Crónica Sobre la Explicación de Todo en eEspaña

Day 1,900, 14:48 Published in Spain Spain by Espaugyl



Desde que me tiré por la ventana para huir de aquella extraña y cansina pareja de fraternales coincestoalistas, algo han mejorado mis sangrantes oídos, pero no mucho, ya que quizás no sea lo más efectivo desinfestarlos con alcohol etílico desde dentro, por ingestión, aunque hay que reconocer que llegó un momento en que, gracias a este método, poco me importaba si seguían doliéndome los sufridos tímpanos, si me pisaban las manos cuando creía caminar erguido o si me tiraban los tejos Admins de la GestapoeRepublik por seguir disfrazado de atractiva y sugerente Sra de la limpieza (léase la Crónica anterior y evíteme hacer el resumen más largo, por favor). Lo cierto es que ahora deambulo sin atreverme a volver a mi casa, ya que sin duda el extraño enano huele-calzoncillos (que eDios lo tenga en su Gloria si sigue oliendo los míos) y su cariñoso hermano cara-choco, con seguridad que aún están allí hablando y autocitándose para hacerme ver que mi nacional-barrismo, en el que he sido clasificados por ellos en su sapiencia, es una forma de pensar contraria al pensamiento correcto que emana de ellos… y ni se habrán dado cuenta de mi huida.

Pues aún disfrazado de Sra de la limpieza, zigzagueante a causa de mi tratamiento auditivo, con mi sugerente uniforme entreabierto, bien escotado, con mis senos hechos con calcetines extrañamente alineados en vertical en vez de en horizontal por sucesivos tocamientos (tengo asumido que el atractivo que emano me disfrace de lo que me disfrace es mucho y no siempre puedo evitar el manoseo de mi falsa anatomía par) me decidí a ir al lugar más solitario del eMundo, al lugar donde nadie me buscaría para hacerme un lavado de cerebro para que pensase de la manera única y acertada, el lugar donde dicen las leyendas que a veces se ve gente trabajando pero que desaparecen en cuanto el olor del café recién hecho surge como ectoplasma de las paredes, el lugar donde muchos entran con inteligencia y vuelven a salir con una pérdida de coeficiente intelectual jamás inferior a 20 o 30 puntos…. fui a esconderme al tenebroso y solitario eCongreso, el lugar donde, según la leyenda, “inteligente entrarás y a saber cómo saldrás”… mi incredulidad puede ser muy peligrosa, como después comprendí.



El edificio del eCongreso, donde la leyenda dice que nunca nadie entra sin salir con 20 o 30 puntos menos de coeficiente intelectual… un misterio que creía leyenda pero no era tal


Pero antes de llegar, por el camino, vi cosas que no entendí. Había quioscos con ciclópeos montones de prensa que apenas si dejaban un estrecho pasillo en la calle para pasar. Me detuve en varios y vi pintadas en las paredes de los edificios sobre el tema que poca luz me daba sobre el asunto, porque al parecer todo iba de protestar a favor de la prensa … pero no sé, debía ser el alcohol, pero mis etílicas neuronas por poco me piden bajarse en marcha al serle imposibles computar cómo se puede luchar por los periodistas enterrando bajo un montón sin sentido de periódicos-protesta a esos mismos periodistas y no dejando que puedan ser estos leídos.

Todo por la Prensa pero sin la Prensa. Fdo: El Choco Justiciero y 4 más, leía en las paredes junto con ocurrentes frases, de mucho ingenio si se tiene cuatro años o menos, dedicadas a cierto filósofo y que sólo podía leerse desde el aire, según decían, gracias a los montones de periódicos que formaban letras del tamaño de edificios. En fin, lo de siempre, más de los coincestoalistas y su forma de pensamiento único y correcto, que si no hay charcos donde meterse lo inventan aunque fastidien a otros periodistas, que últimamente estaban en todas partes creando polémica y mi estado etílico era lo único que me hacía filosofar sobre estas cosas, porque sobrio soy hasta normal… o tan normal como puedo ser en plena resaca.



Parte de la cordillera de periódicos que cinco “listos” habían creado en las calles. Creo que mi Crónica está publicada en el periódico que apenas si asoma abajo a la derecha, el que se está poniendo azul por falta de oxígeno


Lo increíble es que tardase casi una semana en recorrer los pocos pasos que hay desde El Bar hasta el eCongreso. Por un lado, previsor como soy, como aún llevaba el cubo y la fregona del disfraz, hice muchas paradas y siestas, ya que el cubo contenía todavía tres cuartas partes de la mezcla de cerveza y diversas bebidas escurridas de los vasos de la barra, junto con alguna colilla de las que caen espontáneamente y que le dan cierto sabor picante al alcohol y al que tanto me he aficionado a fuerza de repetir el mejunje. Por otra parte, las dificultades para avanzar eran peores que ir en contra de un coincestoalista, porque cuando no era una montaña de periódicos protestas era alguien que amontonaba su producción de pan en la calle sin saber cómo venderla por los precios a la baja. Llegué a ver incluso quienes usaban el pan como material de construcción y se hacían bonitas ampliaciones de su casa al estilo Monasterio del eEscorial, tanto por lo realista de los detalles del pan de molde esculpido como por el tamaño monumental de las viviendas con tanto pan sin salida usado como ladrillo.

