El anonimato

Day 1,932, 21:30 • Published in Colombia Colombia • by Daniel War
EL ANONIMATO

¿Qué es ser anónimo?, parafraseando nuestro arbitrarísimo y volublísimo Diccionario de la Real Academia de la Lengua: es ocultar la autoría, es decir, hacer algo sin que se sepa quién lo hizo.
Históricamente ha habido varios anónimos, unos bastante coyunturales como el primer homínido que descubrió lo filoso y fracturable (por cierto, esta palabra "no existe") que es el sílex, pasando por el autor del Génesis autografiado (probablemente algún sumerio), hasta los que se hackearon (ni que decir de la existencia de ésta otra) el sitio web del FBI el año pasado.

Entrando un poco en los posibles alcances e implicaciones del anonimato, debemos empezar asumiendo que consciente o inconscientemente casi todo el mundo reconoce la operación de un mecanismo de causalidad en las relaciones humanas: causa y efecto, acción y reacción, entrada (input) y salida (output). Para el caso del actuar humano son especialmente relevantes las etiquetas de "premio" y "castigo" en los efectos. Esto puede tener un tufillo de reduccionismo etológico, pero para propósitos de simplificar voy a ser laxo y emplear dicha abstracción. En ausencia del anonimato la gente se ve indefectiblemente obligada a asumir las consecuencias de sus acciones (excepto que se tenga dinero, que en últimas sería una modificación estructural del sistema, pero al final los pobres siempre somos más), sean estas ignominia, anatema, privación de la libertad, muerte e incluso falta de sexo.
¿Qué permite entonces el anonimato?: la facultad (no la obligación) de hacer todas aquellas cosas que previamente no se hicieron por miedo al castigo. Ya se podrán todos imaginar el torrencial frenesí de humanidad que ello significa, no pienso extenderme en eso, no lo creo necesario.

Yo sé, esto no tiene nada que ver con eRepublik. ¿Cómo va a tener que ver esta prosa abstracta con un juego, un juego en internet, un juego de guerra, un juego con naciones, un juego con prensa?. Un juego, que como la vida misma, no es más que un juego. Así pues, en este maravilloso ecosistema virtual podemos encontrar desde el megalómano más categórico, como Dhoo (ignoro si lo haga por cinismo consciente o por delirio místico, ambas igual de válidas), los más comprometidos y altruistas (asumiendo que ese concepto sea posible) como Faramond, Darknex y Covenantcol, e incluso los más instantáneos contrarrevolucionarios, como Francheszzszzszz (él siempre está de acuerdo con lo contrario a la tendencia, no importa qué ni cuándo).

Para finalizar, esto del anonimato hay que gozárselo, y quizá los que no hayan sido tan imbéciles de entrar al juego con la cuenta de Facebook (como yo) podrán llevarlo a los límites más extremos.
Recuerden en todo caso que nada de lo que acá hagan es ajeno a quienes son, esto simplemente es una ventana hacia el interior, a todas los deseos contenidos, a todas las configuraciones de nuestra existencia que simplemente no son aptas para la sociedad real. Sin embargo, al final, sólo uno mismo será quien se juzgue, quien se admire, quien se repugne, quien se admire por repugnarse, quien se repugne por admirarse, y así, ad infinitum.

" Algún día en cualquier parte, en cualquier lugar indefectiblemente te encontrarás a ti mismo, y ésa, sólo ésa, puede ser la más feliz o la más amarga de tus horas."
Pablo Neruda