Ahí, en Zona Austral - Para el Concurso Literario EPIC!
Valky Vala
Aquí estoy todavía, en pie de guerra, aunque la vista se nuble a verde y deba dar un paso más para entrar en batalla.
Las órdenes de avanzar si los caídos no se levantan por sí mismos, la orden de cuantos disparos, de cuantos golpes y tan sólo puedo leer los labios de mi comandante.
¡No hay división de infantería! Y las divisiones mayores no nos podemos transformar en menos, en este juego de matar o morir, tan sólo se va hacia arriba y adelante.
Lo triste es que mientras muere un soldado en batalla, hay un partido de fútbol celebrándose en el Estadio Nacional.
Lo triste es que mientras muere un compatriota, un nacido en tu misma tierra, un hijo parido por tu misma madre, se celebran las fechas patrias, cuando nadie durante doscientos años ha explicado qué es la patria.
Tengo la sutil esperanza mientras me desangro en Zona Austral, que aquellos barcos que veo venir no vienen a cargar combustible para atacar a un país hermano, tengo la sutil esperanza que mi sangre derramada en este juego de cuervos sea recordada, y que las muertes no sean en vano.
Que los asesinos sean juzgados, que no tapen la historia en La Casa de la Moneda, que los comunistas se callen y que los de derecha se pongan ciegos, que se introduzcan las ideologías en un papel de confort, porque vale escribir los pensamientos, pero no vale matarse entre hermanos.
Todo eso y más pasa por mi cabeza, mientras el Comandante da la orden de introducir todo el daño en un mismo lugar, la presión puede hacer explotar, el miedo caer, la pena entristecer el alma. Y yo estoy ahí, evitando que compatriotas entren en tierras de hermanos.
Yo no lucho por una ideología, ni por un partido, ni por una alianza, ni por nada más que por la esperanza, que un día cualquiera las cosas no se arreglen a sangre, si no a gritos, porque después de los gritos y de los enojos, viene el amor, el abrazo, el beso, las disculpas y las explicaciones.
Duele la excusa y el motivo.
Duele ese cañón apuntándome, y yo mostrándote que soy de tu tierra, duele que en mis ojos te reconozcas y te tragues las lágrimas, duele porque sé que vas a disparar igual, y festejo tu decisión, como también festejo que algún día me recuerdes en tus ojos que somos iguales aunque pensemos distinto. Tú sangras, yo sangro, yo lloro a rienda suelta y lo hago por los dos.
A voz de Valkirya: http://vocaroo.com/i/s1wgsKaHoqm3
http://s1.vocaroo.com/media/download_temp/Vocaroo_s1wgsKaHoqm3.mp3
El que mejor prefieran.
Comments
Pole!!!!!!!!!!!1
sub pole??? votado!!!
cierro podio?
first time =B
v
que vocesita xD
"que los comunistas se callen y que los de derecha se pongan ciegos, que se introduzcan las ideologías en un papel de confort, porque vale escribir los pensamientos, pero no vale matarse entre hermanos". +1
Relato recibido para el concurso literario EPIC!
Será evaluado con el resto una vez completado el plazo.
Saludos
Un articulo mas que interesante. (Puntuación pendiente tras la total presentación de cada interesado).
saluds.
Plas plas plas , a tus pies.
Ganes el concurso o no, me ha encantado 🙂
batasha....xd votado.
Muy bueno, votado!!!
Saludos
v
v
Los militares buscan justicia militar
Temen que hombre en su naturaleza hable
La sola voz es el arma más letal
Podrán seguir pidiendo perdón
Hasta que pasen cincuenta años y las cosas
Empiecen a saberse que alguna vez no tuvimos bandera
Y la verdad escurra de a poco
Porque ya no hay nada que temer
y para qué el perdón?
Para consuelo de los viejos antes del último respiro
Antes de que la vida se caiga de sopetón,
Y que la frivolidad de una guerra que siempre fue ajena
Nos quitó el sueño por capricho de utopías
Sueños, a nuestros propios sueños
El desvelo de nuestras vidas
Ningún militar va a pedir perdón, ni en Argentina lo hizo Videla en su juicio, ni en Chile.
Lo que se debería hacer es sentarse,
sentarse de un lado la derecha
del otro lado la izquierda
mirarse a los ojos
mirarse y darse cuenta
que son la misma cosa
la misma mierda
la misma belleza
del mismo palo.
Tu tienes huesos
Tu tienes sangre
Tu debes comer
Yo también
Ti te cagas
Yo también
Y así, así somos.
Cuando un mismo país se re-encuentra con los suyos, ocurren los milagros, el milagro de la Patria, el amor y la esperanza, la unión.
¿De qué me sirve discriminar?
Me da lo mismo comer un pastel de choclo en Las Condes que en el Maule, que en Cerrillos o en Antofagasta, es la misma comida, son las mismas personas, yo te toco y sos humano, te beso y el beso sabe a palta.
Amo esta pareja! lejos la mejor de eR.
Felicitaciones por encontrarse.
[removed]
Genial Valky! me encantó tu relato.
Amo a la gente como tú que tiene esa capacidad de abstracción que los lleva fácilmente a la libertad de la poesía. Yo por otra parte, soy dolorosamente pragmática y me da impotencia leerte, pero no envidia, sino admiración.
Votado!
Te cuento que en el recitado se escucha como me trago una lágrima en serio, hay que situarse en el tema y escribir como uno lo siente.
Gracias Guacolda 😘
votado, que lendo :')