SPK cazadora de BH

Day 2,362, 16:00 Published in Argentina Argentina by Psyko Killer

Resulta difícil explicar la cantidad de horas que pierdo todos los días en la tareas más banales. Despertarme, mirarme en el espejo 10 minutos sólo para saber si me salio una arruga, correr una hora para mantener la salud, gimnasio para levantar la cola otra hora más, llegar al centro una hora, buscar estacionamiento y por fin entrar al trabajo, encender la compu, poner a cargar el celular,chequear los mails llevan a que las horas siguan pasando sin aportar nada nuevo a mi vida o la sociedad. A veces pierdo también el tiempo en torpes intentos de aprovechar el tiempo, como comer ensalada, chatear y jugar por internet al mismo tiempo; pero la mala costumbre de insultar en voz altas a los escriben tonterías desde la pantalla termina con la comida surgiendo de mi boca hacia el inexorable destino de mi camisa blanca y la consecuente huida al baño evitar que se manche, perdiendo toda la hora de comida en el fútil intento de recuperar tiempo.

Sin embargo, no habría historia que contar sin por lo menos un “sin embargo”, hay algunas horas perdidas que disfruto, yo les digo horas invertidas en mis hobbies y en mi misma.

Siempre recuerdo con un placer especial el dia que volví a casa y no tenía nada que hacer, así que entre a jugar en línea hasta quedar, como siempre, total y absolutamente frustrada; así que me decidí por ir a un bar al que siempre me invitan y que, por suerte, queda muy lejos de casa.
Fui a la peluquería y perdí un par de horas en un nuevo intento de parecer una persona atractiva, a través del excesivo uso de la química, esta vez batallando contra los rulos de mi pelo que cuentan con una inexorable ventaja genética frente al alisado de mis sueños que sólo tiene como aliado a mi sexualmente ambiguo peluquero que, obviamente, no puede defenderse a si mismo y mucho menos a mi peinado.

Pasa así el tiempo y un par de retoques cosméticos me hacen creer que el objetivo está cumplido, así que corro a la tienda de ropa para buscar algo que complemente, ingreso al local de Rapsodia y respiro pausado, el fashion tiene un placer que sólo sienten las mujeres, las combinaciones de ropa no se limitan a un estilo, constituyen un lenguaje visual donde los colores alteran y destacan formas, los pequeños detalles llaman con su brillo a mirar en lugares donde “no esta bien mirar” y los accesorios indican qué tan listas estamos para hacer lo que tengamos de hacer. Sin olvidar los zapatos, divinos zapatos, no te conviene cruzarte con Solange si tiene sus stilettos puestos.

Termino perdiendo un par de horas más en la compra de trapos lindos asi que me voy corriendo a casa y me visto. Me miro al espejo para decidirme y me cambio, luego me vuelvo a cambiar, siempre hay algo que cambiar por eso siempre me miro al espejo antes de salir, para que cada detalle resulte perfecto, la pollera lo suficientemente corta como para dar a entender que estoy dispuesta, pero lo suficientemente larga como para susurrar que voy a resultar muy difícil, los labios rojos (pero naturales) y el pelo recogido hacia la derecha para mostrar un poco la piel del cuellos y poder girar la cabeza cuando llegue el inmenso momento del beso, la camisa entallada en la cintura conspira perfectamente con un no muy sutil collar de ágatas que cae sobre mi pecho justo donde los botones están desprendidos dejando adivinar el secreto que comparto con victoria.

Salgo y camino un par de cuadras, las miradas y los murmullos masculinos me hacen pensar que la orden del día esta cumplida y que puedo llegar a pensar que me veo atractiva, así que extiendo mi brazo para llamar un auto de alquiler al que le pido por costumbre que me lleve hasta la mitad del camino hacia mi destino, nunca voy en taxi directo desde mi casa hacia donde voy, como explicarlo?, es una tradición que mi mamá aprendió en sus tiempos de monto y que a su vez heredó de mi la edad anarquista de mi abuela.

El llegar sin embargo no es la aventura, y el lugar mi destino esa noche resultó ese tipo de bar al que una chica como yo nunca iria, a no ser que la inviten. Y por supuesto que la persona que me invitó estaba dentro esperándome, lo vi desde la vereda, era igual a la foto que me había enviado, con todos los defectos y todas las virtudes que lo tornaban algo atractivo, por lo menos no es un mentiroso -pensé-, estaba obviamente hipnotizado por su S4 así que opté por entrar con el paso que utilizo cuando quiero que todos sepan que estoy entrando y piensen que camino así naturalmente.

Un par de hombres me miraron, otro par se paró y uno tiró una propuesta bastante indecente que parece que no le gusto mucho a una chica extramuros que me gritó bruja tro... sin saber que con eso me ayudaba totalmente a cumplir mi objetivo: porque mi nuevo amigo al escuchar el insulto salió de su trance informático, levantó la mirada, me vio y sonrio: me imagino que Solange -dijo-, sonreí y le dije: viste que me ibas a conocer en cuanto me vieras, en ese momento me di cuenta que mi primera batalla estaba ganada.

Para ser un nerd debo reconocer que mi amigo era bastante simpático, por no decir creído, me habló durante una hora de sí mismo, de sus logros, sueños y esperanzas y de todo lo que podía hacer para ayudarme, para enseñarme a vivir en el mundo virtual donde lo conocí y donde parecía que todos marcaban como Rey. Sin embargo mientra hablaba me di cuenta que su tono tenía lujuria, al darme cuenta de su actitud comprendí que si jugaba bien las cartas y dejaba de perder el tiempo podía cumplir todos mis objetivos de esa noche.

