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English version below

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Parece que fue ayer cuando rellenaba el formulario de registro en lugar llamado eRepublik. La consulta del tutorial no me solucionó la sensación de desorientación inherente a encontrarme con algo completamente nuevo. Tras algunos confusos clicks de ratón conseguí publicar mi CV con la intención de obtener un trabajo. Aquel fue mi primer paso en el Nuevo Mundo, el primero de muchos. Lejos de haber sido ayer, estos sucesos tuvieron lugar hace más de seis meses.

Lo primero que hice fue buscar el camino de baldosas amarillas que habría de llevarme al final, a la meta, fuera cual fuere. No lo encontré, no existía un rumbo preestablecido. Nadie podía ayudarme y decirme qué dirección tomar o qué pasos tenía que dar. Entendí que era yo quien tenía que trazar mi propio camino, delineándolo con cada paso que daba. Aprendí que no es bueno buscar atajos, que no se puede pretender avanzar en pocos días lo que se tarda meses en recorrer. Si bien puedes saltarte las leyes de éste mundo y crear enormes atajos, ¿de qué sirve?, la diversión no está en llegar a la meta, sino en recorrer el camino.

Poco a poco fui aprendiendo a desenvolverme en éste eMundo, conociendo sus rincones, sus particularidades, sus detalles… su funcionamiento al fin y al cabo. Me maravillé de su potencial y del abanico de posibilidades que nos ofrece.
Con el tiempo encontré mi propia respuesta a la pregunta planteada por el banner en la cabecera de la página: “¿Crees que puedes hacerlo mejor?”, “mejor no, pero lo haremos a nuestra manera”. Y esta respuesta es lo más atractivo que ha podido ofrecernos eRepublik, el poder crear nuestra propia sociedad. Las posibilidades son infinitas, el límite lo marca nuestra imaginación.
Cuando nacieron los primeros ciudadanos no existían empresas, ni partidos políticos, ni periódicos. En definitiva, no existía sociedad alguna. Sin embargo, a día de hoy existen sociedades muy avanzadas y desarrolladas, en algunos países más que en otros. Estas sociedades no han salido de la nada, las hemos construido nosotros, los ciudadanos. Día a día he observado el avance de ésta sociedad; embriagado por sus cambios, por sus altibajos y su inexorable avance; orgulloso de haber contribuido, de que mi palabra modelase, en parte, ésta sociedad; complacido de compartir y convivir con los ciudadanos que la constituyen, porque somos todos quienes le damos forma.

Hace ya 199 días que puse mis pies en este eMundo, y desde entonces, con cada palabra, con cada click, con cada paso, con cada acción, escribo mi propia historia, al igual que tú escribes la tuya. Cada día relleno una nueva página de éste diario, y seguiré haciéndolo, pues no alcanzo a ver cuántas me quedan hasta la contraportada.
Me tomo la libertad de plantearos la misma pregunta que desde hace mucho tiempo nos hace Alexis Bonte: “¿Cuál es la historia que escribiremos?”.

Muchos os preguntaréis qué es lo que me ha llevado a semejante divagación, y es que últimamente no paran de repetirse en mi cabeza los versos de un [a url=http://docs.google.com/Doc?id=dcgqqbxc_20p5pvdffh]poema[/a] que de memoria me aprendí.
Caminante, no hay camino, se hace camino al andar.

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Seems like yesterday when I was filling the registration form for a place called eRepublik. The tutorial didn't solve the feeling of disorientation due to the confrontation of something completely new. After a few confusing mouse clicks I managed to put out my CV with the intention of getting a job. That was my first step in the New World, the first of many. Not even close to yesterday, this happened over six months ago.

The first thing I did was look for the yellow brick road that should lead me to the end, the goal, whatever that might be. I didn't find it, there was no established direction to take. No one could help me and tell me what way to follow or what step I should take. I understood that I had to make my own way, drawing it with each step I took. I learn that taking short cuts is not a good idea, you can't pretend to reach far in few days when it normally takes months. You can indeed skip the laws of this world and create huge short cuts. For what? The fun isn't in reaching the goal, but in the walk towards it.

I learnt slowly how to move around in this eWorld, knowing its peculiarities, its details… basically how it works. I was amazed of its potential and the amount of possibilities it offers.
With time I found my own answer to the question asked in the banner on the top of the web. "Think you can do better?". "Not better, but we will do it to our way". And this answer is the most attractive that eRepbulik could offer us, the power to create our own society. The possibilities are endless, the limit is our imagination.
When the first citizens were born, there were no companies, no political partys, no newspapers. There were no society at all. However, today there are very advanced and developed societies, in some countries more than others. This societies didn't come from nowhere. We, the citizens, built them. Day by day I've observed the progress of this society; attracted by its changes, by its ups and downs and its inexorable advance; proud to have contributed, that my word helped model a part of this society; pleased by sharing and coexisting with the citizens that forms it, because we are all those who gives it its shape.

199 days have already past since I put my feet in this eWorld, and since then, with every word, with every click, with every step, with every action, I write my own story, as well as you write yours. Every day a fill another page in this diary, and so I will continue to do, because I can't reach to see the end of it.
I'll permit myself to ask you the question that Alexis Bonte has been asking us for a long time: "What history will we write?"

Many of you will ask yourselves what got me to think all this, and truth is that lately there are some verses of a poem that won’t stop repeating in my head.
Walker, there is no road, the road is made by walking.

Note: The verses belong to a well-known Spanish poem. I have translated them, but all the poetry gets lost on having done it.
Note: Thanks to Meiko for the translation