"Hogar de los Huerfanitos" nº1 Una diáspora unida.

Day 2,515, 08:36 Published in Spain Spain by Xiosif

Recuerdo cuando era joven, cuando era niño hace ya varios lustros, la extraña sensación que me inundaba cuando volvía a casa de un largo viaje. Todo parecía que se mantenía en su lugar, pero al mismo tiempo sentía una cierta extrañeza hacia lo mío, hacia mi casa/calle/barrio/ciudad/provincia/país. Sabía que a pesar del mes que me había pasado lejos, ya fuera acompañando a mis padres en labores diplomáticas en algún país aliado o enviado a algún campamento militar para volverme un super soldado, nada había cambiado en mi entorno pero esa perplejidad me inundaba y era incapaz de comprenderla. No sabía que la relatividad del tiempo se alarga o encoge también con el paso de los años de nuestras vidas, que quizás eran mis ojos los que con solo unas semanas ya se habían transformado adquiriendo una nueva visión.

Pasó el tiempo. Poco a poco y aunque los viajes fueran más largos que antaño, perdí esa sensación de extrañeza que me embriagaba al sentirme extranjero en mi propio hogar, que me despojaba de algo que sabía que era mío, que era mío y es mío, aunque solo sean reminiscencias del pasado que reverberan en la memoria de un ser melancólico.

Ya me había acostumbrado a volver a España sin experimentar la sensación del cambio inexistente. Tras una larga estancia en el extraradio de eRepublik, ese pasatiempo al que de vez en cuando dedico algo de tiempo llamado por algunos vida real en el que juego con un personaje ficticio para mi regocijo y tortura de los que lo rodean, decidí que era momento de volver al reencuentro de mi país. Y volví yo y conmigo, la extrañeza.



La retardation se extendía sin frenos por una sociedad que había marcado como siguiente parada en el rumbo de su existencia un precipicio. Todo aquello que hizo grande un día mi país, nuestro país, se había perdido. No me interesa lo más mínimo el poder militar, algo que tuvimos en el pasado pero que no era lo que nos caracterizaba ni nuestra idiosincrasia. Los partidos patéticos carecían de toda identidad y solo eran nichos de poder en los que atraer nuevos a través de bots para aumentar la cota de mercado lolgresil de los dueños del cortijo; el módulo periodístico había conseguido eliminar a los troll a base de sistemáticos ataques de flanderismo ilustrado; la gente ya no tenía fe en Varnish (la única y verdadera deidad), pero eran incapaces de adherirse a otras creencias; los gobiernos culpaban a la sociedad de que no funcionaban por la falta de cooperación ciudadana siendo incapaces de aceptar que sus programas no eran más que meros panfletos mojados copypasteados desde tiempos inmemorables prometiendo cosas que ellos mismos sabían que no iban a conseguir; y el rolleo, amigos, el rolleo había muerto.

En esta tesitura de pandemia retard en la que cualquier nueva propuesta era lapidada, en la que las viejas estructuras sociales estaban demasiado bien enraizadas sobre el suelo de nuestro país contaminando todo nuevo fruto, no quedaban muchas opciones: caer enfermo de esa ola imparable que había infestado ya toda España para morir indignamente, o agarrarse a una nimia esperanza y vivir en el exilio.


El éxodo masivo de los españoles que temen por su integridad en su país.

Es muy duro tener que abandonar tu país por la persecución a la que podía uno verse sometido por sus propios compatriotas, tener que luchar desde un lugar en el que posiblemente siempre serás considerado extranjero. Por suerte existe una nación en nuestro planeta que nos acepta con buen gusto, que comprende la dura situación que corroe nuestro país. La hermandad que nos une a ellos es inconmensurable, incluso Varnish la aprueba, a pesar de la dificultad de adaptarse a su cultura y a su lenguaje basado en el alfabeto mordorniano. Ese país, como no, es Pollonia.


Huerfanitos exiliados por la retardation llegando a su nuevo hogar en Pollonia, recibidos por Kapiradom.

Cuanto mayor y más dividida está la diáspora española por el mundo, menor es nuestra capacidad para tratar de solventar los problemas de nuestro país desde el extranjero. Para evitar que este proceso se acreciente llevando a la disolución total de la oposición emigrante, un grupo de jugadores ha creído conveniente crear el “Hogar de los Huerfanitos”. En este hogar podrás encontrar soldados que provienen de distintas milicias y con distintas perspectivas sobre cómo afrontar las decisiones políticas, pero todos unidos por una misma causa, el exilio de España. Nuestro objetivo es el de aunar las fuerzas de los jugadores que han tenido que escapar a la persecución en su país, haciendo mas amena su estancia en el extranjero y sin perder así los lazos con nuestra cultura. Además animamos a otro jugadores que se encuentran en otras naciones a que se animen a juntarse a nosotros haciendo de nuestro mayor aliado todavía un mejor país si cabe. Cualquiera que necesite ayuda con la Cs pollaca solo tiene que enviar un mp al presidente del partido, y el se pondrá en contacto con él para facilitar su huída.


Davecoli, Cachimbero y Javisendo disfrutando de un tentempié en el Hogar de los Huerfanitos.

Vemos fundamental crear un base de datos en la que se muestre la opinión de los jugadores que se han visto exiliados de nuestra patria, para así conocer mejor cual es el enemigo común y poder mantener el contacto entre todos, sin sentir la soledad del que marchó lejos de su hogar. Ponemos a vuestra disposición el siguiente formulario que esperamos cumpla con todas vuestras necesidades para expresar libremente los motivos y razones que os mantienen en el exilio.
FORMULARIO

El equipo de intendencia del Hogar ha trabajado muy duro para conseguir meter este artículo en la prensa española, saltando las diversas censuras que cohartan la libertad de expresión en nuestro país. Pero veíamos necesario que este manifiesto llegase al mayor número de jugadores españoles que viven escondidos y atemorizados. Es necesario que sepáis que no estáis solos, que se puede salir de vuestra situación y que desde el extranjero seguimos luchando para conseguir volver a situar a nuestro país donde le corresponde.

No eres el único exiliado.
No estás solo ahí fuera.
El “Hogar de los Huerfanitos”, por una diáspora unida y activa.




El “Hogar de los Huerfanitos” se solidariza con la causa a favor de la creación de periódico para manpaspal.