-Porque miras tanto el teléfono?- pregunté, porque realmente me llamó mucho la atención parecía que esperaba una llamada de otros pechos que no eran los míos porque sólo dejaba de acosarme con la mirada para bajar la cabeza y echar un ojo a la pantalla azul..

-Es que la clave es estar siempre en línea, saber donde hay necesidad y aprovecharse.

-No entiendo- le respondí para darle un poco de ventaja, después de todo no quería que el juego se torne aburrido.

Hombres... una chica les tiende la mano y ellos las agarran de la cintura, mi respuesta le sirvio a mi interlocutor para acercarse y literalmente rodearme con su brazo al tiempo que acercaba el teléfono celular hacia mis pechos. Mientras me explicaba empecé a sentir su respiración cada vez más cerca del cuello, su aliento era una mixtura de caramelos de menta y cerveza. -sólo espero que su boca no tenga gusto a hamburguesa- pensé sintiéndome automáticamente culpable, después de todo el pobre pibe no sabia en lo que se estaba metiendo. Sin embargo les aseguro si que tenia ganas de meterse.

-Lo importante es no perder el tiempo- me dijo.

-No perder el tiempo- le dije, levantando la cabeza de tal forma que sus labios casi se encontraron con los míos.

Fue demasiado para él, era incapaz de entender mi estrategia, porque siguió hablando con la sonrisa del que está a punto de ganar. -Sólo te voy a dar un consejo -me dijo seriamente- guarda la gran explosión para el final para cuando todos crean que ya estas sin fuerza, de esa forma les vas a quitar todo por lo que lucharon.

Yo tambien sonrei y aprovechando la posición le hable al oido: -seria mas divertido si salimos de este lugar, hay demasiada gente- susurre y encendiendo algo dentro del que todos llamaban el Rey Cazador, porque simplemente tomó mi mano y me saco de ahi.

Me resisti un poco, pero camine con él hasta un pasaje que se encuentra a sólo unos metros del bar, un poco oscuro para mi gusto pero de utilidad absoluta para mi posible amante que encontró rápidamente una pared donde me apoyarme al tiempo que intentaba lavantarme la pollera.

-Estoy listo- me dijo.

-Listo?- le pregunté con mi nuevo acento pícaro totalmente ensayado para el dia de mi boda.

-Estoy listo para ser el héroe de esta batalla -los que lo recuerdan saben que era un obsesionado- sólo puedes rendirte ya no tienes fuerza para ganarme...

Senti que las piernas me temblaban, realmente estaba a punto de entregarme? Trate de pararme haciendo fuerza con la pierna y sólo provoqué que uno de mis stilettos quedara enganchado de tal forma que casi me hace caer al piso en un movimiento tan torpe que me provocó gracias.

Bruce Lee y mi mama siempre aconsejan tener al menos un pie correctamente sobre el piso para potenciar los golpes. Esto para una bruja como yo que usa zapatos de 17cm de altura es un problema porque provoca un desbalance de altura que resulta muy difícil de compensar por lo que me vi obligada a descalzarme totalmente, con mucho cuidado de no dañar el impoluto taco de acero, al tiempo que me apoyaba en el hombro de mi excitado amigo que se sintió un poco sorprendido por el suceso.

-Esta es una batalla épica- repitió el obsesionado.

-Me ayudas- le sonreí señalando el zapato que estaba totalmente clavado en el piso.

-Sabes que sos una chica muy tierna-me dijo mientras se agachaba, y pensar que me dijeron que eras una psicópata.

-Yo? una psicópata? quien te dijo eso?- dije mientras pensaba: y porque lo mencionas ahora mientras estás arrodillado tratando de rescatar mis Prada que se niegan a desprender de las garras de las vereda.

-Es que me dijeron que en el juego te enojas mucho cuando te roban una BH y como yo soy el mayor ladrón de BHs..., pero creo que soy un obsesionado del juego- murmuró mirando el zapato que realmente estaba atornillado al piso.

Por un segundo me dio mucha ternura, habíamos competido tantas veces por una medalla en las tragicómicas arenas virtuales que bien podría decir que realmente me enseñó muchas cosas y de hecho hasta pensé que realmente habíamos estado tanto tiempo conversando en las salas de irc que podría decir que realmente era mi amigo, hasta que levantó la cabeza y me dijo:

-Pero igual sos demasiado nueva como para entender que te gusta perder el tiempo, por eso yo soy el mejor y vos sólo una amateur-

Me hubiera gustado decirle que ya no era más el mejor, que yo ese dia no habia perdido el tiempo, me había preparado y finalmente había cazado a un BH pero el tiempo de las palabras ya había pasado, el taco del zapato que tenía en la mano ya había atravesado el craneo del ladrón de Bhs dañando su cerebro en forma fatal. La entrenada fuerza que imprimí al golpe me permitió lograr una relativa baja cantidad de sangre salpicada al piso y ninguna gota a mi ropa, por lo que su muerte fue rápida y sin sobresaltos.

Una pareja pasó por la esquina del pasaje y se escucho como reían, así que apoyé a mi BH en la pared, lo miré una última vez y lo dejé sentado en el piso, parecía realmente feliz o por lo menos excitado. Luego libere el zapato de la vereda (nunca estires sólo hay que girarlo un poco y sale solo) y me fui hacia la avenida a buscar un taxi que me llevara hasta la mitad del camino hacia mi casa, muy contenta de haberme divertido durante ese par de horas que invertí en mi hobbie y en mi misma.


No apoyamos a los voters si les gusto voten, si no les gusto critiquen y perdon porque resulto muy largo y sin fotos de chicas sexies