Cuando apenas faltaban unos metros para la escalera del eCongreso una multitud vociferante de soldados alegres y victoriosos se cruzó en mi camino. Al parecer venían de la guerra esa que no termino de tener muy claro si es en eChina o no, porque llevo meses escuchando que ese es el objetivo, pero lo cierto es que tras la última victoria traían a un prisionero de alta graduación. Por lo que vi efectivamente estamos invadiendo eChina, digo yo.



General eChino capturado por nuestras tropas. Según dicen aprovechó su estancia en eEspaña para cerrar tratos comerciales y vender sus productos porque, no sé por qué, se compra antes lo de un extranjero que lo de un nacional… es lo bueno de tener grandes economistas al frente del país con grandes políticas impositivas para la importación


Al fin pude traspasar las puertas del eCongreso y lo que encontré me heló la sangre. Los sacos de café obstruían los pasillos, los montones de leyes inútiles imposibilitaban el paso a alas enteras del edificio y las telarañas tejían espesas capas sobre los ordenadores y mesas de trabajo. En parte aquello me recordó a mi casa, para qué negarlo, pero el que no hubiese botellas vacías por el suelo ni gritos de acreedores recordando a mis ascendentes difuntos me hizo despertar de esa ensoñación.


-Me extrraña verrlo porr aquí, Herr Espau-Gyl- dijo una voz demasiado conocida a mis espaldas al tiempo que noté el cañón de una Q1 en mis riñones.

-Se equivoca, guapo caballero teutónico- contesté con mi voz más aflautada copiando al enano huele-calzoncillos- soy del servicio de limpieza y he sido contratada para tirar a la basura los montones de leyes estúpidas, que sólo sirven para coger polvo, con perdón, y tirar todos los borradores de la eConstitución y de eTribunales de eJusticia de tanto ingenuo.

-No me engañarrá con su bonita voz, Herr Espau-Gyl- me contestó con cierto babeo lascivo Herr Hans- siga porr ese pasillo y suba porr la escalerra de mano hasta la buharrdilla.


Mientras subía por la escalera de mano hacia la oscura buhardilla me temía lo peor, principalmente porque no recordaba si los agujeros de mis calzoncillos llegaban o sobrepasaban la media docena y Herr Hans, el desviado Admins de la GestapoeRepublik, venía tras de mí salivando mientras miraba hipnotizado hacia arriba… juro por eDios que nunca volveré a ponerme un disfraz tan sexy que muestre mis torneadas, velludas e irresistibles piernas y lo de en medio.

-Bienvenido a mi laborratorrio, Herr Espau-gyl- me dijo recomponiéndose de la emoción de la subida y de las vistas.

-Lo que usted diga- contesté sin querer poner nervioso a tan peligroso y antinatural chocopunteador, porque aquello para mí era tan sólo una buhardilla a medio camino entre el síndrome de Diógenes, síndrome de acaparador compulsivo y mi casa, aunque con menos botellas, que es seña de identidad.



El laboratorio de Herr Hans… para mí que era una buhardilla, pero yo no sería el que se lo iba a discutir mientras me apuntaba con una Q1


-Bueno, no es prrecisamente el mejorr laborratorrio del eMundo perro es mi laborratorrio y está en el mejorr sitio- comenzó a explicar como todos los villanos dementes hacen mientras atan a sus presas a una silla, pero lo que me preocupaba era que yo veía el bulto de la Q1 en su bolsillo y juraría que se la había dejado sobre la mesa.- Hace tiempo que me oculto aquí y experrimento nuevas arrmas salidas de la brrillante mente del Admindfuhrer de la GestapoeRepublik Halesius- prosiguió mientras daba un sonoro taconazo al mencionar a tan nefasto individuo.- ¿No se ha prreguntado qué es lo que pasa en eEspaña desde hace meses? ¿No se ha prreguntado porr qué tanta estupidez y tan mal ambiente? ¿No se ha prreguntado porr qué hay siemprre un mismo grrupo que no parra de…? ¿cómo dicen ustedes? ¿donarr parra el ano? ¿regalarr porr el rrecto?

