Cambiemos las reglas del juego...

Day 2,371, 11:39 Published in Spain Spain by pabs11

Llegaba el décimo aniversario de la llegada de la Diosa. Poco antes, otra eséncia había llegado al continente y había intentado ocupar el lugar de la Diosa... Edrielle había conseguido expulsarlo, pero esa eséncia consiguió arrancar un corazón...

Con el mismo rito que Helada, se forjó una identidad a base de acero fundido, y se llamó Incandescente...

Calentó la fria montaña y creo un volcán que sería escenario de futuras batallas, promulgando así una maldición que perduraria hasta el fin de los tiempos...


Pero volvamos al día del aniversario. La Diosa preparaba con esmero el hielo que usaría en la celebración cuando notó que un alma moría... Pasaba todos los días.

Pero esta vez era diferente... Esta vez el alma que se estaba despidiendo tenía una luz poderosa...

Edrielle quería despedirse... Pero esta vez no quería usar un cuerpo humano, con su esencia tenía suficiente...

Silenciosamente, durmió a los chamanes que la cuidaban y se dió a conocer...

Un largo cabello rubio, ojos azules que duele mirarlos, una piel blanca como la leche... Alta, muy alta... Pero lo que mas impresiona de la Diosa es una aura brillante que alumbra toda la estancia y un rastro de escarcha allá por donde pisa...

-Edrielle, despierta.

Edrielle se incorpora del lecho, y mira fíjamente a los ojos de la Diosa..

-Sabes que no eres una persona normal, y tambien sabes que podría quitarte esa enfermedad... Pero no lo haré. Es la hora de las nuevas generaciones... Se acerca una guerra. Incandescente cada vez es más fuerte, pero podemos aguantarle si consigo cambiar las reglas…

- Así se hará mi Diosa… He cumplido mi misión… Cuando te vayas, te seguiré hasta el lugar que me hayas reservado… - Dice Edrielle con pesadez, cansada de vivir…


En un tiempo indeterminado, en una dimensión indeterminada…

Un salón se crea de la nada… La Diosa entra por el recién formado portón… Cada paso que da, se crea una hilera de piedras que forman el suelo… De repente, deja de caminar para que se termine de formar la mesa principal, y la chimenea… Una chimenea humeante que con la mirada azul de la Diosa se apaga, dejando el salón a oscuras durante unos instantes en que la Diosa genera dos estrellas que se pegan en el techo, y que iluminan toda la estancia...

Una llama entra por la puerta… Se extingue y en su lugar aparece Incandescente… Vestido de negro completamente, es tan alto como la Diosa, pero su aura es diferente… No es “maléfica”, pero no transmite la misma tranquilidad que la de la Diosa…

— No vuelvas a molestar a mis humanos… — Dice la Diosa en tono amenazador…

— ¿Y qué pasará si lo hago? He inventado la magia para mis súbditos, y pronto serán los dueños de todo el continente… No tienes nada que hacer…

— ¿Cómo que no? Si pienso algo, se crea en esta sala… COmo por ejemplo… Esta estalagmita. — Dice mientras señala una enorme estalagmita que aparece en medio de la sala…

— ¿Qué pretendes? — Se asusta Incandescente, sabedor de que algo raro está pensando la Diosa…

— Es una sorpresa… — Susurra la Diosa mientras cruza el portón de vuelta al continente… Tiene mucho que preparar…


En el Continente de nuevo…

Un gigante aparece en el medio del bosque… Al principio, sus dos metros y medio le impedían moverse, pero poco a poco se acostumbra a su tamaño… Vestido con ropas de lana, en la mano derehca tiene un bastón de entre treinta y cuarenta centímetros de madera, con inscripciones a su alrededor…

El gigante lo agita hacia un árbol, y este se congela de inmediato… Gira ciento ochenta grados y agita el tótem de otra manera haciendo que el árbol crezca de una manera sobrenatural…

Es un shakta...

Y ha venido para quedarse!


Cambiemos las reglas del juego...

Nuevo episodio de la Diosa Nevera!

http://www.erepublik.com/en/article/2400865/1/20

SHOUT!