Join the new world

Santos retruécanos, mi querido drugo.

Le juro por la osteoporosis de marianocancer (que en paz descanse) que justo en este mismo lugar, en este texto que ahora lee con deleite sin par, este conjunto de caracteres que logra que un escalofrío casi-casi indecente recorra su rabadilla… justo aquí había un mamotreto de texto serio sobre pamplinas de sentimiento de culpabilidad Y A LA VEZ de reafirmación.

¿LO VE? ¿LO SIENTE? ¿NO LO NOTA? Es el olor a momiez, a buenrrollismo, a tipo majo que te escucha, te tolera y te rie las gracias, a ese afable joven de la guitarra que canta cumbayá y ayuda a cruzar a las viejecitas por los pasos de peatones.

Créame, mi querido drugo, y esto es un exhorto, no un mero recurso estilístico, que andar un mes completo al servicio público te hace sentir como un idem.

Y le dejo una pausa para asociar el concepto idem con servicio público y la polisemia implícita.


Bof, que bien sienta soltar cuatro palabras de uso poco habitual y aludiendo por lo bajini al empane mental del lector. Treinta largos días sin hacerlo. Brbrbrbrbrbr. ¿Ein? No, no, claro que a usted no, mi querido drugo y/o debovtchka. Me refiero al otro drugo. Si, si. Ese que dice. Si, ese mismo puede ser, ese que le cae tan mal. Claro que si, era a ese, JAJAJAJA, por supuesto.

¿Cómo iba a referirme en términos despectivos a mi lector activo, en este caso, usted? Sería del género bobo. Claro. Me refiero al que me lee en otro lado. Eso es. Venga, recupere esa risilla autocomplaciente. Ge-nial. Si quiere, le mentamos a los muertos al tipo ese del que nos estábamos riendo los dos. Usted y yo. Claro. Si somos compinches de toda la vida, confíe en mi. Avanti. Carcajéese a gusto.

Como si estuviera en su casa.

¿Ha terminado ya con la crisis de identidad y de autoestima? Bien, le necesito al 100% para seguir con esto. No, no se preocupe. Ya estoy acostumbrado a apañarme con lo que hay, no con lo que necesito. Pero ponga cara de concentración, que eso luce mucho.

Es más, si cada dos frases, o una subordinada, levanta la mirada y la dirige hacia una esquina, entrecerrando los ojos y musitando “Rosebud”, haría una inmensa labor social. Cada vez que alguien hace eso, dono 3 golds a una asociación que cuida multicuentas baneadas injustamente porque no sabían que existe el Tor. Hazlo por ellas, porque ellas no podrán hacerlo por su referer.

Que desgracia. En serio. Siéntase desgraciado. Vamos, hágalo. Sienta como una bola de miseria le recorre todas las entrañas. Sienta el dolor.

Yo que se, frótese una cebolla por los ojos o algo. Pero no me reviente la atmósfera. Se me ha malacostumbrado a verme como un tipo simpático, majo y comprensivo, lo veo en su mirada llorosa.

Oh, dios, le dije cebolla, no papel de lija. Vaya al médico a que le recoloquen la retina. Que asco, joder. ¿Con esa cara mira a su eFamilia? No me extraña tanta soltería.

Si, si, vaya, que yo le espero.

…

Y una mierda voy a esperarle. Tal como andan los hospitales de hoy en día, pasarán años antes de que le cosan la retina. Cosa normal. Creo que las retinas no se cosen. Tampoco sé si se fabrican ya hospitales. Creo que no. Nunca tuve un hospital. Eso marcó mi infancia. Apenas llegué al eMundo, supe que quería un hospital. Pero nunca lo tuve. Si tuve un partido político.

Bueno, no lo tuve. Un señor muy simpático me invitó a panes y me prometió cuidarme. Entonces gané las elecciones internas a presidente de partido y el señor amable bloqueó la sede, resucitó a los muertos y esas cosas que se hacen para que la juventud no toque tribuna.

Era un buen padre, simpático, atento y amable. Me enseñó tantas cosas…

Le odio.

Eso me lleva al siguiente punto del orden del día: El amor.

Falta amor en este eMundo. Pero amor del sodomita. Gente melosa y eso hay suficiente. Lo que hay demasiado es sodomía sin amor. Y eso no es bonito. El oficio de uno debe ser uno que se haga con gusto y amor. No se puede ir a la guerra en plan odiando a todo el mundo, así con los ojos inyectados en sangre y queriendo hacer daño.

Eso no son formas. No para la gente civilizada. La gente educada sabe que hay que desempeñar tu oficio con amor. Matar cariñosamente. Que disfrute el opositor a cadáver, vamos. Arrancarle las uñas con cariño y delicadeza, para que el torturado sepa que en el fondo, hay feeling. Buen rollete, coño.

Eso se ha perdido. Esta juventud de hoy en día no sabe lo que es eso. Que te revienten las costillas de una patada, y tu te levantes riendo (rasgándote los pulmones con las costillas rotas) porque sabías que la patada era en plan colegas.

Ahora todo son puñaladas a lo serio. Que hasta te llevan la cuenta de los golpes recibidos, oyes. Casi ná.

Si hasta se piensa que si uno te arrea un estacazo en la cabeza dejándote sin media masa encefálica, es porque es tu enemigo p’asiemprejamás. No me jodas, hombre. Panda de rencorosos de mierda.

Así no, gente, asi no.


Bueno, toca retirarme ya. Al final no sé ni que carajos he escrito. Ya me hace usted un resumen, cuando se cosa la retina, si eso. Fijo que lo leo.

¿Eh? Mucho cotilleo es ese. Tengo mi rincón, como todos. Un sitio con un paisaje bien chulo, en el que se pueden pasar horas simplemente dejándose llevar. Y por supuesto que no voy a decirte dónde es. Pero vamos, como todos los rincones especiales, en realidad no pertenece a nadie, aunque cada uno que lo descubre lo considera suyo.

Lo cual me convierte en una especie de ladrón que fisgonea en los santuarios ajenos. Pero es que yo nunca dije que fuese bueno.

Esto me lleva al mensaje inicial. Al que borre, carajo. Se le ha desprendido la retina, no el cerebro, mi apreciado drugo. Debovtchka. ¿Perro? Debería cuidar su figura. O al menos peinarse.

Tanto da. Gente del MCI, se que me comporté como un retra, pero son mis reglas de retra, y aun así me siento mal por lo que hice, aunque no reniego de ello, lo cual es tremendamente retra. Si tuviera la más minima esperanza de que entendiérais mis reglas de retra, os las hubiera explicado. Pero eso os convertiría en retras por enfagotizamiento y/o regla de Asperger.

Es decir, si pero no, y al próximo que se le ocurra hacerme algo bonito que sepa que le voy a mandar a tomar por el culo.

Y por esto, queridos niños, es por lo que no es sano estar un mes entero de servidor público. Aunque sea de chorraditas de colores.

Jo. Que bien sienta escribir sin intentar que sea un texto agradable. Me lo voy a votar y todo. FIESHTA.