-Dar por culo- respondí resignado.

-Efectivamente, Herr Espau-gyl. ¡Qué grran rriqueza del lenguaje tienen ustedes y no saben aprreciarrlo! En mi idioma, parra expresar lo mismo, debemos decirr quince frrases, atrragantándonos dos veces porr falta de vocales, hacerr trres dibujos y desnudarr a un adulto prrisionero de buenas posaderras… bueno, eso es optativo pero nunca me rresisto… perro no me confunda. Le decía que si no ha pensado que es mucha casualidad que siemprre sean los mismos los que atacan parrtidos, defienden la prrensa yendo contrra ella, orrganizan concurrsos parra insultarr a locutorras radiofónicas y consiguen aprobarr leyes para suprrimirr nombrres de una supuesta Vida Rreal que no tienen y que son incapaces de hacerr cumplirr… ¡Se crreen Admins!- exclamó mientras le daba un ataque de tos o reía, que fue algo que ni quise preguntar lo que era pero que me ponía los vellos de punta.

-Sí, por supuesto, llevo meses preguntándome esas cosas- mentí para no decepcionarlo mientras intentaba conseguir la atención de una rata de buen tamaño, aunque ridícula comparada con las que crío salvajes comiendo restos en mi cocina, mediante el truco de frotar mis manos atadas y hacer caer una buena cantidad de mugre negruzca como mini albóndigas de ébano, de gran poder alimenticio, ya que siempre tengo presente estos casos y no me lavo las manos ni tengo contacto con agua alguna, salvo lluvia repentina imprevista.

-Pues todo ha sido grracias a mí y a mi invento. Grracias a la Pistola de Rrayos I.D.I.O.T.A. (Inductora De Intransigencia Ocasionando Total Asociabilidad). Esta pistola generra un rayo que, disparrado dirrecto a la cabeza, orrigina perrturbaciones cerrebrrales conducentes a la asociabilidad, consiguiendo crearr la cizaña más absoluta a su alrrededor. Como efectos secundarrios hay quien disminuye de alturra y se le rreconcentrra la “mala leche”, como dicen ustedes, a otrros les da una verrborrea con autocitaciones en bucle y en generral hace que el coeficiente intelectual de los sujetos del experrimento baje una media de 30 puntos y se vuelvan tan cansinos como querramos, perro en todos es común el crreerrse poseedorres de la única verrdad y crreerrse que pueden cambiarr el eMundo… algunos hasta se visten como Admins en prrivado. En pocos meses conseguirremos que en eEspaña haya una guerra civil en cada barrio, los bandos crrecerrán y se dividirrán…



La Pistola de Rayos I.D.I.O.T.A (Inductora De Intransigencia Ocasionando Total Asociabilidad), el último invento de la GestapoeRepublik para destruir eEspaña


No quise seguir escuchando porque tenía que concentrarme en mi plan de fuga. Las ratas ya habían acudido a la grasienta y negruzca comida que le proporcionaba frotando mis manos y en cuanto tuve a un buen grupo comencé a manosear las cuerdas para que la fragancia rancia de mi grasa corporal las hiciese roer la cuerda como el manjar en que lo había convertido. Cuando estaba libre, aún Herr Hans paseaba emocionado contándome sus planes.

-Lo siguiente serrá un parr de disparros más a ese carra de choco. El otrro día conseguí que prresentase una ley absurrda para dividirr más a los eEspañoles y fue aprrobada (media docena de rrayos más me costó) y ahorra intentarré que prroponga una ley parra rregularr la lluvia y el colorr del cielo. Perro antes verremos que efectos causa en un Corresponsal de Guerra- dijo girándome hacia mí y apuntándome con la Pistola de Rayos I.D.I.O.T.A.

Afortunadamente el rayo apenas si me rozó la sien, Herr Hans no se esperaba que estuviese desatado. Me protegí tras montones de leyes inútiles arrinconadas al tiempo que le tiraba todo cachivache que tenía cerca, y así conseguí llegar hasta la trampilla, por la que me tiré y corrí sobre sacos de café y eCongresistas dormidos en los pasillos hasta la puerta para buscar un mejor escondite y terminar de escribir esta Crónica antes de que los Rayos I.D.I.O.T.A. me conviertan en un títere coincestoalista de los Admins, que es el auténtico enemigo y siempre lo será.


Desde el cuarto de baño de El Bar, sentado en el váter mientras intento leer la etiqueta de un botellín de cerveza, que no sé si es por el rayo o porque me he bebido 24 pero no consigo leerla, se despide este Corresponsal de Guerra rezando para que los efectos del rayo no sean permanentes y haya gente que comience a dejar de “dar por culo”, tal como decía Herr Hans.


Espaugyl