Al pan, pan y a la mierda, mierda.

Day 760, 03:45 • Published in Argentina Argentina • by sofiabio


Soy admirable, no tengo precio y por supuesto ni un centavo de más y la pobreza hace un tremendo daño a la salud, sobre todo a la mental, ¿Me felicito?.

¡Cuidado! que el mío no es un discurso compasivo con el prójimo dictado desde fuera mientras observo con lástima los estragos que provoca en un porción de personas que la padecen innecesariamente, hecho absoluta y rotundamente in.ne.ce.sa.rio, porque está más que claro que vivimos en un mundo de abundancia a manos llenas.

Por supuesto que tampoco soy un caso de extrema pobreza, esos, no cuentan siquiera con la capacitación imprescindible como para no llegar a extremos demasiado peligrosos y realmente mueren de un momento al otro por estupideces injustificables en el siglo XXI, desde un caso de mala praxis médica escandalosamente obvia, pasando por tiroteos en los que los socios de la gorra que los dirigen los bajan si peligran sus puestos, hasta HAMBRE, así de ridículo, MUEREN PERSONAS DE HAMBRE, muerte lenta, dolorosa e INDIGNA si las hay.

Y se llega a un punto en que se puede ver a la muerte casi como un manto de piedad al lado de lo profundamente agónico que es pensar que lo peor, lo verdaderamente más trágico, es el haber vivido los años que fueren sin conocer un solo minuto la inexplicable felicidad de estar simple-mente vivo.

Es extremadamente difícil tener un momento de esos cuando tu realidad y tu entorno te apremia por todos los costados y sobrevivir depende de mantenerse en guardia y salir a mostrar los dientes, e incluso morder la yugular del prójmo si es necesario, por un pedazo de comida, por un maldito pedazo de comida, que ni siquiera cubre las mínimas dignidades de salubridad, no creo que sea una novedad el hecho de que en barrios humildes se venda comida en mal estado o al límite exacto de estarlo y que, además y por si fuera poco, la diferencia de precio no te cubre siquiera una factura de gas como para cocinarla lo suficiente para que no termine por intoxicar a quien la consume, después de todo es mucho más tolerable el dolor de estómago por intoxicación que el que produce el hambre y al menos tiene calmantes que lo puedan paliar.

Se desgarran las vestiduras tratando de entender porque los negritos de mierda se drogan hasta volarse la tapa de los sesos con cualquier cosa y hasta son capaces de matar por un dosis más o viven borrachos hasta perder el sentido.

Y no me cabe duda alguna de que si a esa gente pobre de la que hablo se les pudiera poner en el sitio de los otros como por arte de magia, probablemente no pase demasiado tiempo para que se transformen en lo mismo y les importe un pijo si sus excesos les cuesta lo que alguna vez les ha costado a ellos a otras personas, pero sé perfectamente que al menos entre ellos es mucho más posible encontrar sinceridad.

Cuando están borrachos o drogados y estás dispuesto a verlos o escucharlos te abren el alma de par en par, no guardan las miserias abajo de la alfombra, no tienen alfombra, puedo entender el porqué nadie quiera ni verlos, ni escucharlos, es desgarrador, no se puede volver a ser el mismo, yo no puedo.

Después para soportarlo me miento a mi misma, como todos los demás, me digo que soy mucho mejor porque estoy con ellos de igual a igual, sin embargo yo puedo salir de las situaciones de riesgo cuando me tocan, incluso puedo enojarme conmigo misma hasta que la rabia me explota por las venas cuando sabiendo salir de los apremios no lo hago definitivamente y me cago en todo y todos para vivir rodeada de lujos y excesos, no me olvido de cada una de las veces que dejé pasar las bandejas en los que me lo daban servido, pero también me atrevo a no tener nada, también soy más fuerte que los ricachones a los que les provoca diarrea la sola idea de perder dinero y status y eso me convierte en una hipócrita más, la misma cagada con distinto olor se diría más claramente.

Cuando te ha tocado en suerte un envase tentador y, cuando hablo de envase hablo de cualquier cosa que se vea aunque la más vulgarmente notoria sea la física, cualquiera está dispuesto a comprarlo, después pretenden seleccionar del contenido lo que les place y tirar el resto a algún rincón dónde nadie pueda verlo sin notar que ese lugar está dentro tuyo, justo dónde estaba y lo que no puede salir se pudre.

Llega un punto en el que lo único que tenés para dar es mierda, todo lo demás ya se lo fueron llevando el tiempo, la realidad y la ignorancia, antes al menos lo podía decir poéticamente ¿En qué momento nos convertimos en lo que no somos?.



Ideas

"El silencio es salud"
Así dicen las abuelas,
que mentira más certera,
hoy parece una virtud
callar algunas ideas.
Y por más triste que fuera,
para estos tiempos que corren,
la ignorancia es la mordaza
y el hambre la moneda.
Pues para los que de más comen
el pensar los amezana,
de que el pobre un día acceda.
La consigna es ignorar,
o quizás aparentar,
si hay ceso que no se note,
que si te saben de un dote,
tratarán de succionar
desgarrando hasta el cogote.
Cuanto poco les conviene
más cuanto mucho escasea,
que en la cumbre del poder
para este mundo que viene,
el concepto no es idea
y la idea no es hacer.

Como habrán podido observar, a mi las navidades me ponen de un humor espléndido, así que villancicos, villancicos os dejo y ¡Alé!, ¡Alé!, ¡Alé!, que el borriquito llega a belén y de lejos ya se oyen los festejos.


Happy Xmas (War Is Over) - John Lennon

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