Operación Krüger o El Gobierno Idiota

Day 1,690, 16:54 Published in Argentina Argentina by PP1976
El arte de la guerra se basa en el engaño. Por lo tanto, cuando es capaz de atacar, ha de aparentar incapacidad; cuando las tropas se mueven, aparentar inactividad. Si está cerca del enemigo, ha de hacerle creer que está lejos; si está lejos, aparentar que se está cerca. Poner cebos para atraer al enemigo. Golpear al enemigo cuando está desordenado. Prepararse contra él cuando está seguro en todas partes. Evitarle durante un tiempo cuando es más fuerte. Si tu oponente tiene un temperamento colérico, intenta irritarle. Si es arrogante, trata de fomentar su egoísmo. Si las tropas enemigas se hallan bien preparadas tras una reorganización, intenta desordenarlas. Si están unidas, siembra la disensión entre sus filas. Ataca al enemigo cuando no está preparado, y aparece cuando no te espera. Estas son las claves de la victoria para el estratega. Una victoria rápida es el principal objetivo de la guerra. Si la victoria tarda en llegar, las armas pierden el filo y la moral decae. Si las tropas atacan ciudades, su fuerza se desgasta. Cuando un ejército se implica en una campaña prolongada, los recursos del estado disminuyen rápidamente.El arte de la Guerra Sun Tzu

Corría el año 1942 cuando en las altas esferas del gobierno alemán se discutían las formas de golpear a Gran Bretaña con métodos alternativos, entre los cuales, el económico resultaba un arma de muy especial y de exquisita importancia. Los ingleses siempre han tomado muy en serio y han manejado con especial cuidado su economía, por lo que un certero golpe en esa área sería muy doloroso e irreparable para ellos.

En el Departamento de Sabotaje Alemán, a alguien se le ocurrió la idea de quebrar la economía británica inundando el mercado con una enorme cantidad de papel moneda británico falsificado. Alemania estaba sintiendo los efectos del enorme gasto que significaba la guerra en el Frente del Este y en África, por tanto las divisas fuertes que se obtendrían con la venta de moneda falsa, fortalecería la economía del Reich. Se mataban pues dos pájaros de un solo tiro. Así se dio inicio a la operación Kruger o Bernhard, como también fue conocida durante la guerra. La misma consistía en falsificar la mayor cantidad posible de libras esterlinas para inundar y destruir el mercado inglés.

La economía de guerra es aquella función del estado que tiene por objeto mantener el funcionamiento de las actividades económicas indispensables para un país, procurar el autoabastecimiento, desincentivar el consumo privado, garantizar la producción de alimentos y controlar la economía nacional.

El análisis estratégico de la denominada “guerra económica” es en realidad el resultado de una compleja combinación de varios elementos de carácter político, militar y económico. El objetivo de las operaciones como la Operación Krüger, es dañar la economía del enemigo a través de la inflación.

Ahora bien, a esta altura se preguntarán a que conduce todo esto. Simple. ¿Cómo podría nuestra nación llevar a cabo una guerra económica no convencional contra nuestros enemigos?

Lamentablemente no es sencillo dado que hay varios problemas que sortear.

El primero y principal es que nuestro Gobierno despilfarra y malversa el dinero desde un punto de vista estratégico. La “brillante idea” que han tenido hasta ahora todos los Gobiernos sucesivos es hacer uso de la fuerza bruta, y no de la estrategia para conquistar territorios. Hasta incluso se ha luchado en zonas inútiles sólo con la finalidad de “borrar” al enemigo.

Es obvio para cualquier ser pensante, salvo para quienes conducen el Gobierno, que la eliminación absoluta del enemigo es imposible. De alguna manera u otra siempre éste resurgirá, por lo tanto el objetivo planteado por el Gobierno no solo es absurdo e inútil, sino que es propio de alguien corto de luces que no ha sido dotado de la mínima y básica condición intelectual.


Lamentablemente ya hemos escrito hasta el hartazgo sobre este tema. Por alguna razón desconocida el Congreso Nacional no es capaz de recoger las críticas y es manipulado como un títere representando la obra de un poder ejecutivo que tiene claro lo que quiere: ARS.

http://www.erepublik.com/en/newspaper/eeconomico-argentina-277449/1

Muchos se han visto ofendidos por estas acusaciones. La realidad es que no hay explicaciones ni de parte del gobierno, ni del Congreso. Es cierto que se ha debatido y votado una ley de información de la cual todavía no se conoce destino. La misma es insuficiente desde muchos puntos de vista y el espíritu que el Congreso pretende no alcanza ni para darle vida en los plazos que se propone.

El segundo problema es que no hay un plan estratégico a largo plazo, ni se observa capacidad alguna para maniobrar este tipo de operaciones. El curso de acción que todos los Gobiernos han mantenido hasta el momento es llevar adelante una guerra sin fin contra un país permanentemente al borde del abismo. En su discurso ultra belicista, el Gobierno arenga a la tropa para cebarlos contra un enemigo natural sin justificación racional económica alguna. Para el que no se haya dado cuenta aún, toda guerra persigue una finalidad económica y debe durar lo menos posible. Las guerras extensas son un derroche imperdonable de recursos y en el largo plazo se convierten en algo insostenible.


http://www.erepublik.com/en/article/-iquest-qu-eacute-gana-argentina-en-chile--2071657/1/20

Sin duda, lo más reprochable es la posición que asumen muchos ciudadanos festejando y defendiendo estas políticas absurdas. Olvidan que el verdadero patriotismo consiste en incrementar el poder político, militar y económico del país y no sólo de pintar avatares de celeste y blanco y hacerse el Rambo por la nación.

El tercer problema es la situación económica eArgentina. Se han escrito muy buenos artículos que describen la realidad microeconómica de las empresas en eArgentina. Muchas de ellas no son rentables y realmente la adquisición y puesta en marcha de muchas de ellas es costosa y hasta en muchos casos imposible para los “recién nacidos”. Este problema el gobierno cree solucionarlo con planes asistenciales. Tomen nota, el verdadero objetivo de estos planes es fomentar el clientelismo.

Afortunadamente hay soluciones para estos tres problemas. El primer paso es que el Congreso tome conciencia cabal de su función, el segundo terminar con el afano, el tecero es delinear un plan estratégico económico para debilitar las economías regionales de nuestros enemigos.

Hay formas de hacerlo. Vendrán al caso cuando haya mas apertura en el congreso.

Podemos seguir creídos de lo bien que nos va. Mientras tanto, nuestros enemigos y otros que dicen ser nuestros amigos planifican la manera de destruir nuestro país.

Nadie que tenga dos dedos de frente puede pensar que la paz con Brasil será permanente. En el largo plazo, Brasil tomará nota de nuestras debilidades y hará lo que en este juego se presenta como la única finalidad lógica: Atacar a su enemigo más temible.