracaso.



No dejéis que mis cualidades, mi felicidad o mi triunfo os dañen como un cáncer interior que os va consumiendo poco a poco. Buscar vuestras propias metas asequibles, aunque yo represente lo que no podéis ser nunca. No dejéis que vuestra envidia se haga patológica, pues será tarde.



Recordad que cuando tengáis frío, Corchuela os dará una manta; cuando tengáis sed, Corchuela os dará agua; cuando tengáis el mono, Corchuela os invitará a un manguey; cuando estéis caliente, Corchuela os dará “Bejaind”; cuando estéis llorando, Corchuela os secará vuestras lágrimas.

Jesús padeció un calvario y sufrió en la cruz para el perdón de los pecados de los hombres; si yo, Corchuela El Virrey, debo pasar por otro calvario para salvaros y perdonaros el pecado capital de La Envidia, en esta eEspaña cainita, ¡¡Aquí me tenéis, en alma y carne, para ser vuestro mártir!!



Yo Corchuela, quiero ser tu amigo. Dame un beso.