[Tapongresista] Mesa, comisiones y primeros debates

Day 3,114, 16:12 Published in Spain Spain by anaximenes

Lo primero, una fe de erratas, resulta que en el anterior artículo no os dije la verdad, si que tomé posesión del cargo, pero me dejé olvidada la ecartera. ¡Qué vegüenza! Menos mal que Manuel, congresista veterano y amable, tuvo la bondad de recordármelo y hacerme regresar a por ella.

Fails de congresista novato aparte, los días en el eCongreso son intensos. Antes incluso de que acabasemos de elegir a la Mesa ya se estaban produciendo los primeros debates sobre reformas de calado (y de no tanto calado) en la legislación eespañola. Ahora entraremos en ellos, pero antes repasemos los nombramientos.

La votación para la Mesa del eCongreso no fue muy reñida, ya que sólo había tres candidatos: Leogar, Vihesito y Miquel Bini que quedaron como sigue:

Presidente de la mesa: Vihesito (13 votos)
Vicepresidente primero: Miquel Bini (10 votos)
Vicepresidente segundo: Leogar (5 votos)

Las comisiones tampoco tuvieron demasiados candidatos, a excepción de Emigración donde hubo ocho. Al final su composición quedó así:

Presidente de la comisión: VaronAzul.
Comisionados: madridista1991, Garond89, Squanchy, x4Ragn0.

Para la CNSE (Comisión Nacional de Seguridad Económica) no fue necesaria votación, sólo hubo que ratificar a los candidatos: kekos00, Klaus Warwick, legen017, fernsuc. Para quien no lo sepa todavía queda un asiento en esta comisión y está abierta a cualquier ciudadano que se anime a supervisar las cuentas del Estado.

Por último, la Comisión de Educación de la que formamos parte Petrustt, Klaus Warwick y un servidor.

Respecto a los debates, son varios los temas sobre los que estamos trabajando los congresistas. Por una parte está la derogación de Ley de Decretos-ley ahora mismo sometida a debate. Todavía en el horno, se están cocinando una nueva Ley de emigración y una Ley sobre lenguas oficiales. También se discute la incorporación de Ley de Compromisos de los Congresistas (LCC) al reglamento del Congreso, es decir, cuestiones aburridas orgánicas.

Considero la oficialidad de las lenguas un debate estéril y ya lo expliqué en otro artículo. No estoy en contra de los decretos-ley per se, pero la Ley de Decretos-ley es francamente mala, así que es probable que se derogue o modifique substancialmente. Por eso quiero centrarme en la reforma de Ley de Emigración. Aunque no me extenderé demasiado para no hacer infinito este artículo.

Los aspectos que se discuten son dos: la agilización de la burocracia (estamos todos bastante de acuerdo en que se tarda demasiado en tramitar las solicitudes) y los criterios para conceder ciudadanías. Este último tema es más complejo.

Por el momento, yo soy el único que se ha manisfestado proclive a otorgar ciudadanías a aliados, enemigos, indiferentes, incluso nongratos. Vamos, a casi cualquiera. Creo que nuestra nueva posición como granero de bonus tras la guerra de recursos nos coloca ante una disyuntiva: supeditar nuestros bonus a otros paises, ya sea a través de una alianza o a través de un borrado permanente, o utilizar los bonus como reclamo para construir una eEspaña más fuerte, más solvente y más estable. Yo creo la clave para apostar por la segunda vía es hacernos con el recurso más importante del juego: los jugadores. Los países con más jugadores acaban siendo, antes o después, los más poderosos. Tener más jugadores significa tener más empresas, más dinero de impuestos, más daño y más recursos para enfrentarnos a cualquier enemigo. Nuestra posición tras la guerra de recursos nos permite atraer no ya a jugadores novatos, sino a jugadores veteranos, con experiencia y compromiso, tanques con mucho daño, holdings empresariales.

Se pueden crear empresas en eEspaña sin tener la ciudadanía española, pero esos empresarios no tendrían los bonus nacionales, sólo los locales, para tener los nacionales sus respectivos países de ciudadanía deberían conquistar la región en la que están sus empresas. Dándoles la nacionalidad les ofrecemos los bonus nacionales, les animamos a defender nuestro país en caso de invasión y sobre todo hacemos que sus TP se consigan por España, asique es de esperar que al menos una parte de su daño sea por España.

Defiendo otorgar CSs a aliados por razones obvias, pero también a enemigos porque es la mejor manera de que dejen de serlo. Si sus intereses coinciden con los nuestros, los enemigos de ayer serán los aliados de mañana. Con cierto control para evitar TOs, por supuesto. Además creo que cuantos más intereses de más jugadores estén comprometidos en eEspaña, más estable será el país y más reticentes serán nuestros enemigos a invadirnos.

Por último, ¿por qué otorgar ciudadanías a nongratos? Pues porque no hacerlo sólo persigue fines políticos. En realidad, nada impide a un nongrato hacerse otra cuenta en eEspaña, lo único es que tendría menos fuerza para luchar por nuestros intereses. Ya, ya os oigo, "los nongratos no lucharán por nuestros intereses", ya no lo hacen ahora, en ese caso no perdemos nada. Mantenerlos sin ciudadanía no impide que participen de nuestra sociedad, de hecho, muchos ya participan de nuestros foros y de nuestra prensa. Los sufrimos nosotros y pagan sus impuestos en otros paises. Por otra parte, mientras sean nongratos no contarán con el apoyo de ningún partido serio a la hora de presentarse a un cargo, de hecho se puede legislar una inhabilitación para evitar cualquier tentación de troleo.

Bueno, ya veis que se me pegaron las formas momias del eCongreso, en el futuro intentaré ser más breve. Los que fuisteis capaces de llegar al final, animaos a comentar.