Prometeo, El Protector (Presentacion del Periodico)

Day 1,838, 08:49 Published in Bolivia Chile by DarkLegion

Cuentan los antiguos oráculos y existe alguna referencia de esto es los antiguos escritos en tiempos que el mundo estaba sumido en total tiniebla, Zeus mando a dos Titanes al mundo con la misión de poblar la misma de criaturas que le hagan tributo a su nombre; Estos dos titanes eran Prometeo y Epimeteo.
Epimeteo se encargó de hacer una gran variedad de criaturas, cada una con una característica que la hacía única y diferente a las demás: grandes, pequeñas, con la capacidad de volar o con la capacidad de existir bajo el agua, algunas con grandes dientes para defenderse y un gran pelaje para soportar el frió mundo en el que habitan, otros con grandes garras y una gran fuerza; todos listos para sobrevivir este mundo tan hostil al cual habían sido delegados a vivir.
Pero Prometeo solo se dedicaba a la creación de nada mas una criatura, la misma no tenía ni grandes garras ni era muy grande, tampoco era muy fuerte ni tenia dientes fuertes, esto sucedió debido a que Prometeo había tardado tanto haciendo su creación que Epimeteo ya había usado todas las habilidades que Zeus les dio. Pero en el fondo él sabía que esta criatura era especial, porque la había creado semejante a los dioses y con la capacidad de cuestionar su obra, con el poder del entendimiento y la razón, además de la capacidad del habla.

Pero Prometeo sintió pena de su creación, ya que la había visto sufriendo de hambre y frió, pidió a Zeus que ayudara a los hombres pero este se negó a hacerlo. Entonces es cuando Prometeo se decidió a darles un regalo: el fuego, este que había sido guardado celosamente por Zeus y los dioses del olimpo, ya no sería más un secreto en el mundo, porque Prometeo decidió robarlo y entregárselos a los hombres para que estos puedan tener algo que los ayude a sobrellevar ese mundo tan hostil.
Fue cuando Prometeo escalo por la parte posterior del monte olimpo teniendo cuidado de no ser visto. Trepo y trepo hasta llegar a la forja de Hefesto, ahí estaba, reluciendo y danzando, tan hermoso: el fuego, la reliquia más preciada por Hefesto. Entonces rápidamente lo tomo y bajo con él entre las manos usando un tallo de un hinojo por que este ardía muy lentamente lo cual era muy útil.

Entonces los hombres pudieron apreciar el descenso de Prometeo cubierto totalmente con una luz, brillando a lo lejos. Los hombres que estaban sumidos en oscuridad ahora ya estaban envueltos de la luz y el calor que traía Prometeo. Y Prometeo dijo: “Aquí les hago dueños de su destino, a partir de aquí es suyo el mundo, les entrego el regalo del fuego, cuídenlo y serán bienaventurados. Pero tened cuidado, porque es muy ambicioso y puede terminar consumiéndolos a ustedes con su ambición y su poder”, entonces los hombres agradecidos construyeron un altar en nombre de Prometeo, y este sería llamado a partir de ahora El Protector.

Para Aplacar a Zeus, Prometeo les dijo que quemasen ofrendas a los dioses, con este fin quemo un gran toro. Cuando los dioses olieron las ofrendas, fue cuando a Prometeo se lo ocurrió urdir un engaño: escondió la carne bajo una capa de huesos y tendones, cubriendo el resto de huesos con apetitosa grasa. Dejó entonces elegir a Zeus la «carne» que comerían los dioses. Zeus eligió el plato de huesos, y Prometeo se quedó con el plato de carne para sí mismo y los mortales, Zeus furioso por el engaño para vengarse de Prometeo (y de la humanidad) por esta segunda ofensa, ordenó a Hefesto que hiciese una mujer de arcilla llamada Pandora. le infundió vida y la envió a Prometeo, junto la caja que le había regalado Hermes como dote, y que contenía todas las desgracias (plagas, dolor, pobreza, crimen, guerra) con las que Zeus quería castigar a la humanidad. Prometeo sospechó y no quiso tener nada que ver con Pandora, alegando que era estúpida, por lo que ésta fue enviada a Epimeteo, quien se casó con ella a pesar de las advertencias de su hermano para que no aceptase ningún regalo de los dioses. Pandora terminaría abriendo la caja, a pesar de las indicaciones en contra de Epimeteo, y liberando todo el ese mal a la tierra.


Zeus se enfureció aún más al ver cómo Prometeo se libraba de Pandora, e hizo que le llevaran al monte Cáucaso, donde fue encadenado por Hefesto. Zeus envió un águila (hija de los monstruos Tifón y Equidna) para que se comiera el hígado de Prometeo. Siendo éste inmortal, su hígado volvía a crecerle cada día, y el águila volvía a comérselo cada noche.

Este castigo había de durar 30.000 años, pero para suerte suya solo duro 30 años, debido a que Heracles pasó por el lugar de cautiverio de Prometeo de camino al jardín de las Hespérides y le liberó disparándole una flecha al águila. Esta vez no le importó a Zeus que Prometeo evitase de nuevo su castigo, ya que más gloria iría para Heracles, que era hijo de Zeus.
Tiempo después Prometeo fue invitado a volver al Olimpo, aunque debía llevar con él la roca a la que fue encadenado.
Pero en la tierra Prometeo nunca sería olvidado y se escribirían miles de poemas sobre cuando Prometeo bajo con su luz divina a iluminar a la humanidad. Y por eso siempre será recordado como El Protector